Gallegos en Estados Unidos en la era Trump
Gallegos en Estados Unidos en la nueva era Trump: "Hay polémica con las medidas aprobadas"
Desde la perspectiva de varios gallegos que viven en Estados Unidos, como Santiago Fociños, Uxia García Díaz y Alberto Varela, la toma de posesión de Trump fue toda una experiencia que no olvidarán
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La investidura de Donald Trump como presidente de Estados Unidos el pasado 20 de enero de 2025 marcó un nuevo capítulo en la política estadounidense, generando reacciones diversas en todo el país. En ciudades como Washington DC y Nueva York, donde la mayoría de la población es de tendencia demócrata, el ambiente de incertidumbre y división política se intensificó.
Desde la perspectiva de varios gallegos que viven en Estados Unidos, como Santiago Fociños, Uxia García Díaz y Alberto Varela, la toma de posesión de Trump no solo se vivió como un acontecimiento político, sino como un reflejo de las tensiones sociales y económicas que atraviesan el país. Cada uno de ellos, desde su experiencia personal y profesional, ofrece una visión única sobre cómo el retorno de Trump a la Casa Blanca afecta no solo la vida diaria en estas ciudades, sino también la percepción de la política, la inmigración y la convivencia en un país profundamente polarizado.
Santiago Fociños, coruñés en Nueva York
Santiago Fociños.
Santiago Fociños es un joven de 31 años natural de A Coruña que lleva cuatro años en Estados Unidos. Actualmente trabaja en el departamento de marketing y ventas en un hotel de lujo en el Apple Upper East Side y anteriormente ocupó un puesto en el consulado de España en Nueva York.
Sobre la ciudad de los rascacielos, Fociños cuenta que es de mayoría demócrata desde hace más de una década y la reciente victoria de Trump se ha recibido con "un sentimiento general de incertidumbre". Cuenta que las mismas sensaciones se vivieron con al anterior victoria de Trump en 2016, a la que siguieron en 2017 muchas manifestaciones y protestas "y descontento general", explica.
"Creo que todo eso se va a volver a dar porque hay polémica con las medidas aprobadas ayer, especialmente el perdón que concedió a los asaltantes del Capitolio el 6 de enero de 2021 u otras en materias como inmigración", dice, sobre lo que matiza que "todo ello causa bastante descontento en una ciudad que es muy liberal".
Considera que con Trump en la presidencia su vida personal "no va a cambiar prácticamente nada" y apunta que "la gente va a seguir viniendo a Nueva York porque es es una ciudad muy atractiva". "Las medidas que pueda aprobar Trump en los próximos cuatro años no creo que afecten prácticamente nada a cómo vivo mi día a día en Estados Unidos", concreta.
"Lo que realmente quiero ver es si Trump va a ejecutar esa orden de mandar a todos los inmigrantes sin papeles de vuelta a su país, que son unos 10 millones y va a causar mucho revuelo seguramente"
Los latinos serán con toda la probabilidad una de las comunidades más castigadas por el ahora presidente de Estados Unidos y el coruñés cuenta que tiene amigos latinos preocupados porque se encuentran en el país de manera irregular. En este sentido, llama a hacer una diferenciación entre dos tipos de inmigrantes latinos. El primer grupo serían aquellas personas que llegan al país a trabajar en sectores importantes como hostelería o servicios: "Si te deshaces de estas personas y las mandas de vuelta a su país esto va a impactar fuertemente en la economía de Estados Unidos".
Por otra parte, aclara que un segundo tipo de inmigrante es "el que ha ido ganando popularidad en los últimos años, especialmente en Nueva York, que son esas personas sin recursos que buscan asilo porque saben que la ciudad tiene leyes que favorecen su situación". Sobre esto, corrobora que "les están dando alojamiento en hoteles, y no precisamente en hoteles malos, además de dinero para cubrir sus gastos que procede de los impuestos de los contribuyentes", subraya.
"Lo que realmente quiero ver es si Trump va a ejecutar esa orden de mandar a todos los inmigrantes sin papeles de vuelta a su país, que son unos 10 millones y va a causar mucho revuelo seguramente", avanza. Sobre la eliminación del CBP One, la aplicación para pedir asilo en la frontera con México que en las últimas horas ha dejado de estar operativa, indica que "no supondrá más cambio que estas personas tengan que esperar ahora en México a que se resuelvan sus casos en los tribunales estadounidenses".
"El movimiento de los demócratas de colocar a Kamala Harris como candidata en detrimento de Biden, que no estaba en condiciones del segundo mandato, fue bastante inteligente pero se hizo tarde"
"Considero esto un intento de regularizar la inmigración en Estados Unidos, que en el anterior mandato de Biden se había descontrolado", afirma, mientras detalla que muchas personas entraban por la frontera sur a estados republicanos como Texas, desde donde luego se trasladaba a los inmigrantes a estados demócratas como Nueva York o California. "La migración descontrolada altera la situación de un país como ocurre en España y se debe regular", cuenta.
Sobre la situación de los afines a Trump en la gran ciudad en la que vive, una de las urbes más importantes del mundo, relata que "los seguidores de Trump están un poco en las sombras y no se manifiestan en una ciudad en la que saben que los van a linchar". Asegura que sí ha visto alguna manifestación de propaganda a favor del presidente en edificios como la Torre Trump en meses anteriores y sobre todo cuando el presidente estaba en la ciudad.
Acerca de la carrera presidencial de trump y Kamala Harris, opina que "el movimiento de los demócratas de colocar a Kamala Harris como candidata en detrimento de Biden, que no estaba en condiciones del segundo mandato, fue bastante inteligente pero se hizo tarde".
"No le dieron tiempo para preparar una campaña electoral en la que Trump fue el claro vencedor. De hecho, se ha visto en los debates que la estrategia de Harris era muy continuista con un discurso derrotista que se centraba especialmente en atacar a Trump sin dar muchas razones de por qué elegirla a ella", argumenta, a lo que añade que "eso lo vieron muchas personas, tantas que los demócratas de Estados Unidos perdieron nueve millones de votantes con respecto a las anteriores elecciones de 2020, por lo que el descontento era normal general", sentencia.
Alberto Varela, coruñés en Oregón
El coruñés Alberto Varela, residente en Portland.
Hace ya seis años que el coruñés Alberto Varela llegó a Portland, Oregón. Su trabajo ya le obligaba a pasar largas temporadas en Estados Unidos, pero no fue hasta el 2019 cuando cambió su residencia a la ciudad más grande del estado de Oregón debido a su trabajo como product manager en HP.
Como le sucede a Santiago, Alberto vive en una ciudad de mayoría demócrata. En las últimas cuatro décadas, el estado de Oregón ha votado siempre por el partido azul.
Portland es, además, conocida por sus movilizaciones. El movimiento de la People's March (protesta del pueblo) llegó a esta ciudad el pasado sábado, antes de la investidura de Donald Trump, con cientos de personas mostrando su rechazo al nuevo presidente. Hace cinco años, tras el asesinato de George Floyd, esta fue una de las ciudades en la que se produjeron más movilizaciones.
"Sobre los tres, Trump, Biden y luego Kamala Harris, había un consenso en que todos son un desastre. No gustaba ninguno y la gente no sabía a quién votar. Se sentían sin poder de elección"
Sin embargo, Alberto señala que a pesar de la tradición de protestas que tiene Portland, en esta ocasión no se han visto tantas. "Tengo la sensación de que en los últimos años ha aumentado la frustración con los demócratas. Por ejemplo, aquí hay un gran problema con la cantidad de homeless (personas sin hogar) y eso es algo que en lugar de solucionarse ha ido a peor", comenta.
En sus círculos cercanos, aunque admite que se trata de personas con un nivel educativo alto y buenos salarios, la sensación general es de desafección con los candidatos. "Sobre los tres, Trump, Biden y luego Kamala Harris, había un consenso en que todos son un desastre. No gustaba ninguno y la gente no sabía a quién votar. Se sentían sin poder de elección", apunta.
Alberto apenas vivió el anterior período de Trump en la Casa Blanca. Para este que comienza ahora, confiesa que "como este será su último mandato, me preocupa que vaya a ser más extremista".
Considera que es probable que su día a día no se vea demasiado afectado, aunque algunas de las medidas anunciadas, como la subida de las tasas de los productos importados, sí pueden afectarle tanto en su vida personal como en el trabajo.
Uxia García, ourensana en Washington DC
Uxía Garcia Diaz, profesora en EEUU.
Uxia García Díaz es una joven gallega que, aunque nació en Ourense y vivió en A Coruña durante 20 años, se encuentra desde agosto de 2024 viviendo en Washington DC, gracias a un programa del Ministerio de Educación Español llamado "Profesores Visitantes". Este programa le permite enseñar en Estados Unidos, donde trabaja como profesora de P.E. (Physical Education) en una escuela publica en Maryland. Uxia comparte su visión sobre la toma de posesión de Donald Trump, un evento que le tocó vivir de cerca en una ciudad que, aunque no votó por él, "según las encuestas", se vio invadida por su presencia.
"Mi escuela está formada por alumnado 80% latino, 20% afroamericano.
El profesorado que trabaja conmigo, en general no está a favor de las políticas de Trump. Pero siempre hay alguna excepción. Hay una compañera que vino desde el primer día a clase con una gorra de Trump", cuenta.
"La política en este país es mucho más visual y espectacular, con eventos que se asemejan a un gran show donde todo está diseñado para impresionar al público"
Sin embargo, "el día de la investidura Washington DC se transformó". "La zona del National Hall y del Capitolio estaba llena de gente con gorras y banderas de Trump. Muchas sudaderas y banderas americanas y vimos algún doble de Trump", cuenta la joven. La gente llevaba todo el merchandising puesto: llaveros y colgantes con la cabeza de Trump, así como gritos de "USA". "Un ambiente completamente diferente", en opinión de la profesora.
Para Uxia, la forma en que los estadounidenses viven la política es muy diferente a la de España. La profesora apunta que "la educación en Estados Unidos está marcada por una estructura rígida y un currículum guiado que no deja mucho espacio para la reflexión profunda". Sin embargo, esto no es lo único que llama la atención a Uxia. También destaca el hecho de que "la política en este país es mucho más visual y espectacular, con eventos que se asemejan a un gran show donde todo está diseñado para impresionar al público".
Trump, en su opinión, es un "showman" nato, alguien que sabe cómo conectar con la gente gracias a su lenguaje sencillo y directo. A diferencia de los políticos demócratas, cuyo discurso suele ser más complejo y menos accesible, Uxia explica que "Trump utiliza un estilo directo que llega fácilmente a la gente, especialmente a aquellos que están preocupados por cuestiones como los impuestos, el empleo y la inmigración", indica.
Uxia, que no se considera una persona especialmente metida en política, reconoce que, a pesar de no compartir las políticas de Trump, puede entender por qué una parte de la población lo apoya. Según su experiencia, "la educación en Estados Unidos se basa en una estructura muy dirigida, donde los profesores tienen que seguir guías y currículos muy marcados, lo que limita la capacidad de reflexión y análisis crítico".
