Imagen de algunas de las pinturas.
Encuentran fragmentos de pinturas del siglo II d.C en las excavaciones arqueológicas de la villa romana de Barberes Sur
También se están descubriendo motivos propios de una villa del Alto Imperio.
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Siguen los trabajos en la villa romana de Barberes Sur en Villajoyosa.
Concretamente, han sido hallados más de 4.000 fragmentos de pinturas murales que adornaban las salas nobles a comienzos del siglo II d.C.
Estos trabajos arqueológicos han revelado parte del trazado original de la construcción, edificada en tiempos del emperador Trajano. La villa contaba con una zona destinada a actividades industriales, un atrio o patio con varias habitaciones (posiblemente ocupadas por el personal de servicio), y un amplio jardín al aire libre con un pórtico sostenido por grandes columnas.
Alrededor de este espacio se disponían estancias de carácter señorial, ricamente decoradas en su época, de las cuales hoy solo permanecen los cimientos.
Los muros, hechos con tapial (una técnica de construcción con arcilla compactada), se encontraron colapsados dentro de las estancias y del patio porticado. En una de las salas principales, el derrumbe se conservaba en su totalidad, lo que ha permitido una excavación especialmente cuidadosa al haberse preservado fragmentos de estuco pintado.
Estos restos, antes de ser extraídos, fueron estabilizados por el equipo de restauración, numerados y registrados mediante fotogrametría para facilitar su futura reconstrucción, con el objetivo de aproximarse a su diseño original.
Finalizada la excavación, ha comenzado en el laboratorio de restauración de Vilamuseu la fase de consolidación y recomposición de los paneles decorativos. Este proceso ha permitido empezar a vislumbrar la riqueza ornamental de una de las estancias. Hasta el momento, se ha logrado reconstruir parcialmente un panel con 22 fragmentos, de un total de 866 recuperados, en el que se aprecia una elaborada decoración con guirnaldas vegetales, aves intercaladas y una moldura que remataba la parte superior.
Los trabajos de limpieza están siendo apoyados por voluntarios del Vilamuseu, bajo la supervisión del departamento de conservación. Entre las piezas que aún están siendo inventariadas y restauradas, destacan fragmentos de estucos curvos que imitaban columnas estriadas, los cuales revestían las columnas que sostenían el pórtico alrededor del jardín residencial de la villa.
Esta campaña arqueológica se está desarrollando en un área de 842 m², correspondiente a una gran villa del Alto Imperio situada junto a la antigua calzada costera que unía la ciudad romana de Allon con su entorno. La intervención está siendo llevada a cabo por el Servicio Municipal de Arqueología y la empresa especializada Alebus Patrimonio Histórico.
