Ana, veterana de la Asociación de Amas de Casa.

Ana, veterana de la Asociación de Amas de Casa. L.M

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Ana (72 años) lleva 44 años en la Asociación de Amas de Casa de Alicante: "Estas mujeres son mi vida entera"

Este viernes se ha celebrado la tradicional jornada de convivencia de la asociación, cuando las asociadas se han reunido frente al Mercado Central.

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Alicante
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Hay personas que forman parte del alma de una asociación, que la sostienen con su presencia discreta pero constante. Ana Sámper es una de ellas.

Veterana de la Asociación Amas de Casa de Alicante, lleva vinculada al grupo desde 1981, aunque su historia con la entidad comenzó mucho antes, de la mano de su madre.

Este viernes se ha celebrado la tradicional jornada de convivencia de la asociación, día en el que algunas de las más de 400 asociadas se han reunido en las escaleras del Mercado Central de la ciudad para inmortalizar el momento con una fotografía grupal, junto a la concejala de comercio, Lidia López.

44 años

"Mi madre era de las primeras asociadas, y ella me animó para que yo me apuntara", recuerda Ana con una sonrisa.

"Intenté aprender a coser, pero no aprendí, soy muy torpe", confiesa entre risas.

Sin embargo, eso no le impidió disfrutar de un sinfín de actividades creativas como manualidades, talleres, encuentros.

La asociación se convirtió entonces a lo largo de los años en mucho más que un espacio de aprendizaje: en un punto de encuentro, una segunda familia.

Toda una vida

Con los años, llegaron las responsabilidades: el trabajo dentro y fuera de casa, la maternidad, la falta de tiempo. "Tuve un parón de asistencia, pero siempre me he mantenido como socia", explica.

“La asociación siempre estuvo muy presente en casa porque era la vida de mi madre también”, asegura.

Hoy, ya jubilada, Ana ha vuelto con entusiasmo a las actividades: "Me encanta ir, me encanta estar y compartir con otras maravillosas mujeres, me da muchísima vida".

En sus palabras resuena la energía de quien encuentra sentido en el compartir y en la compañía de las demás. "Aquí veo que yo también puedo aportar, lo que sé, mis conocimientos, todo eso, compartirlo con otras personas es maravilloso, nos hacemos compañía".

Cuando se le pide resumir lo que significa para ella formar parte de Amas de Casa, no duda un segundo: "Me aporta vida y calidad de vida, mejor dicho".

Quizás esa sea la mejor definición del espíritu de la Asociación Amas de Casa de Alicante. Un espacio donde las mujeres tejen redes que trascienden generaciones, donde compartir es una forma de vivir.

Ana nació en Teruel, aunque se define con orgullo como alicantina de corazón.

Llegó a la ciudad con apenas 28 meses, y desde entonces su historia está entrelazada con la de esta comunidad que respira cercanía, memoria y alegría compartida.