Un tribunal de Moscú ha ordenado la detención del destacado productor de cine Alexander Rodnyansky, nominado al Oscar en 2014 por la película Leviatán, y el dramaturgo Ivan Vyrypaev por sus críticas abiertas a la guerra de Ucrania y por "difundir información falsa" sobre el ejército ruso.

Según Associated Press, ingresarían en prisión preventiva una vez que sean detenidos por las autoridades rusas o extraditados desde el extranjero. Están incluidos en la lista federal de personas más buscadas del Ministerio del Interior ruso.

Tras iniciar una prolífica carrera mediática en Kiev, su ciudad natal, Rodnyansky fundó la primera cadena de televisión independiente de Ucrania y se convirtió en uno de los productores más influyentes de Rusia. Actualmente divide su tiempo entre Ucrania, Europa y Los Ángeles, donde tiene su productora AR Content.

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El productor ucraniano ha sido una de las figuras más influyentes del cine ruso de las últimas décadas, pero huyó del país pocos días después de la invasión de Ucrania, tras recibir un aviso de que sus críticas abiertas a la guerra le habían puesto en el punto de mira del Kremlin. Sus colaboraciones con el cineasta Andrey Zvyagintsev le valieron nominaciones al Oscar en la categoría de lengua extranjera por las películas Leviatán y Loveless.

En 2021 se convirtió en el primer productor de fuera de Estados Unidos o el Reino Unido en firmar un acuerdo de desarrollo con Apple TV+. Lo hizo través de su compañía, que tiene sede en Los Ángeles y cuyos proyectos no se han visto afectados como consecuencia de la guerra en Ucrania. 

Cuando se marchó de Rusia en 2022, Rodnyansky declaró a Variety que había cortado completamente los lazos que lo ataban allí: "Lo dejé todo. La empresa, la casa, todo. Todo lo que tenía". Dijo que creía que un regreso sólo sería posible "Cuando acabe la guerra. Creo que Rusia debe ser castigada de muchas maneras. Es merecido". Dejó en Moscú unas quince series en desarrollo y producción. 

El popular dramaturgo, director y actor Vyrypaev vive y trabaja en Varsovia desde hace varios años y también se ha manifestado en contra de la invasión rusa de Ucrania.

La amplia campaña de represión contra la disidencia del Kremlin ha criminalizado las críticas a la guerra. Artistas, actores, cineastas y celebridades han sido especialmente señalados por el gobierno y los medios de comunicación favorables al Kremlin. Además de multas y penas de cárcel, los acusados han sido despedidos, incluidos en listas negras o tachados de "agentes extranjeros", por lo que se han visto obligados a huir de Rusia.