
Moha en su etapa en Omán.
A Coruña, una ciudad que enamora a Moha: del Sin Querer a la élite en Omán
De origen egipcio, aterrizó en A Coruña casi por casualidad sin saber el idioma y se ha enamorado de la ciudad. Entrenó al club de sus amores, el Sin Querer del barrio de Labañou, y formó parte de cuerpos técnicos profesionales en Omán. Ahora se prepara para obtener la máxima titulación
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A Coruña es una ciudad que, como dice el refrán, nadie es forastero. Forjada a sí misma, esta pequeña gran península sigue creciendo hacia su interior y albergando diferentes historias que, con el paso de los años, continúan cautivando a muchas personas para mudarse hasta la ciudad herculina.
El fútbol es un elemento socializador más. No solo formar parte de un equipo y jugar, sino todos los elementos que rodean al mismo: su formación, el espacio compartido siendo rivales, el propio tiempo en el vestuario, etc.
Mohamed Elsayed es un claro ejemplo de amor a primera vista, gracias al fútbol, por la ciudad de María Pita. Moha para sus amigos, aterrizó en España en el año 2014. Su plan vital en ese momento era cursar un máster de alto rendimiento en fútbol en la universidad UCAM de Murcia para enfocar su carrera hacia el mundo de la preparación física.
España, a pesar de las polémicas que rodean en la actualidad al estamento arbitral y casi todas focalizadas en la figura de su todavía presidente Medina Cantalejo, uno de los últimos brazos armados de Rubiales en la RFEF, goza a nivel internacional de un gran prestigio tanto en el estamento arbitral como en la formación de entrenadores y técnicos, por lo que es habitual que personas de origen extranjero quieran cursar sus estudios en territorio nacional para embellecer su curriculum.
Tras acabar esos estudios, regresó a Egipto, su país natal. Pero algo había saltado en él. Había conocido A Coruña y se había enamorado. Como ese flechazo a primera vista, como ese hormigueo que sientes al mirar a la otra persona. Casi sin querer, su destino había marcado una nueva ruta.
Moha lo tuvo claro. Quería regresar a España y establecerse en A Coruña. Lo primero que hizo, algo básico: apuntarse a estudios de español en la universidad de A Coruña, un requisito básico para lo que el futuro le tenía guardado: formarse como entrenador.
Ese mismo destino lo guió hasta Labañou. Cerca de la Escuela de Idiomas, se encuentra un club de fútbol centenario. Es el Sin Querer, que llegó a presidir el padre del conocido presentador Paco Lodeiro. Radicado la calle Ecuador, milita en Tercera Futgal y recientemente ha creado también un equipo de Juvenil.
Moha firmó por el "Sinque". En el rol de jugador, el que había libre en aquella fecha. Como uno más. Pero su camino eran los banquillos. Con la pandemia aún latente, en 2021 cursó el nivel de entrenador UEFA C, el primero de todos. Al año siguiente, no lo dudó y se sacó el UEFA B, y cogió carrerilla para obtener también el UEFA A en 2023. Prácticamente la máxima titulación existente (le falta el UEFA Pro), y que le permite entrenar en categoría nacional.
En la temporada 2023/24, una llamada de Carlos Vidal, presidente del Sin Querer, le cambió la ruta. ¿Coges al equipo?, le dijo. "Sí", respondió casi al momento.

Moha en su etapa en el Sin Querer SD.
Gracias a su esfuerzo y trabajo, y ayudado por personas que lo seguían, le llegaron dos grandes oportunidades. La primera fue la de ser segundo entrenador profesional en el Dhofar Club, uno de los clubes más importantes y con más títulos de Omán, con el que logró la copa de ese país. La segunda, la de ser segundo entrenador del Al Nasr.
Entre medias, su Sin Querer no podía faltar. Inició hasta que pudo la temporada, y lo situó en una zona más que privilegiada. Le relevó Romero, su compañero del equipo formativo. Ahora, de vuelta a Coruña, espera una oportunidad mientras sigue construyendo su Sin Querer y su plan de vida: echar raíces en su Coruña adoptiva y disfrutar del fútbol profesional cuando le llegue la oportunidad.
"Soy de Egipto, y desde pequeño el deporte y especialmente el fútbol ha sido mi gran pasión. Practicaba atletismo y fútbol como amateur desde muy joven, aunque durante muchos años trabajé en sectores que no tenían nada que ver con el deporte. De hecho, mis estudios iniciales en Egipto no estuvieron relacionados con esta área, ya que obtuve la licenciatura en Turismo y Hoteles", relata Moha en conversación con Quincemil.
Su llegada al Sin Querer y su vida
Su llegada al Sin Querer fue gracias a un conocido. "Cuando llegué a Coruña, quería seguir jugando mientras estudiaba, así que empecé a buscar algún club donde pudiera jugar. Fue entonces cuando un chico argelino, Kamal, que ya había jugado antes en el Sin Querer, me habló del equipo. A través de él conocí a Carlos, el presidente, a quien agradezco de corazón todo el apoyo y el cariño que me ha dado desde el primer día".
"Me abrió las puertas del club con una generosidad enorme y me trató siempre con respeto y cariño. Jugué dos temporadas con el equipo, y en la tercera, fue él quien me animó a hacerme cargo del equipo modesto como entrenador. Y la verdad, ha sido una experiencia muy especial, sobre todo por el grupo de personas que hay, que son como una familia para mí", relata con emoción.
"Ha sido una experiencia muy especial, sobre todo por el grupo de personas que hay, que son como una familia para mí"
Su hoja de servicios es amplia: "Después de varios años trabajando como preparador físico en Egipto, di mis primeros pasos en el club Sporting Castle en Tanta mi ciudad, donde logramos el ascenso de Cuarta a Tercera División. Más adelante, tuve la oportunidad de trabajar como entrenador asistente junto al entrenador español Josu González en el equipo Assiut Cement, lo cual fue clave para desarrollar una visión más global y profesional del fútbol".
La vida le enseñó un nuevo camino. "En 2019 surgió la oportunidad de irme a Dubái a trabajar, y fue ahí donde entendí la importancia de contar con la licencia UEFA si quería seguir creciendo y tener mejores oportunidades como entrenador. Por eso decidí venir a España para formarme, y tras varios años de estudios y experiencia, en octubre de 2023 completé el curso de la UEFA A", explicó.
"Justo después, tuve la suerte de recibir una oferta del Dhofar Club de Omán, donde ganamos la Copa de Su Majestad, uno de los títulos más importantes del país. Fue una experiencia increíble y un gran impulso para mi carrera. La temporada pasada comencé con el Sin Querer, donde hicimos una gran temporada con un grupo espectacular. Sin embargo, a falta de cuatro meses para terminar la liga, recibí una oferta del Al-Nasr Club, también en Omán, y decidí volver allí para terminar la temporada. Fue otra etapa de mucho aprendizaje también", manifiesta.
A Coruña, su casa
A Coruña es para el algo especial. "La energía que siento en Coruña no la he sentido en ningún otro lugar. Desde el primer día que caminé por la ciudad, me encantó. El trato, la cercanía y el apoyo de la gente me hicieron sentir en casa desde el principio, nunca me sentí extranjero aquí", afirma sin titubeos.
Su amor por A Coruña no pasa de meras palabras. "Me encanta la tranquilidad que hay en esta ciudad, la cercanía del mar y el ritmo de vida. Es un lugar que te permite cuidarte, estar en calma y disfrutar de la naturaleza, algo que para mí es fundamental. Puedo salir a correr o practicar varios deportes con facilidad, comer bien y disfrutar de amaneceres y atardeceres espectaculares. Todo eso me recarga de energía y me hace sentir en equilibrio. La verdad es que Coruña tiene todo lo que necesito para vivir el estilo de vida que quiero".
"A Coruña tiene todo lo que necesito para vivir el estilo de vida que quiero"
A Coruña es su casa: "Con el tiempo me di cuenta de que lo que realmente me une a esta ciudad es la gente que he conocido, tanto en el fútbol como en mi día a día. Hoy muchas de esas personas son como una familia para mí. La conexión personal que siento con Coruña va mucho más allá del fútbol: es un lugar que considero mi casa".
Su próximo objetivo, la máxima titulación
Moha quiere obtener la máxima titulación, UEFA PRO, reservada solo para los mejores de cada promoción. "Estoy centrado en seguir formándome como entrenador aquí en España. Actualmente estoy cursando el Nivel 2 de fútbol en la Universidad Laboral, y aunque ya tengo el título UEFA A, obtenido a través de la Federación Gallega de Fútbol, todavía necesito completar un año más de experiencia para poder acceder al curso UEFA PRO, que es mi siguiente objetivo".
"Una vez que lo obtenga, mi intención es dirigir un equipo en una categoría profesional en algún país árabe, donde ya he trabajado antes y conozco bien tanto su cultura como su forma de vivir el fútbol. Pero más allá de eso, quiero seguir disfrutando del camino, acumulando nuevas experiencias que me hagan crecer y que sin duda me servirán en el futuro", resume.
La Escuela Gallega de Entrenadores alaba su esfuerzo
Uno de sus profesores en los diferentes cursos de la Escuela Gallega de Entrenadores, y actual director de la misma, es Manolo García. El extécnico entre otros conjuntos del Racing Club Ferrol, que también se hizo cargo de la Selección Gallega de Aficionados, recuerda con Quincemil como fue su experiencia en clase con Moha.

Manolo García en su presentación con la RFGF.
"Fue un buen alumno. Me dijo que tenía algún problema con el idioma pero a la hora de examinarse, no tuvo ningún problema. Aplicó la terminología de forma adecuada y mostró mucho interés en las recomendaciones que se le hacía", explica el ahora jefe de los entrenadores gallegos.
"El idioma del fútbol es universal"
Las dificultades de idioma no fueron un impedimento para Moha. "El idioma del fútbol es universal y con el interés que ha mostrado, como es el hecho de venir a realizar su formación con la Escuela de entrenadores de la RFGF, ha podido realizar de forma muy satisfactoria su formación", concluye el que fue su profesor.