Antonio J. Aguilar durante la presentación del campeonato de España

Antonio J. Aguilar durante la presentación del campeonato de España Ayuntamiento de Málaga

Deporte

Antonio J. Aguilar, subcampeón del mundo de 100 kms en ruta: "este tipo de deporte no es salud"

Málaga acoge este sábado el Campeonato de España de 100 kilómetros en ruta, donde el de Campanillas aspira a revalidar el título tras su éxito en la India en el mes de diciembre.

Más información: subcampeón del mundo de 100 kilómetros

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Cuando el sábado den las seis y media de la mañana unos cientos de atletas se echarán a correr por las calles aledañas al estadio Ciudad de Málaga para completar hasta 100 kilómetros. Entre ellos, Antonio Jesús Aguilar, campeón de España de la distancia en 2022 y subcampeón del mundo hace apenas seis meses en la India. 

Este malagueño de Campanillas y sangre perota (Álora), aspira a revalidar el título nacional cuyo campeonato se disputa esta vez en Málaga -se une también el Campeonato de España de 50 kilómetros-. Se ha diseñado un circuito de 2,5 kilómetros al que habrán de darle los atletas 40 vueltas. Nada más y nada menos. Por encima de las seis horas corriendo. 

Antonio es trabajador de Málaga Deporte y Eventos, la empresa del Ayuntamiento de Málaga que gestiona los eventos deportivos de la ciudad y a cuyos compañeros agradece todas las facilidades a la hora de preparar grandes retos. Luce siempre orgulloso la camiseta amarilla del Club Atletismo Guadalhorce-Álora, donde encuentra a uno de sus referentes. Sueña con la victoria, como siempre que se coloca un dorsal y se imagina levantando la cinta de campeón, aunque reconoce que ganar “es puntual”. Los espejos en los que se mira son “gente de a pie”, los que “se levantan a las cinco de la mañana a trabajar, tienen niños y después salen a entrenar”, antes de que la élite del deporte mundial. Considera que no tiene techo, sino retos por delante. La espera se le está haciendo larga: “estos días previos sobran”. Y considera ya un triunfo estar en la línea de salida este sábado, como reconoce a EL ESPAÑOL de Málaga un par de días antes de la prueba. 

El malagueño Antonio Aguilar, subcampeón del mundo de 100 km en ruta

El malagueño Antonio Aguilar, subcampeón del mundo de 100 km en ruta RFEA

“Me siento muy afortunado de correr en casa. Hago deporte porque me gusta. Estoy aquí sin obligación ninguna. Para mí ya es un triunfo, porque el 21 de enero tuve un accidente grande en bici. Y me ha costado mucho recuperarme. A finales de enero te has fracturado la clavícula. Te has fisurado una costilla. Ahora tienes que estar con el brazo cabestrillo. No puedes hacer esto, lo otro…  Y luego ponte en forma para la exigencia de correr seis horas y media, siete horas a tu máximo nivel. Es duro. Esta preparación ha sido súper dura para mí. Tanto física como mentalmente. Y haber llegado aquí con ganas de correr es un triunfo. Voy a dar mi mejor versión. Y si no me pasa algo grave, los 100 kilómetros los voy a correr enteros”.

¿Cuándo comenzó la cuenta atrás?

Quince días antes levantas el pie. Y a partir de ahí ya esperas que lleguen las buenas sensaciones, sentirte ligero… Porque es que acumulas mucho entrenamiento antes y siempre tienes dudas. ¿Habré entrenado bien? ¿Habré entrenado mucho? Aunque para una carrera de este tipo siempre tienes dudas. Y estos últimos tres o cuatro días, cuando ya estás descansado y tienes ganas de correr es cuando dices “que me pongan ya en la línea de salida.

¿Tienes ganas de correr? ¿No te atormenta pensar la paliza que te tienes que dar corriendo 100 kilómetros?

Yo ya he entrenado esto varias veces. Lo más duro es el proceso de los 3 meses anteriores. Eso sí es un palizón, no hay respiro. Un día, otro día, días que doblas entrenamiento, estás constantemente cansado… Tienes un par de días de respiro y sacas un poquito la cabeza así como las tortugas. Pero ya una vez que has hecho ese trabajo, cuando ya hago un poquito la descarga, el descanso y la activación, que es dos semanas antes, es cuando ya me siento liberado. Ya tengo el trabajo hecho y estás listo. Y al final lo del sábado es un premio. Sabes a lo que vas, que vas a estar un montón de horas corriendo, que vas a tener momentos de crisis, que vas a tener después momentos de euforia, que vas a controlar esos momentos. Y ya está. Pero lo del sábado es un premio. 

Son tres meses de entrenamiento específico, pero esta prueba requiere una base sólida.

Cada carrera tiene su peculiaridad. Pero una prueba de ultrafondo te requiere muchos años de base para rendir a tu mejor nivel. Yo personalmente entre doce y catorce semanas antes me pongo un poco más específico. Pero en este tipo de pruebas entrenas tanto y es tan complicado medirlo todo al dedillo… Tienes que adaptarte mucho a cómo está el cuerpo, la recuperación que tienes… Pero sí veo necesaria una base de años.

¿Y sólo entrenas carrera ? 

Trato de hacer mucha carrera y mucha bici, porque yo vengo del triatlón. Y es algo que me viene bien porque me quita mucho impacto. Aunque esta preparación para Málaga ha sido muy peculiar, porque corrí en la India el Campeonato del Mundo en diciembre. Después de esa carrera me ha costado mucho recuperar. Porque supongo que tuve una baja de defensas potente y tuve varias semanas malas. Cuando ya empecé a estar bien tuve un accidente bastante grande con la bici. Me fracturé la clavícula. Me fisuré una costilla. He pasado un proceso de cuatro o cinco meses en los que he tenido que recuperarme de una carrera, recuperarme de un accidente en bici y preparar el 100 de Málaga. Así que esta preparación ha sido extraordinaria.

¿Y qué esperas para el 100 de Málaga? 

Va a ser una fiesta. Se lo comentaba ahora con un compañero de trabajo. Pienso que esto a lo mejor es un reconocimiento o una consecuencia de cosas. Que llegué al ultrafondo; que haya quedado campeón de España; que haya quedado subcampeón del mundo; que tenga amistades en el ayuntamiento que hacen deporte, que somos amigos... Y ha sido como que gracias a unos éxitos hemos podido conseguir esta prueba aquí en Málaga. Así que para mí es una motivación extra. Estar aquí corriendo en Málaga un Campeonato de España de ultrafondo y con tanta gente que conoces... Yo creo que no voy a tener una carrera así en mi vida más.

En una prueba que requiere tanta preparación, ¿se miran también los rivales? O aquí lo principal es que tú estés bien. Porque tú vas a ganar.

Yo siempre salgo a ganar. Pero se gana ocasionalmente. Mi mentalidad cuando empiezo a preparar algo es ganar. Pero, evidentemente, ganar es puntual, no es lo normal. Así que yo trato de estar en mi mejor versión si preparo una prueba a este nivel. Después claro que miras los rivales, es inevitable. Pero una prueba que requiere tanto esfuerzo y es tan larga es muy selectiva. Tienes que estar en tu mejor nivel. Este tipo de carreras al final te ponen en tu sitio. Si estás bien vas a hacer una buena carrera, que tampoco está garantizado. Y si no, te costará más trabajo. 

¿Y el sábado cómo te ves?

Pues el sábado va a ser un gran día, lo vamos a disfrutar y yo voy a ganar. Y ya veremos qué pasa después, pero voy a intentarlo.

¿Has soñado con la carrera? 

Mucho. Yo desde el día uno salgo a entrenar y me visualizo mil veces entrando en el Estadio Atletismo y levantando la cinta. Desde el día uno, es mi trabajo mental, lo tengo muy interiorizado y después la carrera te pone en tu sitio y tienes que pelearlo, pero yo salgo a entrenar así.

¿Y en qué momento se te pasa por la cabeza ponerte a correr 100 kilómetros?

Uno va probando retos. Yo siempre he sido bueno en deportes de larga distancia. Y yo sabía por mediación de un compañero, que es Jesús Gutiérrez, de la prueba de los 100 kilómetros que hay en Santander. Y yo le decía que algún año tenía que preparar eso. Y en mi vuelta al deporte, porque estuve unos años parado por las lesiones, buscaba alguna motivación, hacer algo diferente. Y dije “venga, voy a probar”. Y se me dio bien. Y he decidido enfocar estos año mi energía y mi tiempo en esto. En estas distancias. Y quiero dar el salto a distancias más largas. 12 horas, 24 horas… Me apetece.

¿Y te arrepientes en algún momento?

Pues la verdad es que de momento no me he arrepentido. Yo he aprendido, porque aunque seamos todos atletas populares, siempre tenemos nuestras presiones, nuestras urgencias… Pero yo corro porque me apetece, sé que ganar es puntual. Me sienta bien correr. Y arrepentirse no ha pasado en ningún momento por mi cabeza. Es complicado, es duro, tienes tus días buenos y días malos… Pero para nada. De hecho, me apetece seguir experimentando. Y ya te digo, con distancias más largas a ver qué tal.

¿Dónde está tu techo? 

Pues que no pienso en techo ni en nada. Estoy disfrutando del momento. Cada carrera es un reto. No estoy obsesionado con los ritmos ni con ir más rápido, ni con ir más lento. Estoy sintiendo las sensaciones de correr, de llegar. Yo no esperaba ser subcampeón del mundo. Creo que después de eso ya deportivamente he alcanzado todo. Pero tampoco pienso que voy a volver a ser subcampeón del mundo. Igual no vuelvo a ir con la selección. Igual no vuelvo a quedar campeón de España nunca. O a hacer una medalla. Voy prueba a prueba y disfrutando. Y aprovechando el momento.

Antonio Jesús Aguilar durante la prueba de los 100 kms en ruta en Santander en 2022.

Antonio Jesús Aguilar durante la prueba de los 100 kms en ruta en Santander en 2022. Antonio Jesús Aguilar

¿La preparación de este tipo de pruebas requiere de alguna preparación mental también con especialistas? 

Hombre, yo creo que en el mundo del deporte tener especialistas que te ayuden a la hora de mejorar mentalmente es súper importante. Se debe de hacer. Yo no lo hago. Y no está bien. Pero tener siempre un psicólogo, alguien que te asesore, es importante. Pero claro, yo me salvo un poco por mi experiencia deportiva, porque siempre he estado dedicado a la larga distancia. Mentalmente aprendes a gestionar este tipo de preparaciones y de carreras. He tenido muy malos momentos y he aprendido de todo eso. Me alimento un poco de eso. Pero evidentemente debería de tenerlo. 

Y preparar este tipo de carreras, meterse estas palizas entrenando, porque esto son palizas, ¿esto puede llegar a ser perjudicial para la salud? 

Este tipo de deporte no es de salud, yo lo tengo clarísimo, esto es extremo, esto no es bueno para la salud. Lo que pasa es que con el paso de los años somos muy competitivos, pero estructuras tu cuerpo para aguantar estas cargas, para pegarte estos palizones no es deporte de salud, en absoluto.

¿No temes secuelas? 

Ahora mismo no pienso en eso, hay gente que se pega toda la vida fumando y no le pasa nada y habrá gente que se pegue toda la vida haciendo ejercicio y después no sé, no puede andar, no lo sé. Yo voy día a día, me encuentro bien físicamente, tengo 45 años y estoy en el mejor momento para hacer este tipo de deporte físico y mental, voy a aprovecharlo y ya.

¿Qué sientes cuando te estás poniendo las zapatillas para salir a correr? 

Yo llevo toda la vida corriendo. Nos gusta esto, ¿no? Es como una droga que te fija un objetivo y te motiva, te conciencia, vas a por él. Todos los días no tenemos un buen día porque hay días que cuesta mucho trabajo ponerse las zapatillas. Estás cansado, tienes tus obligaciones personales. Pero en general a mí tener retos de este tipo me motiva mucho y me empuja mucho a ponerme las zapatillas. Me apetece, soy competitivo y me hace sentir bien.

¿Y a qué tienes que renunciar? Porque al final esto requiere un tiempo de entrenamiento elevado. 

Renuncio a poco porque mi estilo de vida siempre ha sido así. Por suerte, mi familia, mis amigos y todo el mundo es un entorno volcado en el deporte y lo tengo fácil en ese aspecto. Y después ya con el paso de los años busco el equilibrio. Ahora soy padre, tengo una edad. Mi equilibrio es si un día me tengo que tomar una cerveza, me la tomo. Si tengo que comer hamburguesas, las como. Porque pienso que con el esfuerzo que hago tampoco voy a estar privándome de todo. Llevo una vida equilibrada y sana pero sin restricciones, ninguna. No me quito de nada.

¿Cuánto tiempo dedicas al día a entrenar? ¿Tienes una rutina? 

Se echan entre unas doce, catorce, quince horas, entre bici, gimnasio, carrera a pie… es un volumen importante. Cuando estoy preparando una prueba de este tipo, un 25% de tu día va dedicado a esto.

¿Has calculado los kilómetros que haces, por ejemplo, en un año? 

En un año no, pero para preparar a India, en tres meses, sé que hice unos tres mil y pico kilómetros en bici y mil quinientos corriendo, aproximadamente. No soy mucho de datos. No me obsesiono con los kilómetros. Soy más de sensaciones.

¿Tienes espejos en el deporte?

Sí, sí, tengo muchos espejos. De hecho, me he fijado siempre en muchos deportistas, porque lo que me gusta es sacar las cosas buenas de cada deportista, de la forma en la que corren, de cómo entrenan, de cómo hacen las cosas. Y, por ejemplo, en mi club, para mí un gran referente siempre ha sido Juan Vázquez, que me ha gustado mucho su forma de correr, su forma de hacer las cosas. Antonio García, que fue mi primer entrenador... Me ha enseñado a competir, a gestionar las cosas y cualquier persona que se pone en una línea de salida es un referente, porque todos traen mucho detrás.

¿Y algún deportista de elite?

Yo es que soy más de la gente de a pie. Para mí es más referente una persona que tiene cuatro niños, que sale a correr a las seis de la mañana y encima después tiene que trabajar diez horas, con todo el respeto para todo el mundo. Los demás son deportistas de élite, te inculcan muchos valores… pero es su trabajo. Para mí es más referente la persona que ves corriendo por la acera, que a lo mejor está desde las cinco de la mañana trabajando en un supermercado y me llena más eso, me motiva más eso.

Eres asiduo a muchas carreras que se celebran en Málaga, de todas las distancias. 

Sí, a mí es que me gusta competir, me llena mucho. Porque que yo entrene en una larga distancia no quiere decir que vaya a rendir menos o que sea más lento en un diez mil. Yo siempre que salgo a correr salgo a dar lo todo, ya sea en un kilómetro, en 50 kilómetros o en 20 kilómetros. Y me encanta competir, es la vidilla que te da ponerte un dorsal, ver a los amigos, correr y después tomarte una cerveza.

¿Cuál es tu carrera fetiche?

La Media Maratón de Álora. Sueño con ganarla. He pegado muchas veces en el poste, pero siempre he estado en el podium. Porque es mi pueblo,  llevo toda la vida pasando por esas carreteras y es una carrera que me encantaría ganarla, trato de no perdérmela. Me encantaría ganarla algún año.