Los 50 euros de aumento del salario mínimo interprofesional (SMI) parecen haber abierto una brecha en el Gobierno, que se escenificó en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros del martes. 

La Ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, y su partido Sumar, miembros de la coalición gubernamental, quieren que el SMI no tribute en el IRPF.

Por contra, el Ministerio de Hacienda, cuya titular es del PSOE, estima que debe incluirlo en su declaración de IRPF y pagar lo que corresponda.

Según la decisión de Hacienda, un perceptor sin cargas familiares que reciba sólo el SMI tendría que pagar IRPF por los 700 euros anuales que superan el mínimo exento 168 euros. Su renta después de pagar el IRPF sería: 16.576 - 168 =16.408 euros.

Pero si, por ejemplo, tiene otros ingresos, como un alquiler de un piso de su propiedad de 300 euros mensuales de renta (3.600 euros al año) -heredado por ser la casa de sus padres fallecidos- tendría que pagar IRPF por ambas rentas.

En ese caso, sus ingresos totales serían 3.600 (alquiler) + 16.576 (SMI) = 20.176. Por ser persona soltera sin hijos a su cargo, debería pagar, más o menos, el 19% por los primeros 12.450 euros (primer tramo de renta) y el 24% por la renta restante.

Es decir: 2.365,50 + 1.776,24 = 4.141,74 euros.  Sus ingresos reales después de pagar el IRPF serían 20.176 - 4.141,74 =16.034,26 al año. Ingresaría menos después de pagar el IRPF que si no percibiese el alquiler. Absurdo.

Por contra, si el SMI estuviera exento, ese mismo perceptor no pagaría nada porque el alquiler entraría dentro de los primeros 15.876 euros que son el mínimo exento del IRPF.

Empobrecimiento poblacional

En ese caso sus ingresos totales serían 20.176 euros. No es que se haga rico, pero el Estado pierde cerca de 4.000 euros. Por eso Hacienda no quiere dar su brazo a torcer.

Eso es lo que pasa con el “sistema fiscal progresista” del gobierno Sánchez: la clase media y trabajadora se empobrece para enriquecer al Estado.

Pagamos para que Sánchez pueda decir que su déficit público es menor. A cambio crece nuestro “déficit económico particular”.

Eso se debe, entre otras cosas, a no haber deflactado los tipos del IRPF según tramos.

Pagamos para que Sánchez pueda decir que su déficit público es menor. A cambio crece nuestro “déficit económico particular”

La inflación se está comiendo la capacidad adquisitiva de los españoles de clase media y trabajadora por dos vías:

La primera son subidas salariales que no compensan el aumento de los precios. Sobre todo, ahora que el IVA a vuelto a sus niveles anteriores en muchos productos básicos, por ejemplo, en la electricidad.

También deteriora esa capacidad adquisitiva por vía fiscal. Como los tipos del IRPF por tramos no se han deflactado (bajado para entendernos), las subidas salariales entran en tramos superiores de impuesto.

Un trabajador que cobraba 20.200 euros año, en su segundo tramo (de 12.450 hasta los 20.200) paga el 24%. Si le suben un 3% (que no aumenta su capacidad adquisitiva respecto a la inflación) su salario será 20.806. Por los 606 suplementarios deberá pagar el 30% de IRPF, porque ha subido de tramo. Es decir, 181,8 euros.

La subida después de pagar al IRPF se le ha quedado en 424,4 no sólo no recupera capacidad adquisitiva: pierde. Si hacienda hubiese deflactado los tramos, sólo pagaría el 24% o el 19% o menos por esos 606 euros. 

Lo dicho: el leviatán Estado nos devora. El “Gobierno progresista” pretende sustituir al ciudadano en sus decisiones de gasto. Eso, además, exige una maquinaria burocrática que hace inútil una buena parte del dinero recaudado.

Entonces, ¿tiene razón Yolanda Díaz? Tampoco.

Lo que la ministra de Trabajo debería defender es que se deflactasen todos los tramos de renta del IRPF para liberar a la clase media y trabajadora de la losa fiscal.

La ministra de Trabajo debería defender es que se deflactasen todos los tramos de renta del IRPF

Pero Díaz no lo hace porque su interés no está en defender a los trabajadores. Lo que busca es la polémica demagógica para poder seguir en los medios y tener notoriedad. 

La polémica sobre el IRPF en el SMI es falsa. Un juego político para empujar a Sumar. Un entretenimiento mediático para ocultar temas incómodos al Gobierno.

Reconozco que soy culpable. Escribo de lo que quiere el Gobierno. Un Gobierno que cree que en unas elecciones generales necesita aupar a Sumar para seguir en la Moncloa.

** J. R. Pin Arboledas es profesor del IESE.