La presidenta de la Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal (AIReF), Cristina Herrero.

La presidenta de la Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal (AIReF), Cristina Herrero. AIReF

Macroeconomía

Los ayuntamientos caerán en déficit en 2021 por primera vez desde la anterior crisis

La AIReF reclama a los gobiernos regionales y locales que preparen medidas para volver a la disciplina fiscal a lo largo de 2022. 

3 diciembre, 2020 15:22
E.O. A.C.

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La situación económica se complica para las comunidades autónomas y los ayuntamientos. La Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal (AIReF) estima que las regiones incurrirán en un déficit del -0,8% en 2021 (dos décimas más de lo previsto por el organismo) y considera que los Ayuntamientos dejarán de estar saneados para incurrir en números rojos por primera vez desde la crisis.

Las estimaciones de AIReF indican que los entes locales tendrán un déficit en 2021 del -0,1% y perderán el punto de equilibrio que habían mantenido hasta el momento.

De hecho, avisa de que Barcelona, Palma, Bilbao, Valladolid, Gijón, l'Hospitalet de Llobregat y las tres Diputaciones Forales ya incurrirán en déficit a lo largo de este ejercicio. 

Impacto negativo

Unos datos que se presentan en el informe sobre las Líneas Fundamentales de los Presupuestos 2021 de las Comunidades Autónomas, en el que también se alerta del "impacto de las liquidaciones negativas del Sistema de Financiación Autonómico (SFA), el menor importe de fondos vinculados al Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia (PRTR) y la ausenciade transferencias extraordinarios del Estado" que se producirá en el ejercicio 2022. 

Concretamente, las regiones se podrían ver obligadas en 2022 a devolver unos 5.000 millones por la liquidación del presente 2020. Cabe recordar que este año el Estado entregó a cuenta unos fondos que van a estar por encima, muy por encima, de la recaudación final que obtengan. 

De hecho, una de las principales preocupaciones del organismo es que los ingresos (que se mantendrán estables) y los gastos (que crecerán un 2%) de 2021 puedan cronificarse sin tener en cuenta que es probable que en el siguiente ejercicio la cantidad de dinero que van a recibir caiga. Una situación que "elevaría el déficit estructural existente con carácter previo a la crisis".