Poco a poco, un hombre se llevó más de ocho toneladas de vigas de cobre de dos empresas de mármol en Novelda. Ese es el cargo por el que ha sido detenido un hombre de 51 que se dedicaba a venderlas luego troceadas como chatarra.

La investigación se inició a principios de este año cuando el equipo contra Robos en el Campo (ROCA) de la Guardia Civil de Ibi resolvía las numerosas denuncias recibidas por parte de dos empresas de mármol de Novelda. En ellas alertaban de la desaparición de vigas de cobre durante este primer trimestre de 2022. Ese fue el inicio de la Operación Derio.

El primer punto abordado fue que las denuncias procedían de dos empresas que estaban en propiedades colindantes entre sí y que ambos recintos se encuentran separados por un muro de media altura. En las dos se utilizaban las vigas como soporte para el almacenaje de las planchas de mármol que comercializan. De ellas había desaparecido un total de 8.500 kilos de vigas de hierro.

El detenido supuestamente aprovechaba que una de estas sociedades se encuentra actualmente inactiva, pero conservando en sus instalaciones estos materiales. De esta forma, la sustracción, pasaba más inadvertida. Además, jugaba a su favor la facilidad de acceso a su interior. En una se cortó una valla metálica perimetral y para la otra, únicamente sorteaba una barrera de acceso, por lo que no utilizaba la fuerza para ello.

La búsqueda

Las inspecciones de los agentes de la Guardia Civil y el seguimiento de los indicios les dirigieron hasta una empresa de comercio de chatarra y productos de desecho. Allí localizaron diversos efectos que coincidían con los denunciados. Eso les permitió ampliar la recopilación de información relevante que dio lugar a la confirmación de la identidad de la persona que había realizado las ventas.

Este hombre había realizado un total de 41 ventas desde comienzos de enero hasta mediados de marzo, el mismo periodo en el que se habían producido las denuncias. Además, el peso del material vendido también era similar, ya que ascendía a más de ocho toneladas. Por estas operaciones había conseguido un beneficio de más de dos mil euros.

Los agentes del Equipo Roca pudieron determinar que las piezas sustraídas eran de características idénticas a las que se localizaron. De ahí que estimaron que, atendiendo al total de hechos objetos de denuncia y al número de ventas realizadas, era presumible suponer que el presunto autor había accedido a los recintos hasta en 41 ocasiones.

Sin embargo, del total sustraído únicamente se han podido localizar quinientos kilos de vigas de cobre. Dado que el material denunciado por ambas mercantiles era análogo, tanto en tamaño, forma, color y material, para los agentes ha supuesto un entorpecimiento el hecho de estimar qué corresponde a cada una de ellas. Debido a este hecho, los efectos intervenidos no han podido ser devueltos a sus legítimos propietarios.

Finalmente, el pasado 21 de marzo, el Equipo Roca de la Guardia Civil de Ibi procedió a la detención en Novelda del presunto autor de los hechos, un varón español de 51 años, el cual no tenía antecedentes por hechos similares. A este se le atribuye un delito continuado de robo con fuerza en las cosas y un delito continuado de hurto, ha causado un perjuicio económico de aproximadamente diez mil euros. Fue puesto a disposición del Juzgado de Instrucción número 3 de Novelda, el cual decretó la libertad con cargos.