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Los promotores de la Torre Chipperfield: "No es un proyecto especulativo; va a reforzar la imagen internacional de Málaga"

Ponen en valor el desarrollo de una arquitectura "sobria, sin estridencias, sin gestos excesivos" en el diseño de la torre de 144 metros de altura. Esperan que no haya "interferencias" en la tramitación final.

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Las claves

La Torre Chipperfield, un hotel de 144 metros y 382 habitaciones, supondrá una inversión de 200 millones de euros y busca reforzar la imagen internacional de Málaga.

El proyecto, firmado por David Chipperfield, apuesta por una arquitectura sostenible, integrada en el Mediterráneo y con más del 80% de sus superficies abiertas al público.

Incorpora un paseo de 1,3 kilómetros, priorizando la movilidad sostenible, y contará con varios restaurantes de alta cocina, beach club y piscina infinity.

La electricidad será 100% renovable y el hotel ofrecerá un centro de convenciones para atraer turismo de negocio y eventos internacionales.

El proyecto firmado por David Chipperfield por encargo de Al Alfia y Hesperia para levantar una torre hotelera de 144 metros de altura y 382 habitaciones en el dique de Levante ya es completamente público.

En ausencia del premio Pritzker de Arquitectura, ha sido el CEO de Hesperia, Jordi Ferrer, quien ha asumido en primera persona la defensa de la operación, hasta el punto de rechazar la idea de que se trate de una intervención "especulativa".

"No es un proyecto para nada especulativo. Obviamente va a tener un retorno para el promotor, pero sobre todo para la ciudad y los malagueños", ha remarcado en varias ocasiones Ferrer, quien ha elevado a 200 millones de euros la inversión completa. No ha descartado que una parte de los trabajos de los espacios en el dique de Levante dispongan de fondos europeos.

A su juicio, la torre programada va a permitir acercar el mar y el Mediterráneo a la ciudad, al recuperar un espacio sin uso para el ciudadano. Y ello con una arquitectura que ha calificado de "sobria, sin estridencias, sin gestos excesivos".

"Es una arquitectura respetuosa, sostenible, integrada en el Mediterráneo; una arquitectura que no compite con Málaga, sino que la acompaña", ha remarcado, enfatizando las virtudes de la propuesta de Chipperfield.

Para Ferrer, la construcción del hotel, que lleva casi una década sometida a una amplia tramitación administrativa, es "estratégica". Y ello porque le permitirá a la ciudad "competir con destinos internacionales que ya ofrecen congresos y eventos".

"Si queremos continuar atrayendo este tipo de turismo, de negocio, necesitamos una infraestructura capaz de responder a ello. La torre le va a dar a Málaga una herramienta nueva para competir en este mercado, de mucho poder adquisitivo", ha añadido, recordando la inclusión de un Centro de Convenciones de más de 2.000 metros cuadrados.

Para el CEO de Hesperia, que ha remarcado que el hotel de lujo será explotado por una cadena internacional de primer nivel, el desarrollo del edificio reforzará la imagen internacional de Málaga en el mundo.

"Sin interferencias"

Ferrer ha aprovechado para remarcar la regularidad de todo el procedimiento administrativo seguido hasta la fecha, cumpliendo cada uno de los hitos exigidos por las diferentes administraciones. "Ha sido un proceso reglado, muy serio, que ha seguido su curso y esperamos que lo siga haciendo sin interferencias políticas", ha apuntado.

Desde el estudio de David Chipperfield, Rodrigo Antón Carrasquer ha puesto en valor la apuesta que se hace en el proyecto por desarrollar nuevos espacios ciudadanos y públicos. En concreto, ha señalado que más del 80% de todas las superficies estarán abiertas a los vecinos.

En este sentido, destaca la configuración de un nuevo paseo de 1,3 kilómetros desde La Farola hasta la torre, con unos 54.000 metros cuadrados de superficie.

En concreto, incorpora un sistema de itinerarios que prioriza la movilidad sostenible, rebajando el peso del tráfico de coches y autobuses y dibujando carriles bici y zonas peatonales a diferentes alturas. Para ello, elimina carriles de circulación y bolsas de aparcamiento, con el fin de ampliar el paseo central y las zonas verdes.

El hotel incluirá varios espacios gastronómicos y de ocio. Así, según ha podido saber este periódico, en la planta 33 habrá un restaurante que será dirigido por un chef de reconocido prestigio. Tendrá vistas al mar y contará con bar y piscina infinity.

Más cerca del nivel de calle habrá otro restaurante abierto todo el día con propuestas mediterráneas, japonesas y variadas. Y en la planta 2, un beach club con bar, lounge, restaurante y piscina.

Los responsables del proyecto han puesto el acento en que se tratará de un edificio hiper sostenible. Muestra de ello es que el 100% de la electricidad será de origen renovable.

"Hay 45.000 metros cuadrados de edificio que impactado sobre la creación de 54.000 metros cuadrados de ciudad", han apuntado, recordando que la huella es de 5.600 metros. El resto de la parcela, que son unos 12.000 metros que quedan libres, configurando grandes espacios públicos.

De acuerdo con las previsiones, una vez superado todo el proceso administrativo y dispuesta la licencia de construcción, el plazo que se maneja es de algo más de tres años de obras. Con todo, según Ferrer, podría ser una realidad en 2029 o 2030.