Montaje de Magas.

Montaje de Magas.

Magas-Mujeres en la Historia

Así fue Francisca Guarch: la valiente guerrera que desafió las normas de su época en las guerras carlistas

Nacida en el municipio de Castellfort, hablamos de una mujer que tuvo la valentía de romper con las imposiciones de la España del siglo XIX.

8 enero, 2024 02:22

En el siglo XIX, una época marcada por las rígidas expectativas de género y las limitaciones impuestas a las mujeres, surgen historias de valentía y determinación que desafían las normas establecidas. Entre estas mujeres intrépidas, destaca la figura de Francisca Guarch, una valiente guerrera que desafió las convenciones sociales al travestirse para participar en las guerras carlistas. 

[Así fue Mina Puccinelli: la pluma revolucionaria polaca detrás del diario 'El León' en Madrid]

Su historia, a menudo eclipsada por los relatos convencionales de la historia militar, merece ser rescatada y reconocida por su coraje único y su contribución a un periodo agitado de la historia española.

Francisca Guarch: la mujer que desafió las expectativas

El siglo XIX en España estuvo marcado por las guerras carlistas, conflictos políticos y militares que dividieron a la sociedad española entre los seguidores de Isabel II, conocidos como los liberales, y los partidarios del infante Carlos María Isidro de Borbón, los carlistas. 

[Piedita Yturbe, primera 'reina' de Marbella: la aristócrata más fabulosa de la 'belle époque']

Estos enfrentamientos, que tuvieron lugar entre 1833 y 1876, dejaron una profunda huella en la historia de España. En medio de este caos, emergió la figura única de Francisca Guarch.

Nacida en una sociedad que limitaba las aspiraciones de las mujeres a roles tradicionales y domésticos, Guarch desafió desde joven las expectativas que la sociedad tenía para ella. Apasionada por las ideas liberales y deseosa de contribuir a la causa, no se conformó con el papel pasivo asignado a las mujeres en su época.

La participación en las guerras carlistas

Consciente de las restricciones impuestas a las mujeres para participar activamente en conflictos militares, Guarch tomó una decisión audaz: se travistió como hombre para unirse a las filas carlistas.

Adoptó el nombre de Francisco Guarch y ocultó su identidad bajo las ropas y la apariencia de un soldado. Este acto valiente no solo desafiaba las normas de género, sino que también demostraba su dedicación inquebrantable a la causa carlista.

[Así fue Simone de Beauvoir: la mujer activista más allá de la obra de 'El segundo sexo']

La experiencia de Guarch en las guerras no fue una mera fachada; demostró ser una combatiente valiente y hábil. Participó en varias batallas, donde su destreza militar y su fervor por la causa la hicieron destacar entre sus compañeros soldados.

Combate de Mañaria (1872).

Combate de Mañaria (1872).

Su valentía no tardó en ser reconocida, y sus superiores elogiaron sus habilidades en el campo de batalla, sin sospechar su verdadera identidad.

El camino de Guarch no estuvo exento de desafíos. Mantener su identidad en secreto mientras enfrentaba los peligros del combate y las dificultades propias de la vida militar requería una fuerza interior considerable. La carga emocional de ocultar su verdadero ser y vivir constantemente en la sombra de su propia identidad femenina se sumó a los desafíos de la guerra.

El legado de Francisca Guarch

Aunque la historia de Francisca Guarch no ha recibido la atención que merece, su legado persiste como un recordatorio de la capacidad de las mujeres para superar las barreras impuestas por la sociedad. 

[“Quiero ser una obra de arte viviente": así era Luisa Casati, icono de moda de la 'Belle Époque']

Su valentía contribuyó no solo a la causa carlista, sino también a desafiar las percepciones convencionales sobre el papel de las mujeres en la sociedad y la guerra.

La historia de Guarch es un testimonio inspirador de la capacidad humana para desafiar las normas impuestas y contribuir de manera significativa a eventos históricos cruciales. Su valentía en las guerras carlistas trasciende el ámbito militar, sirviendo como un símbolo de la lucha por la igualdad de género y el reconocimiento de las contribuciones femeninas en momentos cruciales de la historia.