Del Eurofighter a los radares de vigilancia aérea: los sistemas militares de Indra que impulsan sus resultados de Defensa

Según las cuentas publicadas, la empresa alcanzó un beneficio neto de 215 millones de euros, lo que supone un 87,7% más en comparación con los 114 millones del mismo periodo del año 2024.

Entre los pilares del crecimiento se encuentra la rama de Defensa, especialmente en todo lo relacionado con el caza Eurofighter Typhoon y el negocio de los radares.

Para la aeronave militar, Indra es uno de los principales suministradores tecnológicos de la plataforma, participando en sistemas críticos como el radar, autodefensa, comunicaciones, control de vuelo o navegación.

También se han erigido como una referencia en simuladores para el entrenamiento de tripulaciones, el soporte y mantenimiento de la aviónica o el desarrollo e integración de nuevas capacidades.

Eurofighter Izan González

Desde el comienzo del programa, Indra se ha posicionado como una de las principales compañías del sector de la defensa en participar activamente en el Eurofighter, un negocio que apunta a que seguirá creciendo dados los últimos anuncios de países como Turquía o España.

A principios de julio, al calor de la futura incorporación de más Eurofighter en el Ejército del Aire y del Espacio español, Indra anunció que había completado la producción de los primeros radares avanzados para la próxima generación.

Es un programa llevado a cabo junto con la alemana Hensoldt, con el fin de mejorar el caza europeo en aspectos clave como el incremento del radio de detección de amenazas o la incorporación de capacidades de guerra electrónica.

En cuanto al negocio de los radares, Indra ha cerrado en la primera mitad de este 2025 dos contratos esenciales. El primero de ellos se firmó en febrero con la Fuerza Aérea alemana para dotar al país de un radar de vigilancia espacial.

Radar Lanza-T Ejército del Aire y del Espacio

Se trata de un sistema destinado a reforzar la capacidad para proteger satélites y activos espaciales, tanto militares como civiles, situados en órbitas bajas. El principal riesgo que enfrentan estos sistemas es el impacto con residuos que orbitan de forma descontrolada o la aproximación de otros satélites que puedan llegar a dañarlos o neutralizarlos.

El siguiente contrato clave se rubricó en abril con la Royal Air Force del Sultanato de Omán. En esta ocasión, para la venta de nuevos radares Lanza 3D de largo alcance.

Este proyecto incluye el diseño, suministro e instalación de dos radares en emplazamiento fijo, así como el suministro de sistemas de comunicaciones de voz por radio y la integración con el sistema de mando y control, entregado igualmente por Indra.

Los Lanza 3D son radares de largo alcance que reforzarán el sistema de defensa aérea de Omán tras la finalización de un primer contrato con Indra en 2020.

Son, además, los mismos sistemas elegidos por el Ejército del Aire y del Espacio español para su integración en los Escuadrones de Vigilancia Aérea (EVA) que están dispuestos por todo el territorio nacional para proporcionar cobertura radar.

Otro aspecto fundamental en los resultados ha sido el aumento en la valoración de la participación en Tess Defence. Este conglomerado, actualmente controlado por Indra al tener un 51%, está formado también por Sapa, Santa Bárbara Sistemas y Escribano Mechanical and Engineering (EM&E).

Tess Defence está detrás del diseño, desarrollo y fabricación del 8x8 Dragón, uno de los programas más importantes del Ministerio de Defensa que afronta múltiples retrasos, y el Vehículo Apoyo de Cadenas (VAC).

Hace sólo unos días, Indra firmó con la finlandesa Bittium el desarrollo nacional de las futuras radios tácticas para las Fuerzas Armadas, uno de los programas más importantes recogidos dentro del Plan Industrial impulsado por el Gobierno.

Entre los últimos movimientos de la compañía también se encuentra la tramitación por vía urgente de préstamos para comenzar el desarrollo de varios programas para el Ministerio de Defensa, y el anuncio del inicio de fabricación en Córdoba de radares de vigilancia espacial.