Celta 3 - 1 Granada: un Aspas de otro planeta lidera el resurgir
Dentro de todos los tópicos del mundo del fútbol, el de "la pelota siempre al 10" ha adquirido más sentido que nunca esta semana. Un Iago Aspas exultante lideró hoy al Celta en uno de los mejores partidos a nivel colectivo de los últimos años. Pese a perdonar media docena de ocasiones muy claras, los vigueses no se achicaron al verse por detrás en el marcador y lograron la primera victoria de la era Coudet.
El técnico argentino se estrenaba por fin en el banquillo y decidía mantener el esquema y los jugadores que tan buenas sensaciones dejaron en Sevilla durante 40 minutos, con la entrada de Araujo por Aidoo en defensa. De esta forma, el Celta salió a dominar el partido sin complejos, aprovechando la doble línea en ataque para combinar entre sus jugones.
Mina en el minuto 6 y Nolito poco después perdonaron dos ocasiones muy claras dentro del área. La libertad de movimiento de Iago Aspas le permitía generar ocasiones casi en cualquier posición, aunque sus compañeros no pudieran rematarlas. Hugo Mallo también tuvo una pasado el cuarto de hora, con una parada de Rui Silva a bocajarro.
Pero en Primera División este tipo de regalos al rival se pagan y el Granada se adelantaba en el marcador con su primera ocasión. Tras una recuperación de Machís, Luis Milla filtró un pase de campo a campo para Luis Suárez. El delantero colombiano superaba con facilidad a Renato Tapia y batía con una sutil vaselina a Rubén tras 50 metros de carrera. La salida de posición y error en el pase de Murillo resultó crucial en toda la jugada.
El Celta demostró que la llegada del Chacho les ha dotado de carácter, y en la siguiente jugada lograría el empate. Tras una rápida transición hasta Aspas en la frontal del área, Olaza servía en bandeja el gol a Nolito en el área pequeña.
Con el paso de los minutos, el conjunto local mostró todos sus recursos en ataque para llegar al área rival, aunque a menor velocidad que en el primer cuarto de hora. Mientras, el Granada parecía fiar todo a la velocidad de Luis Suárez en las contras y su seguridad en defensa. Solo un paradón de Rui Silva evitaría un golazo por la escuadra de Brais Méndez desde fuera del área, mientras que el Granada dispuso de hasta tres ocasiones antes del descanso.
Con la reanudación en la segunda parte, ambos equipos bajaron el ritmo pero mantuvieron sus estrategias. En los primeros 20 minutos, el Celta dispuso de hasta tres ocasiones muy claras de Mina, Tapia y Nolito; incapaces de marcar dentro del área. Los nazaríes tampoco mostraban síntomas de mejora pese a sus cambios y ni se acercaron la portería de Rubén.
La libertad de movimiento de Aspas, clave en la creación de juego
Pero a 15 minutos del final, el Coudet tocaba la tecla adecuada con los cambios. Baeza y Beltrán entraban por unos superlativos Nolito y Denis Suárez, cruciales en la creación pero sin gol. El cordobés lograría su primer tanto con la celeste tras una nueva genialidad de Aspas dentro del área, aunque necesitó dos remates para lograrlo.
En la siguiente jugada, el delantero moañés volvía a romper la defensa nazarí con su velocidad y tras superar a Rui Silva, daba su enésima asistencia para que Fran Beltrán marcara a placer. El partido quedaba sentenciado con una exhibición del diez celeste, que reconocía al término que el resultado "no era justo por las ocasiones que habían tenido". Solamente la expulsión de Okay en los minutos finales tras una tangana con Luis Milla emborronó un encuentro que sirve para huir del puesto de colista.
