Natalia Rodríguez, personal shopper inmobiliario en Galicia.

Natalia Rodríguez, personal shopper inmobiliario en Galicia. Cedida

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Natalia Rodríguez, personal shopper inmobiliario en Galicia: "No hay burbuja, pero la gente no podrá comprar"

Desde su oficina en Vigo, ofrece sus servicios a quienes quieren comprar una casa o piso en territorio gallego sin perder tiempo ni asumir riesgos: rastrea el mercado, analiza legal, técnica y urbanísticamente la vivienda, negocia el mejor precio y acompaña al comprador hasta la firma en notaría, además de ofrecer un servicio de posventa.

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La figura del personal shopper inmobiliario es todavía una gran desconocida en Galicia. En ciudades como Madrid o Barcelona está más a la orden del día, así como en otros países europeos, pero su implantación vive todavía sus primeros pasos aquí.

Igual que muchos le encargan la organización de su boda o de un evento a un profesional, esta figura realiza una labor similar, pero para comprar una vivienda. En resumen, rastrea el mercado, analiza legal, técnica y urbanísticamente la vivienda, negocia el mejor precio y acompaña al comprador hasta la firma en notaría; además, ofrece un servicio de posventa.

En Vigo encontramos a una de las pocas personas que se dedica a esta profesión, al menos de manera exclusiva. Natalia Rodríguez nació en Argentina, pero lleva 25 años viviendo en Galicia; primero, en una aldea cerca de Carballiño, donde tenía familia, y después, en la ciudad olívica.

En 2002 comenzó a trabajar en el sector inmobiliario, pero en "agencias tradicionales"; una época que era "una locura", antes de que en 2008 explotase la burbuja inmobiliaria. Después, retomó la profesión, pero "siempre del lado del vendedor".

Del lado del comprador

Hace seis años conoció la figura del personal shopper inmobiliario y decidió pasarse "al otro lado": ahora, trabaja única y exclusivamente para el comprador, y lo hace con todo el bagaje de haber estado en el lado contrario.

"Me daba cuenta de que el comprador se quedaba solo, sin respaldo", explica a Treintayseis, ya que vender es el objetivo y, a mayor precio, más comisión. "Ahora, poniéndome del lado del comprador, ya sé por dónde puede ir el otro y es la manera de poder ayudarlos. Además, es un servicio personalizado", continúa.

Natalia Rodríguez, personal shopper inmobiliario en Galicia.

Natalia Rodríguez, personal shopper inmobiliario en Galicia. Cedida

Un trabajo que realiza para aquellos que quieren comprar una vivienda en Galicia, "en cualquier zona y en cualquier provincia". Y es desde el principio hasta el fin del proceso: desde la búsqueda hasta la firma en la notaría, pasando por la negociación del precio.

"El comprador confía en ti, tú eres sus ojos, así que es importante saber cómo es su estilo de vida, saber bien qué es lo que quiere, para buscarle esa vivienda", asegura Natalia, que se patea zonas urbanas y rurales, entabla relación con vecinos, revisa las actas de la comunidad y realiza todos los trámites necesarios para que el cliente "no se lleve una sorpresa". "Si tiene cualquier cosa, que lo sepa; si luego quiere seguir adelante, perfecto", matiza.

Perfil de clientes

Entre el perfil de sus clientes están extranjeros, normalmente del norte de Europa, que buscan casa en Galicia. Ella les manda vídeos de las opciones que va encontrando, lo más ajustadas a sus intereses, para que el desplazamiento hasta el lugar sea ya para verlo in situ.

Examina cómo está la situación urbanística del inmueble, manda a un arquitecto para que revise su estado, hace inventario con lo que se debe de quedar, tras negociarlo con el vendedor, algo que revisa antes de ir a la notaría; y ahí, finalmente, acompaña en la firma, además de un servicio posventa.

Otros perfiles de clientes son aquellos que viven en España, pero fuera de Galicia, y aquellos que viven aquí, pero no tienen tiempo para buscar en profundidad o, incluso, personas "tímidas" que buscan a alguien que negocie, pregunte y lleve todos los trámites burocráticos a cabo.

Eso sí, destaca las redes sociales, especialmente Instagram, como una herramienta perfecta para que los potenciales clientes encuentren sus servicios. Además, dispone de un canal de Youtube donde, entre el contenido, se pueden encontrar consejos relacionados con el mercado inmobiliario o trámites que son prácticamente desconocidos para muchos.

Las tarifas dependen de múltiples factores; desde la localización donde se quiere realizar la búsqueda de vivienda, como los trámites a realizar por parte de Natalia, que en el caso de los extranjeros puede ser más laborioso.

Los pagos se realizan cuando comienza el trabajo el primero; después, cuando se firma el contrato de arras, con la vivienda ya preparada para la compra; y, por último, con la firma en la notaría.

Un mercado inmobiliario complicado

Como reconoce la propia Natalia, hoy el mercado inmobiliario está muy complicado. Destaca, especialmente, A Coruña, dentro del territorio gallego, como "la peor zona para encontrar algo que tenga un precio relativamente bueno". También la provincia de Pontevedra, donde los precios "siguen subiendo", al igual que en Vigo.

"Entiendo que no va a haber una burbuja, a menos que pase algo en el mundo, sino simplemente que la gente no va a poder comprar. Eso es lo que va a pasar, porque no tiene nada que ver esto con lo del 2008", reflexiona en su análisis del mercado actual.

"Además, noto que los vendedores están en actitud de 'esto es lo que hay: si te gusta, bien, y si no, no", añade, ya que "lo que hay ahora mismo es falta de oferta, por lo tanto suben los precios". También incide en mucha gente que contacta con ella que están "con precios de hace dos años". "Yo les explico que en este tiempo todo ha subido bastante, y aunque han bajado los tipos de interés, ese precio ya no existe en el mercado", lamenta.

Preguntada por el precio actual para vivir, por ejemplo, en Vigo, es muy concisa: "Si hablamos de irnos a zonas fuera del centro, y con garaje, a partir de 200.000 euros, que eso no se había visto nunca", sentencia.