En el librillo de Pablo Guede, la solidez defensiva es uno de lo tres pilares en los que quiere que descanse su equipo en este tramo de la temporada en el que pelea por la permanencia. Una de las decisiones que adoptó para mejorar esa retaguardia fue devolver a la portería a Dani Martín. 

El gijonés, que se encuentra cedido por el Real Betis hasta el final de temporada y todo apunta a que no entra en los planes del club para la próxima temporada, ha mejorado levemente sus cifras bajo palos en los últimos cinco partidos, los que lleva Pablo Guede al frente del Málaga. 

Martín arrancó la temporada en el banquillo, como suplente de Dani Barrio, que tenía galones de la temporada anterior. José Alberto lo conocía perfectamente de la cantera de Mareo, donde creció como futbolista. Y en la jornada cinco decidió el cambio bajo los palos. 

Desde esa jornada, cuando el Girona visitó La Rosaleda y cayó 2-0, Martín fue indiscutible hasta la goleada en casa contra el Ibiza por 5-0, tras la cual fue destituido el entrenador asturiano. 

La llega de Natxo González le costó la titularidad a Dani Martín, que solo fue titular en el último partido del entrenador vitoriano, precisamente contra el Girona en Montilivi, cuando el Málaga perdió 1-0 en uno de los mejores partidos de los blanquiazules en lo que iba de temporada. 

Hasta ese encuentro, Martín había disputado con el Málaga 21 partidos encajando 32 goles. Esto suponía una media de 1,5 goles encajados por partido. 

Tras el partido del Girona el Málaga destituyó a Natxo González y fichó a Pablo Guede para enderezar la nave blanquiazul. Con el argentino, Dani Martín ha sido el único jugador que ha jugado todos los minutos posible. Las sanciones y las lesiones han impedido a hacer lo propio a otros fijos como Jozabed, Escassi o Víctor Gómez. 

Son ya cinco partidos a las órdenes del entrenador bonaerense. En dos de ellos, Dani Martín ha dejado la portería a cero. En Leganés, con la única victoria de esta última etapa, 0-3, y el pasado sábado contra el Oviedo. Al choque contra el Eibar en el que encajó tres goles hay que ponerle un asterisco porque los malaguistas jugaron desde la media hora con uno menos.

El mejor partido de Dani Martín de estos cinco fue el primero, contra el Real Valladolid, que acabó con empate a dos. 

En total, el asturiano ha encajado siete goles en cinco partidos. La media que se arroja es ligeramente inferior a la que tenía antes: 1,4 goles encajados por partido.

La media total de goles encajados por Dani Martín en esta temporada en el Málaga es de 1,5. 39 goles en 26 partidos.

Los de Martiricos han encajado 55 goles en 39 partidos. 

Ha tardado, pero el debate que se generó al principio de la temporada en el Málaga en la posición de portero se ha zanjado. Más le vale a los de Guede tener tranquilidad en una de las posiciones más trascendentales del equipo.