Diez obras imprescindibles en la exposición de Picasso en A Coruña
El viernes pasado abrió al público la exposición monográfica Picasso: Branco no recordo Azul, en el Museo de Belas Artes de A Coruña. La exposición recoge las obras realizadas por el pintor en Galicia entre los 9 y los 13 años, así como la influencia de esta época en toda su obra posterior. Se puede visitar hasta el 25 de junio.
Es el único evento en Galicia que forma parte de la Conmemoración del 50 aniversario de la muerte de Picasso, que se recuerda con exposiciones y actividades a nivel global. En el caso de A Coruña, la propuesta de los comisarios Antón Castro, Malén Gual y Rubén Ventureira, con la colaboración del equipo del Museo, es demostrar la gran influencia que tuvo la ciudad y las primeras experiencias del niño Picasso en toda su creación posterior, sentando las bases de temáticas e intereses que luego se repetirían hasta su fallecimiento.
La muestra se estructura a través de 10 ejes y hay 120 obras, 68 del autor malagueño, entre las que hay obras de niñez y madurez, que se comunican a pesar de la distancia temporal entre ellas. Algunas de estas piezas son préstamos de instituciones como el Musée National Picasso de París o el Museu Picasso de Barcelona. De todas ellas, aquí dejamos una selección de 10 títulos, que en el dossier entregado a la prensa por la organización califican como las "obras destacadas" de una propuesta imprescindible para conocer en profundidad una etapa de formación y descubrimiento en el Picasso artista y niño. La inscripción para realizar una visita guiada se puede realizar aquí.
Retrato de Lola (1894)
Es el primer retrato en lienzo de la carrera del pintor en el que muestra a su hermana Dolores Ruiz Picasso, que por entonces era una niña, con unos rasgos adultos. El retrato será un género muy cultivado por Picasso, también en su etapa cubista y especialmente centrado en pintar a otras mujeres. En este caso, viste una mantilla, un elemento que se repetirá en el futuro con otras modelos. Cuando pintó a su hermana el artista tenía tan solo 13 años.
L'Aumone (1899)
Uno de los temas del discurso de la exposición es el erotismo en la obra de Picasso. En su etapa en A Coruña, donde escribe alguna coplilla infantil de tono sexual o capta los primeros desnudos en Riazor, ya se contemplan algunos primeros trazos, aunque la obra aquí destacada fue realizada cuando el autor vivía en Barcelona. Un pequeño Picasso observador dibuja aquí una estampa inspirada en el barrio chino de la ciudad catalana. La pieza corresponde a una colección privada y es la primera vez que se expone al público.
Nature morte aux instruments de musique sur une table (1913)
En la muestra podemos ver algunos dibujos en los que el pintor retrata instrumentos tradicionales gallegos como la gaita. Este motivo lo recupera después en su etapa cubista, siendo esta obra el máximo exponente de este recuerdo, una de las piezas más importantes de la muestra, que viene del Museo Picasso de Málaga.
Estudio para la cabeza de caballo (II). Dibujo preparatorio para "Guernica" (1937)
Este pequeño dibujo preparatorio aparece en la representación de la obra maestra de Picasso, el Guernica. Un préstamo temporal del Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía que culmina la narración en la exposición coruñesa sobre el despertar de la conciencia crítica de Picasso. En A Coruña entró en contacto con el liberalismo, así como con publicaciones políticas y satíricas, que despertarían su conciencia social.
Maya à la poupée (1938)
Un retrato cubista con una imagen que ya aparece en el Picasso niño. En A Coruña el artista retrató, de nuevo, a su hermana Lola en esta posición con su muñeca. La obra cubista es un préstamo del Museé national Picasso-Paris.
Femme au chapeu assise (1939)
Siguiendo con el género del retrato y con la línea que comenzó dibujando a su hermana Lola, esta obra representa a dos de sus amantes de la época, la artista Dora Maar y Marie-Therese Walter. De estilo cubista la representación de la mujer con sombrero será una idea muy repetida en la época del artista.
Tête de faune gris (1946)
El tema del fauno es uno de los más repetidos de la iconografía picassiana. La primera vez que aparece es en A Coruña, donde debido a sus estudios en la Escuela de Belas Artes, reproduce en un dibujo una escultura con este motivo. En su época en Antibes reproduce este motivo con formas geométricas. Ambos cuadros se pueden ver en la exposición.
As Meninas (1957)
También en la Escuela de Belas Artes, Picasso entró en contacto con Velázquez, antes de ver sus obras en Madrid, encontró en un libro de la academia una reproducción de Las Meninas. Posteriormente, en la década de los 50, jugaría con esta obra deconstruyéndola y llevándola a su estilo. En la exposición se encuentran dos obras de esta serie.
Le peintre et son modele I (1963)
En la exposición de A Coruña encontramos dos obras con esta temática de "el pintor y la modelo", de 1963. Realiza múltiples variantes de este tema que también podemos observar en un retrato que hace de su padre en la década de 1890 en el que, según afirman los estudios, podría aparecer pintando.
Marine (1967)
Es de las pocas obras en las que Picasso se vuelve paisajista, una faceta que comenzó a trabajar en A Coruña, donde retrató en 1895 las olas que rompen en la playa del Orzán. Años después, en esta pieza de 1967, recupera la temática con recursos gráficos similares a los de su obra de juventud.
