¿En qué situación se encuentra el Grupo Stellantis en su estrategia a 2030?

En Stellantis estamos preparados para que en 2030 lleguemos al 100% de vehículos eléctricos. Tenemos los coches, tenemos la capacidad, la tecnología y podemos hacerlo.

Ejecutamos los principales pilares de manera muy profesional y rigurosa. Ya contamos con cuatro plataformas físicas (STLA small, STLA mediana, STLA large y STLA frame) y tenemos tres plataformas de software que están en desarrollo. Estas plataformas de software son de la arquitectura del vehículo, el infoentretenimiento y el puesto de conducción. Y también estamos trabajando en el vehículo autónomo. Llevo trabajando en el automóvil más de 40 años y lo que estamos haciendo ahora en el desarrollo de plataformas es algo que no había visto antes. Son plataformas que son válidas para vehículos con tracción delantera, tracción total, sedanes, SUV, crossovers…

El Jeep Wagoneer S será uno de los primeros coches con la plataforma STLA Large.

¿Cómo es la última plataforma presentada, la STLA Large?

La última presentada es la STLA Large que ofrece hasta 800 kilómetros de autonomía de un vehículo eléctrico. Esta cifra eliminará por completo la ansiedad por la autonomía. Los coches con esta plataforma llegarán entre finales de 2024 y el año 2026 y se incluirán en numerosas marcas como Dodge, Chrysler, Jeep y también Alfa Romeo y Maserati. Además, contará con tecnología de 400 y 800 voltios, lo que permitirá una gran velocidad de carga.

¿En qué fabricas se producirá la nueva plataforma STLA Large?

Primero se producirá en Norteamérica porque las primeras marcas que la reciben son marcas principalmente americanas. Pero como también se incluirá en Alfa Romeo y Maserati también se producirá en Italia.

El CEO de Stellantis, Carlos Tavares. Reuters

¿Cómo cree que le afectará la situación del mar Rojo?

La situación del mar Rojo afecta principalmente a la duración del viaje. Al dar la vuelta por el sur de África se necesita más tiempo para ir a Occidente. Es cierto que puede afectar a la cadena de suministro en una primera etapa. Pero cuando ese tiempo de viaje se regularice no veo que haya mucho impacto, más allá de que los viajes sean más largos. Sí que es cierto que puede tener un impacto en el coste, pero estamos viendo cómo reducir este incremento de coste. Espero que esto no sea un problema importante para la industria.

Uno de los primeros coches que tendrá la STLA Large será el Jeep Wagoneer S… ¿Lo veremos en Europa?

Jeep es una marca global. Es la marca más global de SUV de Stellantis, ya que puedes encontrar un Jeep en cualquier parte del mundo. Así que por supuesto que estará en Europa.

¿Son rentables los coches eléctricos?

En Stellantis tanto en Europa como en Estados Unidos estamos ganando dinero con los vehículos electrificados, tanto con los eléctricos como con los híbridos enchufables. Esto es una obligación que aplicamos a todo lo que vendemos: siempre hay que ganar dinero, porque de lo contrario la empresa no sería sostenible.

¿Cuál cree que es la situación de la venta de eléctricos en Europa ahora mismo cuando hay países que están quitando las ayudas?

En Europa los políticos nos han impuesto la tecnología del coche eléctrico y las clases medias no los pueden pagar. Por ello la gente se queda todo lo que puede con sus vehículos viejos, ya que no pueden pagar por uno nuevo.

Por tanto, el principal problema de un vehículo eléctrico actual es su precio. Que los vehículos eléctricos sean accesibles es la clave. De ahí que en el momento en el que se cortan los subsidios y el precio del coche es un problema, se dejan de comprar. Lo que está ocurriendo además es que antes los gobiernos ofrecían ayudas porque el coste de adelantar el dinero era casi gratis. Ahora, en cambio, como los costes se han elevado mucho, los gobiernos ven que sus deudas se elevan cada vez más. Es lo que ha ocurrido en Alemania. Y también en Italia, que ha decidido no dar subvenciones porque el mercado se llena de coches eléctricos chinos.

Por todo ello, habrá que estar muy pendiente de las elecciones europeas y también a las de Estados Unidos. Por tanto, necesitamos comprobar en estas dos elecciones que la gente vuelve a votar esta opción de apostar por esta tecnología. Pero también le digo que si no hay cambio en la dirección política mantendremos a toda velocidad la apuesta por la electrificación.

Stellantis es el principal productor de coches en España.

¿Y cómo se preparan para las elecciones europeas y de Estados Unidos?

Estamos trabajando sobre dos escenarios. Un escenario de aceleración y otro de desaceleración. Si se acelera esto significa que sigue la política dogmática. Sin embargo, si gana el populismo significará una desaceleración. Estos son los dos escenarios que trabajamos y que tenemos que estar preparados para ellos. Desde Stellantis no podemos tener miedo a uno u otro escenario porque esta industria lleva enfrentándose a una crisis tras otra.

¿Y qué soluciones proponen desde Stellantis para hacer los coches eléctricos más accesibles?

Tenemos mucho trabajo por delante para reducir los costes. Hay que tener en cuenta para una empresa como la nuestra que la obligatoriedad de pasar al coche eléctrico supone imponer a las empresas un 40% más de costes en comparación con el motor de combustión.

Por tanto, si la demanda de eléctricos cae cuando se quitan las ayudas en los países el mensaje es alto y claro: hay que reducir precios. Y en ello estamos trabajando. Y en Stellantis no se nos da mal reducir costes. Solo necesitamos tiempo para conseguirlo.

¿Qué implicaciones tiene que los coches eléctricos sean más caros?

Actualmente el cliente observa que hay un caos regulatorio. Los clientes observan lo que ocurre y señalan que es hora de esperar, no de comprar un coche nuevo electrificado a no ser que tengan grandes ayudas. Por ello están estirando la vida de sus coches viejos. Por esto, está aumentando la edad media de los coches viejos en Europa. Y esto es un desastre para el planeta. Por lo tanto, si a la hora de hacer políticas ignoramos la realidad, la sociedad nos puede llevar a un efecto contrario de lo que buscábamos.

El puerto de Vigo es el principal canal de salida de la fábrica de Stellantis.

¿Y cómo se puede reducir el precio de los coches eléctricos?

Con procesos de fabricación más eficientes, con celdas de batería más eficientes para hacer baterías más pequeñas, menos costosas y pesadas, sistemas de gestión de la energía más eficiente, más estudios aerodinámicos para hacer coches más eficientes...

¿Y no han tenido los coches en los últimos años con la crisis de los chips unos precios muy altos?

El hecho de que las empresas hayan mantenido estos precios en el mercado las ha protegido en su capacidad para seguir buscando soluciones más eficientes. Si se reducen los precios sin tener en cuenta los costes, es una carrera hacia el abismo, hacia el fondo de un baño de sangre. Y esto es lo que estoy tratando de evitar.

¿Entonces… Stellantis hará alguna reducción de sus precios?

Ajustaremos los precios en cuanto reduzcamos los costes. Aquí hay que tener en cuenta, y esta expresión la ha utilizado algún periodista, que esto se puede convertir en un baño de sangre. La cuestión es que a la hora de hablar de rentabilidad en la industria el margen va del 3% al 14%. Y si lo que hacen las empresas es bajar el precio de los coches a mucha velocidad y a mayor velocidad que la disminución de los costes, entonces estas empresas se van a meter en problemas y entrarían en pérdidas. Y aquí Stellantis está en una buena situación. Porque somos de los más rentables y estamos protegidos ante una tendencia bajista de los precios.

¿Entonces hay margen para reducir los precios?

Hay espacio para que nuestras operaciones mejoren. Pensamos que podemos hacerlo mucho mejor. Pero no se trata solo de reducir costes, sino también de ser más eficientes. Por ejemplo, en Stellantis hemos decidido reducir nuestras propiedades 'inmobiliarias'. En primer lugar, porque así hemos reducido nuestros costes operativos pero también porque con esta reducción hemos liberado dinero que podemos invertir en otras tecnologías.

La planta de Vigo en España ha fabricado más de 500.000 coches.

Los chinos han conseguido en Europa un 8% de cuota de mercado… ¿Qué opinión tiene?

Es un tema que sigo muy cerca porque mi principal competidor son los coches chinos. Como ejemplo, le puedo decir que en Stellantis lanzamos ahora el Citroën ë-C3 que parte de los 23.000 euros y tendrá una versión de acceso desde los 19.800 euros. Por tanto, podemos decir que estamos listos para la pelea. Además, esta es la única manera de que un fabricante global como Stellantis se enfrente a los chinos. Si como región occidental intentamos protegernos de los chinos, sabemos que habrá represalias. Y esto conduciría a una guerra comercial. Y aunque no me corresponde a mí decirlo, hay mucho en juego más allá de la automoción si hay represalias. Por ello, como CEO de una compañía mundial tengo que luchar en un mundo donde no hay protección y lo hago con el lanzamiento de coches accesibles. Y también con la participación en una empresa china como es Leap Motors, de la que controlamos las exportaciones hacia el mundo. Por tanto, Leap Motors es como una nueva marca de Stellantis que proviene de China y que aportará más valor a Stellantis.

¿Por qué siguen fabricando muchos SUV si son tan grandes y contaminan más?

La respuesta en sencilla. Porque es lo que quieren nuestros clientes. Y yo siempre haré lo que quieran mis clientes. Si en Francia ahora no quieren SUV porque los cargan con más impuestos, entonces hará berlinas y coches más bajos y los SUV los venderemos en otros mercados. Y así con todos los países. Como es lógico necesito un período para adaptarme, pero lo haremos. 

¿Y cuándo aparecerá la nueva plataforma STLA Small?

Aproximadamente entre 2026 y 2027.

¿Por qué la plataforma STLA Large incorpora la tecnología 400 y 800 voltios y no solo los 800 voltios teniendo en cuenta que son coches más grandes y con enfoque premium?

Todos sabemos que la tecnología de 800 voltios que permite unas cargas más rápidas que la de 400 voltios es más cara. Y nosotros lo que hacemos es traer las tecnologías al mercado cuando están maduras. Por tanto, empezaremos con la tecnología de 400 y pronto sumaremos también la tecnología de 800 voltios a la plataforma para reducir las paradas para las cargas en viajes por autopista.

¿España va a tener una gigafactoría? ¿Y se asignará a las plantas españolas la STLA Small?

Esta es la intención si el Gobierno español ofrece las subvenciones adecuadas. Cuando estamos haciendo un cambio tan significativo en tecnología que nos obligan los gobiernos, es normal que pidamos alguna contribución, porque si no recibimos contribución de esos gobiernos, entonces nuestras empresas pueden estar en peligro. Por lo tanto, esas discusiones están en curso. Y queremos asegurarnos de que tengamos un acuerdo claro con el Gobierno español en esta dirección.

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