Íñigo Peña, CEO de Tetuan Valley.

Íñigo Peña, CEO de Tetuan Valley. Cedida

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La 'aceleradora' que nació en un sótano de Tetuán y el Financial Times coloca en su 'top 50': "Aquí nadie canibaliza tu idea"

La aceleradora de empresas nació en 2009, está especializada en el sector tecnológico y ya ha formado a "más de 900 emprendedores". 

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Tetuan Valley, una de las mejores aceleradoras europeas de empresas según Financial Times, creció en sus origenes en un "sótano" del distrito madrileño con el mismo nombre. Comenzó en 2009 de la mano de Álex Barrera, Luis Rivera y Bernardo de Tomás. Más tarde se unió José Cobian. La incubadora explica que surgió en un momento en el que los "emprendedores estaban solos". Cuando la palabra 'startup' "apenas se escuchaba en Europa". Hoy, además de situarse en el 'top 50' del prestigioso periódico británico, la asociación presume de haber formado a más de 900 emprendedores en los últimos 15 años e impulsado a 400 'startups'. 

Hace años que la incubadora dejó Tetuán. Surgió como un proyecto dentro de una iniciativa de Okuri Ventures, asesoría de tecnología y de inversión. Fue Luis Rivera quien reunió al resto de fundadores. En el distrito pasaron por diferentes localizaciones, como la calle Cuevas y Pinos Baja. Después dieron el salto al campus de Google for Startups, en el distrito de Arganzuela, donde continúan.

El objetivo de Tetuan Valley es acompañar y ayudar a crecer a las 'startups' gracias a diferentes programas de formación. En su caso, está especializada, sobre todo, en el sector tecnológico. Entre otras cosas, enseña a los empresarios a presentar el proyecto empresarial, validar el modelo de negocio o a buscar financiación. "Damos un apoyo muy completo en la fase inicial y luego nos diferenciamos por tener una comunidad muy activa. Todos los emprendedores que entran en los programas van a estar rodeados de otros emprendedores que llevan más años aprendiendo. Es sano poder contar de primera mano dónde nos ha ido bien y qué cosas nos han funcionado", detalla Iñigo Peña, CEO de Tetuan Valley.

Peña nació en 1995 y no forma parte del equipo fundador, aunque ya ejerce como presidente de la aceleradora. Cuenta este madrileño criado en el País Vasco que estudió Economía y Relaciones Internacionales en la Universidad de Navarra, donde, a su juicio, no recibía nociones sobre cómo emprender un negocio, algo que le "llamaba mucho la atención" por casos como el de su padre o su abuela. En vez de lanzarse a una consultora, se propuso crear una plataforma para organizar conciertos.

"Como emprendedor, empecé a hablar con todo el mundo y me vine a Madrid, presenté mi idea [en Tetuan Valley] y no le vieron encaje en el programa 'Startup School', pero sí que les gustaba mucho mi perfil", recuerda. Fue así como comenzó su camino en la incubadora, que lidera desde 2020.

¿Qué es lo que ofrece exactamente Tetuan Valley? Sus programas de emprendimiento abordan diferentes fases. El mencionado 'Startup School' está dirigido a quienes están empezando con una idea o dando sus primeros pasos. En Tetuan Valley recibirá tres meses de formación básica en emprendimiento, mentorías online y contacto con el ecosistema emprendedor. Para el que quiera ir más allá está el programa 'Scale Up', pensada para 'startups' de menos de cinco años, con base tecnológica o sociedades limitadas españolas. La formación incluye mentorizaciones personalizadas por "expertos emprendedores" y contenidos sobre consultoría legal, fiscal y marketing digital.

Por otro lado, el 'W4C Startup School' está dirigido a mujeres con proyectos en el sector de la ciberseguridad, mientras que el programa 'Aceleración Express' ayuda a poner en marcha políticas de ciberseguridad interna.

Los 'cursos' no cuestan dinero: "Desde el principio, teníamos la filosofía de que no queríamos monetizar con los emprendedores y es algo que se ha mantenido hasta el día de hoy. No se cobra ninguna membresía por participar en los programas. Nosotros luego ya buscamos otras formas de monetización: prestamos servicios a instituciones, empresas, universidades... Eso nos sirve para tener un proyecto sostenible". Todo ello -agrega- en un "espacio seguro", donde el emprendedor encuentra "empatía" porque la comunidad "ha pasado por los mismos pasos". Un espacio donde "tampoco te van a robar la idea o a canibalizar". 

Tetuan Valley saca pecho de una serie de profesionales que en su día pasaron por la aceleradora y que mentorizan a los que se van sumando a la comunidad. Entre ellos, destacan nombres como Justo Hidalgo, director de IA en Adigital; Mar Robles, cofundadora de Greemko; María Luque, CEO de UELZ; Carlos Sánchez, jefe de producto del Real Madrid; Maveric Real, CEO de Getro o Daniela Kominsky, country manager de Cymulate.

Cuando se fraguó Tetuan Valley en 2009 "había gente con grandes ideas" pero "ninguna institución que los uniera y los guiara". Ahora, la situación ha cambiado. "Un montón de instituciones y de corporaciones han empezado a poner sus recursos y experiencia a disposición de los emprendedores. A día de hoy, hay un montón de aceleradoras, tanto públicas como privadas. Es beneficioso porque cada una te puede aportar ciertas cosas", sostiene Peña.