Según ha podido saber EL ESPAÑOL-Invertia, se ha barajado como precio de referencia máxima de ese gas en 20 euros/MWh, aunque hay una horquilla de hasta 50 euros. Además, se establecerá una doble casación para que la venta de electricidad a Francia no se vea afectada por la reducción de precios.

"Es una decisión que tiene sentido en un contexto de economía de guerra. Con los precios del gas desmadrados, no queda otra que pagar el gas aparte", explica a este diario el experto en sector eléctrico Joaquín Giráldez, socio cofundador de la consultora Ingebau.

"Habrá dos subastas para casar el precio de la electricidad. La primera, que es la 'normal', para que se pueda hacer intercambio con Francia; y una segunda, donde los ciclos combinados tienen subvencionada una parte del coste de su materia prima, el gas". 

"Si se van a hacer dos subastas, OMIE (operador del mercado) tendrá que adaptar sus sistemas informáticos a los cambios, y eso podría retrasar la aplicación de la medida", puntualiza Francisco Valverde, experto en el sector eléctrico y consultor en desarrollo del área de renovables de eficiencia energética del grupo Menta Energía.

Si finalmente la subvención sitúa el precio final en unos 20 euros/MWh, "que es como ya señalaba el RD 17/2021 aprobado en septiembre pasado, el precio del pool sería de unos 90 euros/MWh, y si es de 50 euros/MWh, entonces subiría a 140-150 euros/MWh, porque al coste del gas también hay que añadirle, entre otros elementos, el de CO2". 

Pagar la electricidad entre 90 y 150 euros/MWh ya se situaría por debajo del precio de los últimos seis meses, desde septiembre de 2021.

Quién paga la subvención

Queda pendiente saber cómo se va a pagar la diferencia entre el coste del gas en el mercado MIBGAS (actualmente está en 102 euros/MWh) y el tope con el que puede pujar en el pool.

MIBGAS MIBGAS

"Se puede cargar ese coste o bien a las comercializadoras de electricidad, o al recibo de la luz a todos los consumidores, o a los Presupuestos Generales del Estado", añade el experto en mercados eléctricos Javier Colón, socio fundador de la consultora Neuro Energía.

"Tendría sentido que se pagara en función de la compra en OMIE, es decir, las comercializadoras, en función de la energía liquidada", apunta por su parte Joaquín Giráldez. "En cualquier caso, es mejor que se pague esa diferencia al 10% de la generación eléctrica, es decir, a los ciclos, que es su participación en el mix, y no se incluya también al 90% del resto de tecnologías".

Otra opción que también está sobre la mesa es que se concrete y defina aún más el sistema de recaudación de 'beneficios caídos del cielo', es decir, la diferencia entre el precio de producción y los ingresos extras de las tecnologías que no tienen que pagar el gas para generar electricidad.

El visto bueno de Bruselas

El último escollo para poner en práctica la nueva modalidad es el 'ok' de Bruselas. La Comisión Europea ha dicho que es consciente de la urgencia en España por tomar medidas para afrontar el alza de los precios de la luz, por lo que analizará "sin dilación" las propuestas que presente el Gobierno.

La vicepresidenta tercera y ministra para la Transición Ecológica, Teresa Ribera, aplaza a "tres o cuatro semanas" la entrada en vigor la intervención del mercado eléctrico en España. 

"La diferencia competitiva con los países europeos va a ser tan grande que podría ser que Bruselas se lo echara atrás", concluye Giráldez. "Además, el problema del gas no es ahora, el verdadero problema es el próximo invierno, que no será posible almacenar el necesario y, más aún, tras las sanciones a Rusia". 

Los países de la Unión Europea contrarios a limitar el precio de la energía, como Alemania o Países Bajos, se resistían a aceptar las medidas que reclamaba el grupo liderado por España para permitir intervenciones temporales en los mercados mayoristas de la electricidad, y aunque dieron su brazo a torcer, podrían volver a las andadas.