Lanzamiento dron SpyX
Marruecos e Israel amplían su cooperación militar: la empresa BlueBird construirá drones kamikaze en el país africano
La compañía de origen israelí abrirá fábrica en territorio marroquí para la producción de sistemas SpyX, unidades que Rabat ya adquirió en 2023.
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La compañía israelí BlueBird, especializada en el desarrollo de drones, prevé instalar una planta de producción en Marruecos para la fabricación de munición merodeadora. Este movimiento estrecha la relación en materia de defensa que en los últimos años han cultivado Tel Aviv y Rabat, esta última interesada en desarrollar su propia industria militar.
En concreto, de acuerdo a lo publicado por The Jerusalem Post, BlueBird planea construir en el país africano sistemas SpyX, aeronaves de las que Gobierno marroquí se convirtió, en 2023, en el primer cliente internacional, tan solo días después de la presentación del dron en la edición de ese año de Paris Air Show.
Si bien la empresa israelí no ha informado oficialmente sobre este proyecto, se prevé que el mismo incluya transferencia de tecnología, formación de técnicos locales y la integración de sistemas SpyX en la flota actual de aeronaves no tripuladas de Marruecos.
BlueBird ya tiene experiencia en la fabricación de drones en el país magrebí, dado que parte de las 150 unidades ThunderB y WanderB han sido producidas en territorio marroquí, según se establecía entonces en el acuerdo alcanzado entre ambas partes.
La monarquía alauita ha incrementado significativamente su presupuesto de defensa durante el último año y se calcula que el próximo ejercicio destinará algo más de 16.000 millones de euros al gasto militar.
El SpyX se encuadra dentro de las plataformas de pequeño tamaño, con propulsión eléctrica y diseñados específicamente para ser desechables. Su principal objetivo es el de servir en misiones de reconocimiento y ataque a las tropas, para lo que integra a bordo todo una serie de sistemas y sensores dedicados a ello.
En el apartado de la inteligencia, cuenta con un doble sensor capaz de proporcionar "un conocimiento de la situación en tiempo real, lo que permite mejores capacidades de detección de objetivos y toma de decisiones en el campo", tal como detalla su fabricante.
Dron SpyX
Una de las particularidades de este dron kamikaze es que puede transportarse y desplegarse muy fácilmente al requerir únicamente un vehículo con la catapulta y un par de personas a cargo.
Asimismo, puede realizar un lanzamiento automático, navegar a lo largo de una ruta establecida, armar y desarmar la carga explosiva. El siguiente paso, el del ataque, se puede realizar bien seleccionando un objetivo manualmente o comandar un ataque guiado.
De igual manera, es capaz de transportar una variedad de cabezas de guerra que pueden actuar tanto contra vehículos ligeros o personas como contra tanques. La ojiva más pesada que puede albergar es de 2,5 kilogramos.
El dron tiene un radio de acción de 50 kilómetros desde la base de operaciones y puede permanecer en el aire hasta una hora y media. Para realizar las tareas de vigilancia y obtención de objetivos emplea cámaras para la luz del día y también sensores térmicos de infrarrojos.
Los datos aportados por BlueBird señalan que consiguen una precisión de tan solo un metro en los ataques, cuyo impacto contra el objetivo se realiza a una velocidad de 250 kilómetros por hora.