El consejero de Presidencia, Justicia y Administración Local, Miguel Ángel García, el consejero de Vivienda, Transportes e infraestructuras, Jorge Rodrigo, y la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, durante el acto de apertura de la remodelación del vestíbulo de la Estación de Atocha-Almudena Grandes.

El consejero de Presidencia, Justicia y Administración Local, Miguel Ángel García, el consejero de Vivienda, Transportes e infraestructuras, Jorge Rodrigo, y la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, durante el acto de apertura de la remodelación del vestíbulo de la Estación de Atocha-Almudena Grandes. Alejandro Martínez (EP)

Madrid Comunidad

La experiencia de pagar en el Metro con la tarjeta del hotel: así será el nuevo sistema de transporte sin la 'red card'

El nuevo sistema abre la posibilidad de que Metro tenga que poner tornos a la salida y elimina la necesidad de comprar el abono mensual.

Más información: Revolución en el transporte público de Madrid: se cobrará al usuario al final del día según los viajes que haga.

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El Consorcio Regional de Transportes ha iniciado los trámites para implantar en Madrid un novedoso sistema de acceso al transporte público que transformará por completo la forma de pagar en autobuses y Metro, relegando la conocida red card al cajón del olvido.

La presidenta regional, Isabel Díaz Ayuso, anunció la medida el pasado viernes durante la segunda jornada del Debate del Estado de la Región. Con el paso de los días se han ido conociendo más detalles de un modelo que ya funciona en ciudades como Londres.

El sistema, conocido como ABT por sus siglas en inglés (Account-Based Ticketing), entrará en funcionamiento en 2027 y permitirá que cada usuario abone siempre la tarifa mínima en función del uso que realice del transporte madrileño a lo largo de un mes.

"Es una experiencia única y novedosa", subrayaban este lunes desde la Consejería de Transportes. La eliminación del soporte físico de la tarjeta roja abre la puerta a innovaciones como que un turista pueda llegar a usar incluso "la tarjeta de su hotel" para acceder al Metro.

Ese ejemplo es, de momento, solo una simulación, pero ilustra el potencial del sistema. Una de las principales novedades será que los usuarios habituales ya no tendrán que renovar su abono mensual: el cálculo se hará automáticamente al final del periodo de uso.

Tal y como publicó este diario, el modelo ABT implica que los viajeros que paguen con tarjeta ya no abonarán cada trayecto en el momento de pasar el torno, sino que se les aplicará el precio más reducido al cierre del día.

El consejero del ramo, Jorge Rodrigo, recalcó que este sistema calculará de forma inteligente y centralizada la tarifa "más económica posible", eliminando la necesidad de adquirir billetes físicos o recargar títulos específicos. "Se facilitará el uso de toda la red —Metro, autobuses urbanos e interurbanos y Cercanías— directamente con tarjeta bancaria, móvil o smartwatch", añadió.

Para ello, el sistema calculará de manera automática la tarifa más ventajosa al final de cada mes en función de los viajes realizados. Esto beneficiará tanto a turistas, que desconocen qué abono necesitan, como a usuarios habituales.

La implantación del modelo podría exigir la instalación de tornos de salida en todas las estaciones de Metro, algo que hoy solo existe en Cercanías. Desde la Consejería han confirmado que es una posibilidad, aunque sin concretar fechas ni darlo por seguro.

Un ejemplo lo ilustra con claridad: un trabajador adquiere cada mes su abono de transporte. Si el día 10 sufre un accidente que le obliga a teletrabajar, ese abono ya no le sirve y lo pierde. Con el nuevo sistema, en cambio, no habría adelantado ese pago, sino que al final del mes el sistema le aplicaría la tarifa más barata. En este caso, solo se le cobraría un multiviaje correspondiente a los trayectos realizados hasta el día del accidente.

El modelo se pondrá en marcha en 2027 y, este mismo lunes, se publicó en el Boletín Oficial de la Comunidad el concurso de proyectos que regirá el proceso para que las empresas tecnológicas presenten sus ofertas, según confirmó el consejero Jorge Rodrigo.

"El pliego establece un riguroso procedimiento de selección en dos fases para garantizar la máxima calidad e innovación", detalló.

En una primera fase se escogerá a un máximo de seis finalistas en función de su solvencia y experiencia en operaciones similares en otros países. Posteriormente, las compañías presentarán sus propuestas de forma anónima, que serán evaluadas por un jurado de expertos independientes encargado de elegir hasta tres iniciativas ganadoras.