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Trabajadores de Vitrasa volvieron a tomar las calles de Vigo para pedir un convenio digno

Han reclamado una actualización de sus salarios, congelados desde 2020; la instalación de baños en las cabeceras, y que se cumplan los tiempos de descanso
Imagen de la manifestación de Vitrasa.
CIG
Imagen de la manifestación de Vitrasa.
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Trabajadores de Vitrasa, la concesionaria del transporte urbano vigués, volvieron a tomar las calles este viernes para exigir una solución al conflicto que mantienen, desde hace meses, con la empresa y el Concello de Vigo, y para reclamar la firma de un convenio digno.

Detrás de una pancarta en la que se podía leer "Vitrasa solución", los trabajadores -en plena jornada de huelga- marcharon por las calles de la ciudad en respuesta a la convocatoria de los sindicatos CIG, UGT, USO y Comisiones Obreras (CC.OO.).

Además de las reivindicaciones mencionadas, los trabajadores han exigido una actualización de sus salarios, congelados desde el 2020 -año en el que caducó el convenio-, además de otras mejoras estructurales como la instalación de baños en las cabeceras para que los conductores tengan un lugar donde hacer sus necesidades en sus tiempos de descanso. También ha solicitado, precisamente, un aumento de los citados tiempos, que han calificado de "ilegales" por no alcanzar los 15 minutos establecidos por ley y porque "los tiempos de las rutas no están bien medidos", han lamentado.

La de este viernes no ha sido la única huelga convocada en los últimos días, ya que se celebrará otra el próximo día 1 de noviembre.

Por su parte, la CIG -que preside el comité de empresa- criticó en un comunicado que tras más de dos años de movilizaciones y paros, Vitrasa se niega a negociar un nuevo convenio que ponga fin al conflicto "aludiendo importantes pérdidas económicas y a la falta de un reequilibrio económico por parte del gobierno local". En este extremo, los trabajadores siempre han reclamado al Ayuntamiento que haga de mediador. Sin embargo, y según subraya Europa Press, desde el gobierno de Abel Caballero siempre se han mantenido al margen, indicando que es un problema entre una empresa y sus empleados.

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