El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, antes de su comparecencia este martes en la Moncloa.

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, antes de su comparecencia este martes en la Moncloa. Efe

Política TRIBUNAL CONSTITUCIONAL

Moncloa y el PP trabajaron con sus vocales afines del CGPJ para renovar el TC y parar la crisis institucional

El Gobierno "congela" la polémica reforma del sistema de elección al carecer ya de objeto el cambio de ley.

28 diciembre, 2022 02:44

El Tribunal Constitucional quedará al fin renovado en los próximos días cuando se incorporen como nuevos magistrados Juan Carlos Campo y Laura Díez, propuestos por el Gobierno, y María Luisa Segoviano y César Tolosa a propuesta del Consejo General del Poder Judicial.

De esa forma, pasará de tener mayoría conservadora a tener una clara mayoría progresista, a la espera de que los miembros del tribunal elijan a su presidente, posiblemente, Cándido Conde Pumpido.

Y, además, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, está dispuesto a no presentar la proposición de ley que modificaba el sistema de elección de los magistrados del TC en el Consejo. Esa controvertida reforma legal carece de sentido ya una vez que se ha producido la renovación y, en todo caso, no sería necesario ese mecanismo hasta dentro de diez años.

De esa forma, parte de la crisis institucional entrará en vías de solución, como consecuencia de la actuación de Moncloa y del PP, a través de los vocales conservadores y progresistas. Quedará eso sí pendiente la renovación del CGPJ que muy probablemente no se producirá ya en esta legislatura por el bloqueo del PP.

Este acuerdo que pacifica en parte las instituciones se produce poco después del llamamiento del Rey para frenar la "erosión de las instituciones", aunque se empezó a gestar el viernes, antes del discurso de Navidad del monarca.

Además, el Gobierno ha sentido la presión de la Comisión Europea que objetaba la reforma de la ley orgánica que rebajaba la mayoría necesaria en el CGPJ para renovar el TC, de la misma forma que hace un objetó la rebaja de la mayoría para renovar el Consejo.

Para lograrlo, Moncloa y el PP han trabajado activamente en los últimos días con los vocales progresistas y conservadores del CGPJ, según relatan fuentes del Gobierno y del PP. 

Los conservadores, de acuerdo con el PP, trabajaron a su vez en una solución que consistía en mantener a su candidato, César Tolosa, y proponer a uno progresista distinto al que había presentado antes el sector minoritario.

[María Luisa Segoviano y César Tolosa, nuevos jueces del TC en una decisión unánime del CGPJ]

Lo intentó con el magistrado Pablo Lucas, pero el sector progresista lo rechazó. En los últimos días surgió el nombre de María Luisa Segoviano, progresista propuesta por los conservadores. Detrás de esa propuesta estaba el PP en busca de una salida, según fuentes de este partido.

Moncloa vio en esa propuesta una posible salida y “trabajó” con los vocales progresistas para que lo aceptaran. El resultado ha sido la votación de este martes en el pleno del CGPJ donde los dos nombres propuestos han sido aceptados por unanimidad.

Satisfacción y reproches

Horas antes, el presidente del Gobierno fue preguntado en rueda de prensa si renunciarían a la reforma del sistema de elección si había acuerdo, y se limitó a responder que en ese caso ya no sería urgente. Fuentes de Moncloa explican que estudian no presentarla.

De hecho, ya se frenó el viernes la presentación, pese a que ya había sido tratada con los grupos parlamentarios del bloque de investidura.

Con la solución alcanzada, el Gobierno ha logrado que el Constitucional tenga mayoría progresista, como correspondía, y se ha evitado el desgaste de tramitar esa controvertida reforma legal.

De ahí la satisfacción de fuentes oficiales que señalan que el Gobierno “valora muy positivamente el nombramiento de los dos magistrados del TC por parte del CGPJ. Es lo que esperábamos desde hace meses y a lo que obligaba la Ley desde septiembre. Pese al retraso y el bloqueo provocado por el PP, hoy el CGPJ ha cumplido sus obligaciones, la Ley y la Constitución”.

“El Gobierno desea que el nuevo TC recupere el prestigio, la objetividad y la credibilidad dañadas después de las insólitas decisiones adoptadas en las últimas fechas”, añaden.

A su vez, el PP puede explicar que si no hubiera paralizado en el TC la tramitación de la proposición de ley por la forma en la que se tramitaba, hubiera sido aprobada y hubiera sido imposible el acuerdo en el CGPJ.

Los populares aseguran que es significativo que, finalmente, el acuerdo haya venido sin imposiciones de ninguna parte.

“Ha quedado demostrado que aquellos a los que el Gobierno insultó gravemente, acusándolos de bloquear los órganos constitucionales, han materializado la propuesta que finalmente ha facilitado el acuerdo. Lo mínimo que debería hacer el Ejecutivo es disculparse con todos y cada uno de los vocales a los que ha insultado en las últimas semanas”, aseguran fuentes del PP.

Añaden que “el Consejo ha cumplido con su deber y ha elegido dos perfiles independientes. Ahora, corresponde al Gobierno cumplir con su deber y elegir dos perfiles de ejemplaridad contrastada y no dos altos cargos del Ejecutivo de Pedro Sánchez”.

Por último, dicen lamentar “que, en el afán de Pedro Sánchez de intentar controlar las instituciones, el Gobierno haya quedado retratado. El presidente inició una reforma para alterar el sistema de mayorías de los órganos constitucionales. Haría bien Pedro Sánchez en desandar el camino recorrido hasta ahora y devolver las competencias hurtadas al CGPJ”.