Indigentes durmiendo en la T4 del Aeropuerto de Barajas.

Indigentes durmiendo en la T4 del Aeropuerto de Barajas. E. E.

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Aena cierra las puertas del aeropuerto de Barajas a los sintecho tras activarse el recurso social de Almeida

En un comunicado, la empresa pública olvida que se había comprometido a elaborar un informe sobre quiénes pernoctan allí y deja toda la responsabilidad en el Ayuntamiento de Madrid.

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Hace 17 días el Ayuntamiento de Madrid anunciaba que iba a poner en marcha, a partir de la segunda quincena de julio, un dispositivo de emergencia social para atender de forma temporal a las personas sin hogar que viven o pernoctan en el aeropuerto Adolfo Suárez Madrid-Barajas.

La medida la tomaba el equipo de Almeida en solitario pese a que durante las reuniones con Aena, ambas partes se habían comprometido a buscar soluciones al problema. El espacio, ubicado en el centro Pinar de San José, tiene capacidad para 150 personas.

Ahora, unas semanas después, Aena recoge la iniciativa del consistorio de José Luis Martínez Almeida y se 'lava las manos' con el problema. ¿Por qué? Porque ha mandado un comunicado asegurando que, una vez esté listo el centro, los sintecho ya no podrán estar en sus instalaciones.

Con esta notificación, Aena no sólo unifica el tipo de personas que duermen en el aeropuerto (muchos de ellos migrantes sin papeles que aprovechan Barajas como puerta de entrada ilegal al país), sino que también se desentiende de otras medidas adoptadas como hacer un registro de quiénes duermen allí.

Según el citado comunicado, Aena deja claro que, una vez habilitado el nuevo dispositivo de emergencia del Ayuntamiento de Madrid, no permitirá que las personas sin hogar sigan pernoctando en las instalaciones del Aeropuerto Adolfo Suárez-Madrid Barajas.

Para ello, el gestor aeroportuario informará en los próximos días a quienes permanecen allí de que no podrán seguir haciéndolo.

Aena asegura en su carta que está colaborando con el Ayuntamiento, facilitando la intervención de los trabajadores sociales que acuden a diario al aeropuerto para ofrecer alternativas a este colectivo vulnerable.

Sin embargo, en su comunicado subraya que no es un poder público y que no tiene competencias en atención social, recalcando que los aeropuertos “no son infraestructuras preparadas para habitar, sino de paso”, a diferencia del nuevo recurso municipal.

La empresa pública evita así asumir compromisos como el prometido listado de personas sin hogar que duermen habitualmente en Barajas y que nunca llegó a elaborarse. Una vez que el Ayuntamiento ha habilitado una alternativa, Aena se limita a cerrar sus puertas y traslada por completo la responsabilidad a los servicios sociales del Consistorio.

En cualquier caso, Aena ha celebrado “sinceramente” la coordinación con el Gobierno municipal y ha agradecido su “liderazgo en materia de Servicios Sociales y su voluntad de cooperación en estas últimas semanas”. Pero su papel se limita a acompañar al Ayuntamiento en el traslado, sin asumir obligaciones adicionales ni intervenir en la ejecución del plan social.