La protagonista de esta historia solo tiene 18 años y ya es una chica de récord. Hace unos meses, la escaladora Ainhize Belar -nacida en Atxondo, Vizcaya, en 2006- consiguió encadenar (un verbo muy usado en el glosario de escalada, que significa finalizar) una ruta 9a+. Lo que viene a ser uno de los niveles más complejos que existen. El máximo es un 9c.
Ainhize se mueve por el rocódromo urbano que Sputnik Climbing abrió hace tan solo unas semanas en el centro de Madrid. Mientras, unos compañeros de medios realizan una entrevista a otro miembro del equipo en el que fue 'fichada' la escaladora vasca hace unos años. Ella mira con atención porque es la siguiente.
Hacemos a nuestra protagonista subir a un panel dentro del rocódromo. Se pone los pies de gato, esas zapatillas ajustadas con suela lisa y puntera rígida que favorecen los agarres en las presas; después, el arnés con el que se asegurará la subida y, para terminar, el nudo marinero que hace a la cuerda con la que irá encadenando cada mosquetón. Y empieza a subir, como si nada. Una presa y otra, y otra más.
Ainhize durante su entrenamiento en el rocódromo de Chamberí de Sputnik Climbing.
Después de hacerle escalar, posar, salir, entrar, volver a posar y a subir durante la entrevista, ella responde con naturalidad, con pocas palabras, de forma sencilla. Le preguntamos por su hazaña, por su preparación, por esa vía llamada 'Iñi Ameriketan' que ella simplifica a 'Iñi' y por los referentes femeninos con los que acaba la conversación.
Ainhize tiene los pies en el suelo en todo momento. Descubre sus rutinas y de dónde le viene esa pasión por la escalada. Aunque el rocódromo se le da espectacularmente bien, ella confiesa que lo suyo es la roca. Salir a las paredes más o menos calizas o de granito, rodearse de naturaleza y avanzar por gradientes imposibles. De hecho, ese nivel tan alto que ha conseguido, lo hizo en una pared de una cueva. Dentro vídeo.