Antonio Banderas y Domingo Merlín.
Antonio Banderas y Domingo Merlín reinventan ‘Imagine’ en Sohrlin: "El espectáculo está muy vivo y seguirá cambiando"
El espectáculo circense estrena el espacio Sohrlin con una nueva versión mucho más narrativa, con toques de poesía, humor y alma. Es la primera producción 100 % propia del espacio cultural impulsado por Banderas y Merlín.
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Es una simple anécdota, pero ayuda a contar muy bien la emoción que transmite la nueva versión de Imagine, el camino de los sueños. Los ojos de Antonio Banderas comienzan a brillar relatando cómo una pequeña con un cáncer terminal fue a ver hace unos días uno de los ensayos del espectáculo. Tras su mascarilla, desconectó de hospitales y medicamentos por una hora y media: acróbatas y otros artistas de circo la llevaron por un camino de sueños hacia otra parte para que, al menos por un ratito, viviera la vida que una niña como ella debe tener.
Y eso es Imagine desde que se estrenó en el Teatro del Soho en la Navidad de 2023. Emoción pura y dura. La trama, ahora narrada por el propio Antonio Banderas, se centra en Kiko, un chaval de apenas 18 años muy desconectado en una familia particular. Su padre, por ejemplo, es un clásico workaholic, uno de esos hombres que no suelta el teléfono ni un rato al día. Por su parte, su tía no consigue salir a la calle sin pensar en qué dicen los demás sobre ella y su aspecto físico. Juntos acuden a un hotel llamado Imagine para celebrar su cumpleaños y allí se encuentran con una experiencia que le cambia la vida.
Este viernes se reestrenó en el espacio Sohrlin Andalucía, ubicado en la zona oeste de Málaga, donde permanecerá hasta el próximo 27 de julio y se perciben cambios: el principal es que ahora cada actuación circense no solo se siente, sino que también se narra. Lo que antes era un show más etéreo, ahora tiene mucho más cuerpo y todo está más hilado, según confiesan Domingo Merlín y Antonio Banderas, cabezas visibles de Sohrlin y directores y creadores de la obra Imagine.
Una imagen de la presentación.
“La gran novedad es que incorporamos una narración escrita y hablada, que hago yo mismo, y que dota de sentido emocional a lo que ocurre en escena. Hay ironía, pero también incluso poesía”, explica Banderas a EL ESPAÑOL de Málaga, que asegura que este aspecto se ha hilvanado en solo siete días y que se unió a la dirección del proyecto tras recibir una llamada de su socio.
Imagine es también la primera producción 100 % original de Sohrlin, el nuevo espacio cultural fundado por ambos creadores en Málaga. El espectáculo, un canto a los sueños y al circo contemporáneo, se representa en el impresionante auditorio del propio Sohrlin, que es mucho más que un patio de butacas. "El público entrará por la recepción de la escuela y se sumergirá en una experiencia inmersiva en el Universo Sohrlin antes y después del espectáculo", cuentan ambos.
En esos rangos de tiempo, podrán compartir tiempo en familia en un espacio donde podrán tomarse fotos e incluso comer algo. De momento, toda la comida viene de un catering, aunque Banderas no descarta que en el futuro realicen colaboraciones con algunos de sus restaurantes. "Todo se andará, pero el tema de la comida también es difícil, porque, por ejemplo, solo poniendo comida caliente ya necesitas salidas de humo...", dice, a lo que Domingo Merlín añade que, de momento, "todo viene hecho de fuera".
En lo meramente artístico, Banderas subraya que Imagine está concebido como una obra en constante transformación: “No nos apalancamos. El show, que va a estar de momento hasta el 27 de julio, va a ir cambiando. Es un espectáculo vivo. Si vengo dentro de un mes a verlo, seguro que propondré cambios", añade. Como directores y autores, ambos tienen la libertad de moldear la obra sobre la marcha, atendiendo al feedback del público y su propio criterio artístico. Para los que hayan visto el espectáculo en el Soho, también se han incluido nuevos números circenses.
Pero esa evolución de la que habla Banderas no es sencilla. El alto nivel técnico del montaje hace que cada modificación suponga horas de trabajo. “Cada vez que cambiamos algo, hay que reprogramar luces, sonido, vídeo… Esta gente [refiriéndose a su equipo] se ha quedado trabajando hasta las cinco de la madrugada para preparar el estreno”, cuenta Banderas, orgulloso de los trabajadores que tiene. La verdad es que si algo destaca en Imagine, ese es el juego de luces y efectos de sonido, que sumado a la narración de Banderas sumerge en algo totalmente mágico al espectador. La tecnología es clave en el show.
Otro aspecto que juega a favor de la obra en este reestreno es el cambio de escenario. En Sohrlin tienen mucho más espacio, algo clave en números de circo de gran potencia. "Por eso en Sohrlin han crecido los propios números y las alturas que pueden conseguir los acróbatas, algo que el espacio propicia, igual que las grandes pantallas", dicen.
Ambos auguran que, "dentro de dos años, habrá un 'Imagine 4.0', que puede tener la posibilidad de viajar internacionalmente y que se habrá ido perfeccionando a través del tiempo y la experiencia". Sobre una posible gira, Domingo Merlín señala que "no es tan complicado, porque este formato se podría replicar en cualquier parte del mundo, aunque es cierto que se necesitan unas características de espacio similares".
El reparto también ha sufrido modificaciones respecto a su paso por el Soho. “Muchos de nuestros artistas están ahora en grandes compañías como el Circo del Sol o en lugares como Dubái”, lamenta Merlín.
La fuga de talento responde a la falta de contratos estables en España frente a las condiciones ofrecidas por empresas internacionales. Aun así, el equipo ha crecido “en otros aspectos”, y el espectáculo, que mantiene a impresionantes figuras como las de Manolo Supertramp o Alejandro Ponce, ambos malagueños, sigue funcionando como escaparate para jóvenes talentos locales.
El objetivo, explican, es convertir Sohrlin en un polo de creación cultural con capacidad para competir a largo plazo. “Queremos generar contratos de recorrido para dar estabilidad, no solo a los artistas, también a los técnicos que iremos formando”, asegura Merlín. “Como siempre decimos, Sohrlin aspira a ser algo más: producción, formación, exhibición", expresan.
El mayor reto ahora para ellos es traer al público. Son varios meses en escena y confían en el boca a boca y en los medios de comunicación para dar a conocer Sohrlin y su primera producción, Imagine."Si no funciona, veremos qué ha ocurrido y cómo subsanarlo", indican.
"No somos Broadway ni Los Ángeles, venir desde el Centro de Málaga hasta aquí no es tan complicado. El reto es que la gente entienda que esto no es solo un teatro, es una experiencia cultural más amplia”, dice Banderas, que sueña con construir sinergias desde Sohrlin con museos, restaurantes y hoteles para crear paquetes turísticos de fin de semana que integren espectáculos, gastronomía y cultura.