El barrio 'independentista' de Alcorcón que recoge firmas para irse a Villaviciosa: "Nos tienen abandonados"

José recuerda que de pequeño siempre pasaba por las urbanizaciones del barrio de Campodón, en Alcorcón. Una tranquila zona de casitas adosadas en pie desde hace unos 35 años en las que soñaba con vivir, acostumbrado al piso en el centro del municipio que tenían sus padres.

Una década y media después, hace 15 años, pudo adquirir una de estas viviendas y mudarse con su mujer e hijos a dicha ubicación. Ahora, piensa que hubiera preferido el apartamento de su infancia.

Y no por nostalgia, sino por la desilusión y descontento que le ha llevado a él, junto con el resto de vecinos del barrio, a pedir su 'independencia' de Alcorcón. Quieren anexionarse a Villaviciosa de Odón, la localidad colindante.

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"Nos tienen abandonados", exclama en conversación con este periódico mientras recorre los límites de Campodón, que aunque pertenezca al municipio alcorconero, se sitúa mucho más próximo de Villaviciosa. Tan cerca, que solo los separa una calle.

Ese es uno de los argumentos principales a la hora de presentar el escrito por el cual piden su separación a la Comunidad de Madrid y los dos Ayuntamientos. Se basan, para ello, en el Artículo 17 de la Ley 2/2003 de Administración Local de la Comunidad de Madrid, que permite la modificación de los límites municipales.

Después de años de quejas por el mal estado de las aceras, el mobiliario urbano inexistente, las zonas verdes sin mantenimiento o los problemas con insectos y ratas por la escasa periodicidad de la recogida de basuras, entre otras reivindicaciones, han decidido tomar esta decisión.

"No nos hemos querido manifestar porque nosotros lo tenemos clarísimo: queremos pertenecer a Villaviciosa y punto. Ese es nuestro objetivo", señala Eduardo, de 63 años, que lleva viviendo en la urbanización desde hace 20 años. Es otro de los vecinos activos en esta iniciativa, agrupados bajo la Asociación Vecinos Mejora Urbanización Campodón.

Los panfletos realizados por los vecinos de Campodón para recoger firmas. E.E.

José, Edu, Jorge, Juani, Rosario, Olga... Esos son algunos de los nombres que forman parte de las 50 personas -en representación de sus familias- que se han unido para ir puerta por puerta recogiendo firmas y repartiendo octavillas con este fin. "De unas mil personas censadas mayores de edad en el barrio, según nuestros cálculos -ya que aseguran que desde el Ayuntamiento de Alcorcón no les han querido facilitar esos datos-, tenemos un tercio de las firmas".

Dicen enfrentarse a algunos problemas a la hora de conseguir las firmas restantes: algunos de los vecinos "ya están empadronados en Villaviciosa en casa de familiares" y otros tienen "intereses políticos".

Las quejas: impuestos, abandono...

"No podemos ir andando a Alcorcón", aseguran desde la asociación. Y es que Campodón se encuentra dividido del resto del municipio por la M-50 que los corta. "¿Cómo vamos a ir? ¿Por la carretera? No hay carril bici ni paso de ningún tipo. Solo se puede ir en autobús o en coche".

Y el tema del transporte público también es algo que reivindican, ya que están catalogados en una zona tarifaria (divididas en seis dependiendo del radio de cercanía al centro de la región y de precio más alto a medida que se alejan de él) distinta a la del municipio alcorconero.

"Nosotros tenemos que pagar el B2. En cambio, los que viven en Alcorcón pagan el B1. Si esto lo consideran Alcorcón, ¿por qué tenemos que pagar el B2?", se preguntan.

La cercanía con los servicios es uno de los argumentos que han especificado en los documentos que han elaborado para explicar su postura. De esta manera, cogiendo como punto de referencia la Avenida de la Caza número 1, han analizado que todos los servicios de Alcorcón se encuentran a más distancia que los de Villaviciosa.

Campodón señalado en el mapa. E.E.

Así, el colegio público más cercano de Alcorcón está a 7 kilómetros y el de Villaviciosa a 2,6 kilómetros; los institutos públicos a 7,3 kilómetros frente a 4,9; la Policía Municipal a 7,2 kilómetros frente a 4,6; los centros de salud a 6,6 y 5 kilómetros; los ayuntamientos a 6,2 y 3 kilómetros, las bibliotecas a 6 frente a 4 kilómetros... Incluso, la panadería está más cercana en Villaviciosa, con solo 3 kilómetros de distancia frente a los 7 de Alcorcón.

Otra queja son los impuestos. En los panfletos creados por los vecinos explican los beneficios en este aspecto que tendrían de pertenecer a Villaviciosa: un IBI (Impuesto de Bienes Inmuebles) un 25% más bajo, una tasa de basuras reducida al 50% y sin tasa de vado.

Tabla de distancias elaborada por los vecinos y anexa al escrito. Asociación Vecinos Mejora Urbanización Campodón

Estiman, con estos datos, que cada hogar podría ahorrar unos 700 euros anuales. También incrementaría en un 20% el valor de la propiedad, "debido a sus servicios públicos más eficientes y sus impuestos proporcionados".

De hecho, el pasado mes de octubre la alcaldesa de Alcorcón, Candelaria Testa, decidió aprobar la subida del IBI un 5% para todos los vecinos.

Algunas de las calles de la urbanización. I.G.

Por último, denuncian el "abandono" en cuanto a la recogida de basuras o el mantenimiento de las infraestructuras. "Consideramos algo injusto estar pagando y no recibir los servicios mínimos que son imprescindibles".

"Vienen a llevarse la basura cuando llamamos porque nos hemos hartado. No hay mantenimiento de aceras ni limpieza de las calles", comentan. "Tuvimos que reparar la calzada y los pasos de cebra nosotros mismos, porque ni siquiera de esto se encargan", exclama otro vecino (el cual prefiere no desvelar su nombre) a cuya hija le suponía un "obstáculo" el problema de las aceras por ir en silla de ruedas. Dice llevar 25 años "abandonado" en los que "todo ha seguido igual".

Ponen otro ejemplo con lo ocurrido en la borrasca Filomena en 2021: "Estuvimos 48 horas sin poder movernos de aquí. En mi trabajo no se lo creían", exclama Eduardo. Cuentan los vecinos que antes existía una entidad de conservación -a la que pagaban una cuota cada dos meses, de precio variable según el tamaño de cada vivienda-, encargada de gestionar los servicios de limpieza, y ahora ya disuelta.

Desde el Ayuntamiento la señalan para explicar el "deficitario mantenimiento realizado durante los últimos años llevado a cabo por la entidad de conservación antes de que se disolviera". "Somos conscientes de las dificultades y problemas existentes, algunos de ellos derivados de esta gestión".

La ubicación donde se iba a instalar el centro cultural, ahora reconvertido en una Ecozona donde depositar desperdicios orgánicos. I.G.

Tampoco hay prácticamente equipamientos públicos en todo el barrio, a excepción de una zona verde con bancos, unas canchas de baloncesto (que, asegura Jose, "fueron los propios vecinos los que las tuvieron que arreglar con dinero de su bolsillo") y un pequeño parque infantil. Otro problema del que llevan avisando desde hace décadas y el cual se iba a solventar hace poco más de 15 años.

El por aquel entonces alcalde, Enrique Cascallana, anunció que se construiría un centro cultural al que se destinarían cuatro millones de euros.

Albergaría una piscina, biblioteca, sala de lectura, salón de actos, gimnasio, sauna, zona de exposiciones, cafetería y una oficina descentralizada para realizar gestiones municipales en los 2.514 metros cuadrado de superficie que ocuparía, como publicaron varios medios locales como Madridiario en ese momento.

El centro cívico nunca se llegó a construir, aunque en el callejero publicado en la página web del Ayuntamiento de Alcorcón figura en el mapa.

"Es apolítico"

Aunque tanto Cascallana como la alcaldesa actual pertenecen al grupo político socialista (PSOE), los vecinos aseguran que este movimiento es "apolítico". "Durante estos años también han estado otros grupos políticos (como el PP desde 2015 hasta 2019) en el poder y todos nos han tratado fatal".

"Tendremos cada uno nuestras ideas políticas, pero en lo que pensamos todos es en nuestro barrio", aclara Eduardo.

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Aun así, el grupo político Vox de Alcorcón ya se ha posicionado al respecto en redes sociales, apoyando el descontento de estos habitantes.

"Intentamos convencerles de que no se vayan, porque en el momento en que consigamos echar a los socialistas, vamos a bajar todos los impuestos y los vamos a equiparar. Pero no nos gustaría que un barrio se vaya de Alcorcón por culpa de la mala gestión de este Gobierno", apunta Pedro Moreno, portavoz del partido en el municipio, en conversación con este periódico.

"Nosotros solo pretendemos tener calidad de vida. Nuestros hijos se han criado en Villaviciosa. Sus amigos son de Villaviciosa. Vamos todos los años a celebrar las fiestas de Villaviciosa. Nos sentimos más de allí", cuenta Jose.

Por su parte, el Ayuntamiento de Alcorcón ha declarado a este periódico "reafirmar" su "compromiso con mejorar este barrio".

"Este se demuestra con hechos efectivos como la creación de zonas verdes, pistas deportivas y zonas infantiles, así como la mejoras efectuadas en el barrio. Hay que recordar que el Ayuntamiento de Alcorcón impulsa actualmente el desarrollo de Retamar de la Huerta, cercano a esta zona, que permitirá mejorar, aún más, la integración de este barrio con el resto de la ciudad", argumentan fuentes municipales.

Por otro lado, desde la alcaldía de Villaviciosa de Odón consideran un "orgullo" que "estos vecinos valoren positivamente la política fiscal del municipio y quieran irse allí a vivir". El regidor perteneciente al Partido Popular, Juan Pedro Izquierdo, manifiesta, igualmente, su "respeto a este tipo de decisiones que, en cualquier caso, se adoptan a título particular", como ha trasladado a este periódico.