Una de las infografías del futuro desarrollo Distrito Zeta, en Málaga.

Una de las infografías del futuro desarrollo Distrito Zeta, en Málaga.

Málaga ciudad

El ladrillo aletargado: los grandes proyectos ahora activados en Málaga fueron planificados hace 26 años

La capital de la Costa del Sol tiene suelo suficiente para una demanda de residencial a 25 años, aunque muchos sectores están aún por desarrollar.

10 febrero, 2023 05:00

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Las torres de 21 plantas que ya se levantan en el litoral oeste, con viviendas de más de 4 millones de euros, o Distrito Zeta, bautizado como el barrio del futuro de Málaga, no son sólo referentes de la nueva modernidad inmobiliaria en la que parece instalada la capital de la Costa del Sol, sino también de la larga travesía que han de recorrer determinados desarrollos antes de hacerse realidad.

Ambas operaciones, protagonistas indiscutibles del empuje de la ciudad en el panorama nacional e internacional, hunden sus raíces en el Plan General de Ordenación Urbanística de 1997. Es decir, han tenido que transcurrir unos 26 años antes de que se hayan empezado a materializar.

Una realidad inseparable de la actual industria del ladrillo y del mensaje que desde hace años vienen lanzando los promotores privados, ávidos de una simplificación de los procesos administrativos que permita reducir los plazos previos a la puesta en carga de los suelos.

Torre del Río y Sánchez Blanca son parte de un largo listado de sectores que fueron concebidos en el plan del 97 y que, a día de hoy, siguen sin estar plenamente desarrollados. A ellos pueden sumarse Santa Rufina, en la zona próxima al soterramiento de las vías del tren, o Rojas Santa Tecla, cuyos promotores pretenden completar en las próximas semanas la tramitación para arrancar los trabajos de urbanización a finales de año.

Imágenes de las tres torres de Torre del Río, en la zona oeste de Málaga.

Imágenes de las tres torres de Torre del Río, en la zona oeste de Málaga.

En total, según los datos dados a conocer este jueves por el coordinador general de Ordenación del Territorio y Vivienda, José Cardador, sectores sobre los que se dibujan del orden de 11.000 viviendas. Bien es cierto que tras un largo caminar, la mayoría encara la recta final. 

Pero la bolsa de suelo que tiene actualmente la capital de la Costa del Sol para la construcción de viviendas es mucho más amplia. Tanto como para acoger parcelas para unas 44.000 viviendas, suficientes para, dado el ritmo de ejecución de los últimos años, de entre 1.500 y 1.800 anuales, atender la demanda de los próximos 25

Este parámetro viene a confirmar el potencial que sigue atesorando la capital para responder a las necesidades del sector. Pero también la demora y lentitud con la que se impulsan estas operaciones.

Cardador, en su análisis de la situación, ha recordado que de la bolsa completa hay 95 sectores urbanos no consolidados con capacidad para 15.000 viviendas, a los que sumar otro paquete importante de suelo urbanizable sectorizado con otras 28.800 unidades de alojamiento.

Jornadas sobre vivienda

Todas estas cifras han salido a relucir durante unas jornadas celebradas en el edificio de la Gerencia de Urbanismo de Málaga y con el sugerente título Cómo hacer compatible la vivienda social con la vivienda premium en Málaga, previsión de la oferta en Málaga.

Durante la misma, el gerente del Instituto Municipal de la Vivienda, José María López Cerezo, ha venido a coincidir en la necesidad de precisar cuáles son los ritmos de crecimiento residencial realistas que tiene la ciudad. Y justamente el Plan de Vivienda diseñado por el Consistorio para el horizonte 2023-2027 equilibra estas previsiones y acota a unas 8.900 las casas, tanto privadas como públicas, tanto protegidas como libres, que dar respuesta a las necesidades de la población.

La visión del sector privado ha sido puesta por Bartolomé Inglés, director general de SUBA. De su intervención se deduce la misma carga de profundidad que los promotores vienen señalando desde hace años: la necesidad de acelerar los trámites para el desarrollo de los suelos.

"La Administración hace esfuerzos, pero su velocidad de cruceros no es la misma que la de los promotores", ha destacado, señalando el "peaje" que supone en muchas ocasiones la tramitación. A modo de ejemplo ha recordado una operación en la que sólo la evaluación ambiental ha necesitado de 20 meses. 

Inglés ha enfatizado cómo a la hora de plantear operaciones de vivienda a precio asequible se ha de tomar en consideración "el estado de madurez del suelo" y la localización del mismo. Un elemento esto último relevante, por cuanto son muchas las actuaciones que se ven abocadas a día de hoy a trascender del territorio de la capital. "Hace 15 años un malagueño no pensaba irse, por ejemplo, a Alhaurín de la Torre, y hoy es una opción válida por la escasa oferta que hay en la ciudad", ha afirmado.