Órdago como respuesta a otro órdago. Se acabó el tiempo y Cataluña le ha mandado un mensaje retador a la justicia española: “No devolveremos las obras de arte del pueblo de Sijena (Huesca) aunque lo mande un juez”. El lunes se acababa el plazo para que la Generalitat de Catalunya trasladase a Aragón las 44 pinturas emplazadas en el Museo de Lleida que, por ley, pertenecen a Sijena. Los jueces han ordenado que sean retornadas a su pueblo de origen, pero en Cataluña hacen oídos sordos. ¿Cuál ha sido la respuesta de este pequeño pueblo aragonés? Pedir la imputación judicial del conseller de Cultura de Cataluña, Lluís Puig y de su predecesor en el cargo, Santi Vila, y solicitar a la policía judicial que entre en el Museo de Lérida y se incaute de estas obras de arte.

Ildefonso Salillas, alcalde de Sijena, advierte de que “vamos a llegar hasta las últimas consecuencias en este asunto. No nos van a parar. Estamos reclamando algo que es nuestro y dos jueces nos han dado la razón”. Por llegar hasta las últimas consecuencias se refiere a la imputación penal “de los responsables de este expolio”. Y habla en plural porque Sijena ha pedido al juez, no sólo la imputación penal del actual responsable de la cartera de Cultura en Cataluña, sino también de su antecesor. Le piden responsabilidades penales al anterior conseller, Santi Vila, y al actual, Lluís Puig. Piden que se les acuse de desobediencia, desacato y apropiación indebida. Una acusación que, si prosperase, podría suponer una condena a los dos políticos de hasta 6 años de prisión.

Retablos, cuadros y murales conforman el grueso del tesoro secuestrado de Sijena

DECEPCIONADOS E INDIGNADOS

“Estamos decepcionados e indignados”, cuentan desde Sijena. A pesar de que en este pequeño pueblo oscense de menos de 500 habitantes ya temían la inacción del gobierno catalán, no perdían la esperanza. “Queríamos que las enviasen motu proprio y que no hiciese falta la intervención de la policía judicial. Pero en Cataluña han hecho caso omiso ya no de nuestras exigencias, sino de dos sentencias judiciales”.

Cabe recordar que la primera sentencia data de julio de 2016. Un juez de Huesca ordenó que las obras de arte que fueron trasladadas desde Sijena hasta Cataluña en varios momentos del siglo XX fuesen devueltas y repuestas a su enclave original. Sin embargo, desde el departamento de Cultura de la Generalitat han argumentado mil razones para desobedecer. Que la sentencia no es firme, que las obras de arte podrían sufrir daños irreversibles durante el traslado debido a su fragilidad, que Sijena no está preparada para recibir todo este material…

“HASTA LAS ÚLTIMAS CONSECUENCIAS”

Ahora, después de que los jueces hayan dado un ultimátum a la Generalitat, la postura desde Cataluña sigue siendo inflexible. El plazo para la devolución acababa esta semana, pero todo sigue igual. Esto ha provocado el hartazgo de los aragoneses: “Estamos indignados ante la flagrante desobediencia a la autoridad judicial por parte de la Generalitat de Cataluña. Si nos saltamos el Estado de Derecho y las sentencias judiciales, ¿qué nos queda? La Justicia está para servir a todos y todas”, declaran desde la plataforma Sijena Sí, desde donde han puesto en marcha una campaña de recogida de firmas en la página www.sijenasi.com con el objetivo de que que les devuelvan las 44 pinturas.

Los portavoces de Sijena protestan en la puerta del Museo de Lérida

“Esta actitud de los gobernantes catalanes enfrenta a dos pueblos hermanos, el catalán y el aragonés” cuenta Juan Yzuel, responsable de la plataforma. Apunta Yzuel que “todo este asunto se ha instrumentalizado políticamente dentro del conflicto que tiene montado Cataluña contra España”.

POSIBLE PREVARICACIÓN

Por su parte, los responsables de los museos catalanes siguen sin inmutarse. Publicaron dos notas de prensa en las que insisten en que están actuando “siempre por motivos técnicos y de defensa de las obras de arte”. Desde Cataluña destacan que estas obras están catalogadas como patrimonio protegido catalán. Los aragoneses responden que estas pinturas ya estaban protegidas como patrimonio artístico español: “Proteger algo que ya está protegido con el único objetivo de quedárselo puede considerarse prevaricación”, adelanta el alcalde de Sijena.

Los habitantes de Sijena se manifestaron en el Museu de Lleida reivindicando que les devuelvan sus obras de arte

No obstante, el caso va a quedar en stand-by durante el mes en curso. Agosto está considerado judicialmente inhábil, por lo que, a pesar de que ya ha concluido el plazo para la devolución, durante los próximos 30 días nadie va a actuar al respecto. El mes de vacaciones se respeta en los juzgados, así que todo va a quedar en el aire hasta el próximo mes de septiembre. Mes que, por cierto, se presume caliente en cuanto a las reivindicaciones soberanistas catalanas se refiere. Se trata del mes clave en lo referente a los preparativos de la consulta que el gobierno de Puigdemont quiere llevar a cabo el 1 de octubre. En Sijena tienen claro que “van a utilizar este asunto, que nada tiene que ver con la pelea entre Cataluña y España, para su propio interés”.

Así, el pequeño pueblo aragonés de Sijena, con menos de 500 habitantes y un sólo abogado trabajando gratis contra el potente gabinete jurídico de la Generalitat, tiene la razón de su parte. Y no les importa que el mes de septiembre sea el más crucial para el proceso independentista catalán. Los aragoneses quieren su obras de arte de vuelta y pasarán por encima de quien sea para recuperarlas.

Noticias relacionadas