Ómicron no solo está poniendo en jaque al mundo en general por el exponencial ascenso del número de casos positivos, sino que también al deporte en general y a la práctica del ejercicio. Este martes el Málaga CF ha anunciado una nueva ola de seis casos positivos en la primera plantilla masculina que, sumados a los otros seis que comunicó el club hace unos días, confirman el brote de Covid-19 en estas fiestas navideñas.

"Todos ellos se encuentran con sintomatología leve o completamente asintomáticos y permanecen en la obligatoria cuarentena domiciliaria". Así lo ha expresado la entidad malacitana en un comunicado sobre estos nuevos jugadores cuya identidad se desconoce. Su vuelta al trabajo queda marcada hasta que den de nuevo positivo y la presencia de estos seis nuevos casos en el partido del lunes frente al Alcorcón es prácticamente imposible.

La plantilla volvía estos días a entrenar y permanecían a la espera de estos resultados para volver a los terrenos de juego. Por lo que el club deberá seguir muy pendiente del estado de estos doce componentes y deberá realizar test de antígenos a diario en las instalaciones deportivas, que forman parte del nuevo protocolo de LaLiga y, además, se deberán realizar una PCR semanal en los primeros 15 días de enero. 

Con respecto a la suspensión de los partidos, LaLiga ha establecido un mínimo de cinco profesionales para disputar los encuentros y se podrán completar las convocatorias con el filial. El caso del Málaga CF no es una cuestión aislada. El mundo del fútbol se está viendo muy afectado en esta vuelta al trabajo por los positivos y son muchos los equipos que han declarado 10 o más casos entre la plantilla y el cuerpo técnico de los clubes en Primera y Segunda División.

Unicaja

La situación no es muy diferente en el baloncesto. Ya se han suspendido tres partidos de esta jornada 15 y dos de la 16, aunque podrían ser algunos más si los casos van a peor. Por el momento, el Unicaja está limpio y ha superado todos los test que les han ido haciendo. Aunque no puede decir lo mismo su rival de este miércoles, el Bilbao Basket. El equipo de Álex Mumbrú anunció cinco casos de Covid-19, solo dos jugadores, y el partido pende de un hilo a la espera del resultado de esas nuevas pruebas que tiene que pasar el equipo vasco para confirmar la disponibilidad del encuentro.

Fruto de estas demoras, los conjuntos de ACB decidieron por unanimidad aplazar el cierre de la primera vuelta hasta el 30 de enero para que todos los partidos pudieran jugarse antes de cerrar los ocho clasificados para la Copa del Rey.