La Guardia Civil ha pillado a varios vecinos saltándose el desalojo de varios municipios por el incendio de Bejís a través de pistas forestales, desde las que trataban de evitar los controles para acceder a sus viviendas en las poblaciones de Bejís, Torás, Teresa o Sacañet.

Así lo ha manifestado el presidente de la Diputación de Castelló, José Martí, al comentar los problemas derivados por el desalojo de viviendas en estos municipios por el incedio forestal iniciado el pasado lunes en el término de Bejís, en la comarca castellonense del Alto Palancia.

Martí ha indicado que está en contacto permanente con los alcaldes de las poblaciones desalojadas o confinadas, que "tienen que soportar una presión importante de sus vecinos", que quieren regresar cuanto antes a sus propiedades.

Ha explicado que se está evaluando en cada reunión con la dirección técnica del incendio la posibilidad de que "finalice algún desalojo", pero lo primero es "ser muy prudente" porque "ha habido reproducciones", que podrían registrarse también hoy si cambia el viento.

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Ha adelantado la posibilidad de que los vecinos de Bejís y Torás sean los primeros en volver a sus domicilios, pero no antes de que mañana se realice una evaluación de la situación del incendio.

En referencia a si los vecinos están volviendo a los pueblos desalojados por pistas forestales, Martí ha indicado que "algunos sí que lo están haciendo", pero "la Guardia Civil está vigilante" para tratar de impedirlo, aunque ha insistido en que los agentes "acompañan a aquellos vecinos que tienen animales para que puedan acceder a darles comida y agua".

Según Martí, se trata de una zona con "muchas pistas forestales y, efectivamente, algunos vecinos se están saltando la prohibición. Sería lamentable que la Guardia Civil tuviera que actuar de una manera más contundente".

Ha comentado también que "están pudiendo volver no solo los que tienen ganado, sino también los que tienen perros o pájaros para darles comida".

Objetivo: salvar la Calderona

La Comunitat Valenciana lucha desde hace una semana contra el reloj y con todos los medios disponibles contra varios de los incendios forestales más devastadores de las últimas décadas y con especial intensidad en el de Bejís, dada la proximidad de las llamas a la Sierra Calderona, el pulmón verde de la provincia de Valencia.

A lo largo de la jornada, más de 40 medios aéreos y alrededor de 300 personas han trabajado en la extinción de un incendio que supera ya las 19.000 hectáreas de extensión, en un perímetro de 140 kilómetros a caballo entre las provincias de Castellón y Valencia.

Además del frente principal, en las últimas horas se ha declarado un incendio en la zona oeste del parque natural de La Calderona, en el término municipal de Olocau, cuya evolución parece favorable, puesto que se han ido reduciendo los medios que han actuado en la zona.

La Sierra de Calderona fue declarada Parque Natural en 2002 y alcanza a 18.019 hectáreas de una quincena de municipios al noroeste del área metropolitana de València y con fauna y flora autóctonas y protegidas.