Se trataba de un gran contrato dotado de 2.500 millones de euros para crear una gran central de compras de material de lucha contra la Covid-19. Un espacio para que todas las administraciones pudieran tener proveedores a su disposición que les ofreciera material de forma más o menos rápida. 

Como ha contado EL ESPAÑOL, Ferrovial y Soluciones Digitales decidieron crear una UTE controlada por la compañía de Rafael del Pino para optar a la licitación. Una asociación que buscaba aprovecharse de la solvencia que tenía la segunda gracias a los contratos de abastecimiento firmados con Puertos del Estado, ADIF, Baleares, Canarias, Interior... 

[Koldo usaba el despacho de Ábalos para recibir a contratistas cuando no estaba el ministro]

Certificados

De hecho, y según la investigación de la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil en el marco de la 'operación Delorme', las dos empresas acreditaron su 'expertisse' gracias a certificados emitidos por Baleares, ADIF, Interior y Puertos del Estado. Toda ella por los contratos por los que, supuestamente, la 'trama Koldo' habría cobrado mordidas. 

Otro de los documentos aportados por la Unión Temporal, según ha comprobado EL ESPAÑOL, fue un certificado emitido por Globalia en el que acredita que "Soluciones Digitales" le suministró 1,3 millones de mascarillas de forma completamente satisfactoria. 

Se trata de cuatro archivos esenciales para que Ferrovial y Soluciones obtuvieran el visto bueno de Sanidad para pujar por dos lotes de material sanitario valorados en 97 millones de euros. 

La propia Guardia Civil afirma que el contrato fue legal, pero también es cierto que se valieron de los contratos en los que intervino la 'trama Koldo' para lograr entrar a una central de compras de la que meses más tarde se retirarían. 

Ni un contrato

Como este diario ha contado ya, la UTE de Ferrovial y Soluciones no obtuvo ni un solo pedido pese a que el precio del material ofertado estaba en la media. De hecho, en la documentación consultada por este diario, el grupo reconoce haber tenido sólo una muestra de interés de Madrid, Cataluña, Castilla-La Mancha y el Ministerio de Defensa. 

Al no haber logrado ningún tipo de contrato, a mediados del año 2021 las dos compañías decidieron disolver su UTE y proseguir caminos por separado. 

Ferrovial firmó este contrato a través de Ferrovial Servicios, cuyo máximo responsable, Salvador Urquía, fue designado como administrador de la UTE y representante ante las autoridades del Ministerio de Sanidad.