Martina, de 61 años, desaparecida en Marbella, está viva.

Martina, de 61 años, desaparecida en Marbella, está viva.

Marbella

Martina, de 61 años, desaparecida en Marbella, está viva: "Se ha ido a Huelva sin decir nada a nadie"

Las personas de su entorno preocupadas por su desaparición no dan crédito a lo ocurrido tras días de preocupación.

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No dan crédito a lo ocurrido. Después de llevar días buscando a Martina Glase, desaparecida en Marbella desde el 14 de marzo, este lunes sus conocidos se enteraban de que la Policía la había localizado en buen estado en Huelva, provincia andaluza a la que se había marchado sin decir absolutamente nada a nadie.

Cierto es que Martina no tenía familia en España, su contacto más habitual era su compañero de piso,un joven extranjero, y los pacientes a los que atendía a domicilio, ya que en los últimos años era auxiliar a domicilio para personas dependientes. Es justo por este motivo que Natalie, hija de dos de sus clientes, sintió que tenía que moverse para ayudarla, aún sin compartir apellidos.

Después de pasar un tiempo en las Islas Canarias, Martina llegó a Marbella, donde llevaba tres años cuidando de los padres de Natalie y de otros pacientes. De hecho, el día de la desaparición, acudió a casa de los padres de Natalie por la mañana. Creía que podía haber sufrido un accidente, ya que faltaban su Daihatsu Materia azul y su perrita Ellie, pero no. La Policía les ha confirmado que se encuentra bien.

La Asociación SOS Desaparecidos ya ha difundido que su alerta por desaparición ha sido desactivada, pero una sensación extraña se queda para los que la conocían, quienes aseguran que, pese a todo, se alegran de que haya quedado todo en algo anécdotico, aunque la situación roce el surrealismo. Esperaban que en caso de marcha voluntaria, les hubiera avisado.

A sus 61 años, la mujer no había dado ni un problema a sus pacientes, hasta el punto de no llegar tarde ningún día al trabajo. El día de su desaparición, llegó a dejarse una cacerola en la hornilla con comida hecha para su perro, pero se marchó de la vivienda para ir a hacer "unos recados".