El coche de Juana Rivas a la llegada al juzgado donde este viernes entregó a su hijo menor a su padre.

El coche de Juana Rivas a la llegada al juzgado donde este viernes entregó a su hijo menor a su padre.

Andalucía

Hay 'caso Juana Rivas' para largo: el menor no tiene que volver a España, pero quedan al menos 3 denuncias abiertas sin resolver

El caso mantiene por ahora dos batallas judiciales abiertas con tres denuncias cruzadas entre casi todos los protagonistas de la historia.

Más información: Rivas entrega a su exmarido a su hijo menor en medio del secretismo dictado por el juez para evitar el "circo" mediático

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El caso de Juana Rivas va para diez años sin que se haya encontrado una solución definitiva ni para ella ni para sus hijos ni para su exmarido, el italiano Franceso Arcuri. La última batalla de esta guerra, que se libra desde 2016, tuvo lugar este viernes.

Entonces la madre granadina, condenada por sustracción de menores y de nuevo investigada por esta cuestión, entregó el hijo menor a su ex, quien en septiembre afronta un juicio por una nueva denuncia de malos tratos interpuesta por Rivas.

Pero el caso, lejos de estar más cerca de resolverse, se empantana con denuncias cruzadas entre casi todos los protagonistas de la historia. Los que tienen edad de denunciar, al menos. Juana Rivas ha denunciado a su ex por maltrato; Arcuri denunció a Rivas por no entregarle a sus hijos cuando le tocaba; el hijo mayor de la pareja tiene una denuncia contra el padre por maltrato...

La primera denuncia, la de Juana Rivas contra Francesco Arcuri sigue su curso en Italia. No es la primera y hasta ahora, ha perdido siempre, según el equipo de defensa de su exmarido. En todo caso el juicio está fijado para septiembre.

La segunda denuncia es de Arcuri contra Rivas. En este caso, por sustracción de menores. La granadina ya fue condenada por este mismo delito en 2018 por ese mismo tipo penal a 5 años de cárcel -2,5 años por cada niño que ocultó a su ex-.

A prisión

El Tribunal Supremo estimó su recurso y entendió que huir de Italia y alejar a los dos niños de su padre era un solo delito y rebajó la pena a 2,5 años de prisión. Entró en la cárcel, pero el Gobierno de Pedro Sánchez la amnistió parcialmente y cumplió poco más de un año que, además, se permutó por trabajos comunitarios.

Ahora Rivas está bajo la lupa de la Justicia por el mismo delito. En este caso porque, pasadas las Navidades de 2024, no devolvió al hijo menor de edad que tiene con Arcuri a Italia. Entonces la Justicia española avaló la decisión en tanto se pronunciaba la italiana.

Sin embargo, en febrero de este año el juez de Italia ordenó la vuelta del menor con su padre. Rivas no cumplió, señala la denuncia del padre y ahora la Audiencia Provincial de Granada abre de nuevo la causa contra la mujer.

La tercera denuncia es del hijo mayor de la pareja, que con 19 años ha interpuesto ante la Justicia la petición de que juzguen a su padre por coacciones a su hermano menor. Justamente el niño por el que se ha librado la última batalla.

Porque este caso, tras una década, ha vivido esta pasada semana un momento clave. La madre granadina tenía orden de devolver al hijo menor al padre. El acto de entrega se convirtió en un "circo", según lo definió el presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno.

¿Por qué? Para empezar la amplia comitiva de Juana Rivas estaba rodeada de medios de comunicación. Ella andaba de espaldas para ocultar su rostro, apoyada en una de sus asesoras, quien pidió que no se hablase con los niños pero, minutos más tarde ordenó al menor de edad que declarase ante los periodistas.

El espectáculo provocó que el juez suspendiese la entrega puesto que el niño, que tiene 11 años, estaba visiblemente alterado. Según fuentes cercanas al padre, por el jimerito que había formado su madre; según fuentes cercanas a la madre, porque tenía miedo de volver con el padre.

En todo caso, el juez ordenó repetir la entrega este viernes. Sin medios; sin comitivas; sin declaraciones. A solas, en un juzgado. Así se hizo y el niño viaja ya a Italia con su padre, como habían ordenado ya la Justicia de Italia y de España.

Este (por ahora) último episodio es uno más de los casi 10 años de esta historia. Desde que en 2016 Juana Rivas se marchó de Italia con sus hijos y los ocultó de su exmarido hasta que la Justicia le condenó por esos hechos; del 'todos somos Juana' a necesitar el indulto del Gobierno para evitar la cárcel.

Y, con el cruce de denuncias, no parece que la cuestión acabe en breve. En septiembre se celebra un juicio que la defensa de Arcuri confía en ganar. Hasta ahora, señalan, han vencido siempre y no han sido pocas, dicen, las denuncias que ha interpuesto Rivas.

Pero luego están las denuncias por sustracción, que sigue su curso, así como la de coacciones del hijo mayor de la pareja contra su padre.

Hasta que el hijo menor cumpla al menos 16 años no podrá pedir comparecer ante un juez. Por lo tanto, y salvo reconciliación amistosa, algo muy poco probable, al caso le quedan al menos 5 años puesto que el niño tiene 11 años ahora mismo. Queda 'caso Juana Rivas' para rato.