Juan, Guille y Sergio en su estudio
El estudio de tatuajes que eligió Valdemoro por un estudio de mercado: "Fuimos los primeros en contratar por Infojobs"
Pink Shark Tattoo abrió el 29 de marzo de la mano de Sergio, Juan y Guille, amigos de la infancia, pero ninguno es tatuador.
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¿Es posible abrir un estudio de tatuajes en tan solo una semana? Cualquiera diría que es una locura, pero tres madrileños lo han hecho en su nuevo local en Valdemoro, que han conseguido abrir en tiempo récord.
Sergio, Juan y Guille son amigos desde la infancia y nunca se habrían imaginado que montarían un negocio juntos y menos dedicado a este sector. "Ninguno de los tres es tatuador, aunque sí tenemos algunas nociones sobre el tema", comenta Sergio en conversación con Madrid Total.
Aun así, quisieron aprovechar "sus conocimientos para poder aparecer en Discovery y generar engagement" para empezar a plantearse la posibilidad de hacer algo. "Decidimos aprovechar esta visión de negocio que teníamos los tres para poder montar algo juntos", explica.
Shark Pink Tattoo ha llegado a la ciudad del sur de Madrid para quedarse, pues la elección de esta ubicación no ha sido casualidad. "No somos de Valdemoro, pero queríamos entrar en un sitio donde fuésemos a tener demanda".
"Hicimos un estudio de mercado para ver en qué zonas se hacían más búsquedas de estas características y acabó saliendo Valdemoro, así que para aquí que nos vinimos", confiesan sobre los inicios de un negocio que se ha vuelto viral.
Su plantilla de tatuadores toca todos los estilos de tatuaje, algo que no es muy común pues cada estudio suele centrarse en uno en concreto. "Queríamos tocar todos los palos".
Además, prometen una "experiencia personalizada" para cada cliente. "Cada tatuaje que sale de nuestro estudio lleva una parte de ti y una parte de nosotros". En su Shark Tank, como denominan a su estudio, "no hay prisas, ni ruido, ni procesos en serie", sino que ofrecen "un ambiente cómodo y limpio, y artistas que aman su oficio".
En total, en su banquillo cuentan con ocho profesionales que fueron contratados por un método poco convencional ya que a muchos les contactaron a través de su perfil de Instagram, donde podían ver sus obras anteriores y a otros les encontraron, directamente, de una forma todavía menos ortodoxa.
"Pusimos un anuncio en Infojobs". Algo insólito dentro del mundillo. "Muchos de los entrevistados nos contaron que era la primera vez que veían una oferta de tatuador en un portal de empleo", bromean.
Ahora, la conexión ha sido tal que reconocen que sus trabajadores han traído clientela pero también que el estudio ha sido capaz de "generar su propia cantera".
Reforma en tiempo récord
Pink Shark Tattoo lleva abierto en el número 1 del Pasaje de Colón de Valdemoro desde el día 29 de marzo, fecha en la que se celebró una gran fiesta de inauguración con influencers y otras personas del sector.
El camino a recorrer para llegar hasta ahí tuvo que ser muy rápido. "Teníamos el proyecto en mente, pero tuvimos que llamar al arquitecto y decirle que en 10 días había que montar todo".
Ahí comenzó la cuenta atrás, desde ese momento trabajaron cada día para que todo estuviese a punto para el día señalado. "Aquí estábamos a lo mejor diez o doce horas, seis días metidos, trabajando a tope". "Nosotros íbamos consiguiendo y moviendo todos los materiales que nos pedían".
Documentaron toda la aventura a través de sus redes sociales, donde subían 'vlogs' diarios informando de los avances de la remodelación. Además, por sus redes sociales comparten algunos de los diseños ya finalizados y otros contenidos sobre su día a día.
