Un bombero de la Comunidad de Madrid y Jesús Casas, presidente de Tragsa.

Un bombero de la Comunidad de Madrid y Jesús Casas, presidente de Tragsa.

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Tragsa responde y aviva el fuego de los sueldos de 1.300€ de los bomberos de Madrid: "Somos un instrumento del Estado"

Jesús Casas, presidente de la Empresa de Transformación Agraria, no se corta y pasa al ataque tras las acusaciones recibidas por parte de estos profesionales.

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España vive, desde hace semanas, una situación dantesca por culpa de los incendios. Algunas regiones como Galicia, Castilla y León o Extremadura han sido las más afectadas. Pero también zonas como la Comunidad de Madrid, la cual ha vivido paralelamente una gran polémica con sus bomberos.

Los cuerpos de seguridad encargados de batallar con este tipo de circunstancias denuncian que no tienen unas condiciones laborales dignas y que tienen un salario precario a pesar de que se juegan la vida en cada intervención. De hecho, ya se ha hecho nacionalmente conocida la cifra de 1.300 euros.

Tanto es así que lo que empezó siendo un conflicto social, ha dado el salto al escenario político, con varios líderes tirándose los trastos a la cabeza. El último agente relevante en este asunto en opinar sobre el tema ha sido Jesús Casas, presidente de Tragsa.

El máximo líder de la Empresa de Transformación Agraria ha participado de este debate en el programa Al Rojo Vivo de laSexta donde ha dado su parecer en relación a una polémica que ha generado un gran conflicto en la Comunidad de Madrid.

Y es que la intervención de estos equipos ha chocado en ocasiones con estancias de huelga o de servicios reducidos de estos profesionales. Sin embargo, Tragsa ha salido al paso de la polémica para aclarar ciertos aspectos y para lanzar también sus propios ataques.

Las quejas de Tragsa por la situación de los bomberos

Jesús Casas, presidente de Tragsa, ha tomado la palabra y ha ofrecido su punto de vista sobre el polémico asunto del sueldo de los bomberos de Madrid, el cual ellos mismos han fijado en 1.300 euros. Un asunto que ha generado multitud de críticas en defensa del trabajo de estos profesionales.

"No sé si ganan 1.300 euros", decía Casas. Y aclaraba que "lo que se ha difundido es una nómina de un peón fuera del proceso de extinción". Por lo tanto, realizaba así una diferenciación y es que el fallo no se encuentra en el sueldo, sino en la consideración que se da a estos profesionales.

Por ello, Casas ha matizado que los bomberos de Madrid "no son bomberos forestales, sino brigadistas". Para empezar a solucionar este problema, lo primero que hay que hacer es modificar este aspecto para que sean reconocidos por su labor desde el punto de vista jurídico.

El presidente de la Empresa de Transformación Agraria también ha querido matizar que los sueldos de estos profesionales varían mucho dependiendo de la región en la que nos encontremos: "Los colectivos que trabajan en extinción en España tienen una retribución muy variable".

"Depende de cada comunidad autónoma y oscila entre los 32.000 euros brutos anuales en algunas regiones y la mitad en otras". Una diferencia demasiado grande y que genera un agravio comparativo entre unos profesionales y otros.

Sin embargo, lo más importante de su intervención ha sido cuando ha ofrecido su opinión sobre los salarios que reciben estos trabajadores tan necesarios estos días en toda España y no solo en Madrid. Ahí, Casas ha pasado al ataque frontal.

"Como presidente de Tragsa debo remitirme a lo que establecen las administraciones porque somos un instrumento del Estado. Como profesional, me gustaría que el colectivo forestal ganase más".

Por último, el dirigente ha intentado capear otro temporal, el del plantón a los bomberos en la reunión convocada en la Consejería de Medio Ambiente: "Cuando los órganos sindicales y de la empresa convocan reuniones, asistimos".

"Lo que no podemos hacer es actuar al albur de una convocatoria hecha por la prensa en la que se llamaba a altísimos cargos del Gobierno que no tenían ningún sentido que estuvieran allí".