Germán Alexander Herretes habla de su empresa, Auxua, en un acto.
Ofrecido por:
Obras y reformas con premio en A Coruña: "Morimos por y para el cliente, eso es alta calidad"
El accésit de los Premios AJE Emprende que destaca la creación de empleo fue a parar en 2025 a Auxua, una joven empresa coruñesa de construcción y reformas que transmite cercanía y dedicación plena en sus propuestas. Su director, Germán Alexander Herretes, aspira a crecer "siempre con cabeza"
Más información: El talento emprendedor brilla en la XXVI edición del Premio Emprende AJE Coruña
Si hubiera que premiar el entusiasmo por una dedicación o un trabajo, Auxua siempre sería candidata. Echando la vista atrás, explicando su ocupación, refiriéndose a su plantilla o proyectándose en el futuro más próximo, Germán Alexander Herretes Balsa desprende satisfacción por su actividad.
Es el director de Auxua, joven empresa de la construcción y las reformas con sede en El Temple, Culleredo (A Coruña) que ha obtenido el Accésit de Creación de Empleo en los premios AJE Emprende 2025.
Honestidad, realismo, ganas, ilusión y buen rollo son sensaciones que deja una conversación con Herretes, de esos profesionales que disfrutan más "con cemento hasta las orejas" que en una oficina.
¿Por qué nace Auxua?
Muy sencillo, surge de un mal jefe que me castigó durante muchos años. Cuando dejé aquel trabajo mi idea fue la de vivir de la construcción, que es lo que me apasiona: resolver los problemas que tenemos todos, el de encontrar un fontanero, un albañil, hacer una buena reforma... Empezó con un poco de locura: en unas Navidades mi madre me preguntó qué regalo quería y le pedí un taladro, una batería y una caja de herramientas. En febrero hará dos años.
¿Y qué tal jefe es usted?
Trato de ser un buen jefe y una buena persona, lo intento, pagar por encima del salario base y de convenios. Yo soy albañil, el arquitecto era mi padre, y he hecho trabajos de diseño, masters de dirección de obra y de todo tipo. Soy autónomo. En enero ya empezamos como sociedad limitada.
Resaltan en su web la especialización en "proyectos de alta calidad". ¿Qué clase de proyectos y de calidad?
Tú ajustas el presupuesto lo máximo posible al cliente intentando ser justo, y luego te das cuenta de que la gente te compra un Seat Ibiza pero quiere que hagas un Ferrari. Llega un momento en que dices: Ferrari para todos. No somos caros pero somos realistas.
"Quiero tener buenas personas en el equipo y ser felices. Entre todos hemos conseguido involucración, dedicación, buen trato y que nos guste trabajar"
Siempre vas a querer las cosas bien hechas, con cuidado y cariño, sin prisa. Eso cuesta más. A eso nos referimos con la alta calidad, y trabajamos con buenas marcas. Mis chicos y yo intentamos morir por y para el cliente: eso es la alta calidad, más alta que la del material con el que trabajamos.
¿Eso de morir por el cliente se refiere a brindarle una atención muy directa, muy cercana?
Exacto, y eso a veces quizá es demasiado. Lo que nos diferencia es que mientras llamas a tu albañil y te contesta o no contesta o te atiende cuando puede, nosotros estamos muy pendientes del cliente. Mi teléfono no para de sonar, me voy a ver cómo estamos pintando en una casa, cómo va un baño, con frecuencia estoy lleno de pintura y con cemento hasta las orejas, cargando, limpiando, ayudando, lo que haga falta.
¿En qué se concentran más, en obra nueva o en reforma?
Ahora estamos con una reforma integral de una casa prácticamente nueva, otra de una casa pequeña en Culleredo, arreglamos el techo del Náutico y un baño en El Temple, pintamos una nave en Pocomaco y estamos alicatando unas escaleras.
También hacemos mantenimiento. Nos acaban de llamar por una humedad en un pisito. Intentamos no dejar tirado a nadie, aunque los trabajos pequeños son cada vez más problemáticos, es decir, que implican la misma logística que los grandes aunque no sean tan jugosos.
Por lo que cuenta, no paran.
Llevo seis meses sin descanso, dos meses trabajando sábados y domingos. Y normalmente trabajo de 12 a 14 horas. Estoy muy contento con el equipo que tenemos, que lucha al mismo ritmo y en la misma dirección porque todos sabemos que estamos creciendo.
¿Un reconocimiento como el de AJE les va a hacer crecer más?
Todo ayuda, claro. No me esperaba este accésit, de verdad. El mayor reconocimiento es seguir un mes más y que mis empleados estén contentos. Eso significa que la empresa funciona. Estoy muy agradecido a AJE porque siempre me ha ayudado.
¿Qué cree que ha reconocido de su joven empresa?
Tal vez nuestro oficio, que está algo infravalorado. No somos Manolo y Benito, emprendemos con IA y otras tecnologías. Creo que AJE reconoce la cercanía, la simpatía, la contratación de personal.
Transmite mucho entusiasmo.
Vivo por y para el trabajo, mis empleados igual. Busco tener buenas personas en el equipo y ser felices. Entre todos hemos conseguido involucración, dedicación, buen trato y que nos guste trabajar.
Trabajan mucho en la comarca coruñesa. ¿Van a hacerlo fuera de Galicia?
A lo más lejos que hemos ido es Paderne. En enero empezamos con una obra en Madrid. Expandirse y crecer está muy bien, claro, pero hay que hacerlo siempre con cabeza.