Una imagen de Paco, desaparecido en Almogía.

Una imagen de Paco, desaparecido en Almogía. Ayuntamiento de Almogía

Málaga

Avanza la investigación sobre la desaparición de Paco 'el del Molino' en Almogía: rastrean viviendas y organizan batidas

Varios perros se han unido este mediodía al dispositivo de búsqueda activado en este pueblo malagueño.

Más información: Almogía, consternada con la desaparición de Paco 'el del Molino': encuentran su casa revuelta y sangre en el suelo

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En Almogía no hay consuelo. Las horas pasan, y no hay rastro de Paco Mayorga, un anciano de 83 años conocido en el pueblo como Paco 'el del Molino'. El anciano desapareció el pasado fin de semana en unas circunstancias calificadas de "inquietantes". El sábado por la tarde fue la última vez que se le vio con vida, cuando acudió a ver un partido de fútbol a casa de un familiar, donde estuvo hasta última hora de la noche; pero el domingo su sobrino, al ver que Paco no daba señales de vida, decidió ir a su casa.

No era madrugador, pero al ver que no acudió al acto de presentación del cartel de la Semana Santa de Almogía como tenía previsto y nadie había hablado con él, se extrañó. Al llegar, encontró la puerta encajada, sangre en la escalera, su dentadura (que no se quitaba) en el suelo y el radiador encendido. Todo estaba revuelto y Paco no se encontraba en casa.

De inmediato, la familia dio aviso a los servicios de emergencias para denunciar su desaparición y la Guardia Civil se ha hecho cargo de la investigación, aunque también cuentan con el apoyo de la Policía Local de Almogía. Desde este lunes están trabajando no solo en la casa de Paco, sino también en los alrededores. Se han realizado varias batidas por el pueblo y han inspeccionado casas cercanas, especialmente una que está abandonada. Pero de momento no hay ninguna pista sobre el anciano.

Las lluvias han dificultado el uso de drones en la zona en las últimas horas y este martes a mediodía se han unido al dispositivo de búsquedas varios perros. La familia está conmocionada, pero a la vez convencida de que Paco no puede estar muy lejos de allí.

No entienden cómo alguien ha podido hacerle daño a un hombre que no se metía con nadie y que "no tenía enemigos". Paco vive solo, no tiene hijos ni nietos, pero sí primos y sobrinos, con los que guarda una estrecha relación. Todos lo sienten como un abuelo. Era conocido como Paco 'el del molino' porque en una parte de su casa tiene un viejo molino de harina. Un molino, por cierto, que tenía las luces encendidas cuando su familia entró a la vivienda el domingo, algo que les llamó la atención porque no era habitual.