El pasado año, el regulador de zoológicos de India aprobó la transferencia de 1.000 cocodrilos asaltantes del centro de cría Madras Cocodrile Bank Trust o CrocBank (Chennai, Tamil Nadu) al centro de rescate y rehabilitación Greens Zoological (Jamnagar, Guajarat), propiedad del multimillonario Mukesh Ambani, ubicado a 1.931 km. Hasta la fecha, 300 ejemplares ya habían sido enviados a Guarajat. 

Fuentes del CrockBank explican a la BBC que el traslado de los cocodrilos se debe a un "exceso de población" en el centro, que está dando lugar a peleas. Nikhil Whitaker, curador del CrockBank, dijo al medio británico: "La superpoblación del centro está provocando que cientos de huevos de cocodrilo sean destruidos cada año. La decisión de cambiar de lugar a los cocodrilos se ha tomado para darles un mejor lugar en el que vivir".

A lo largo de los años, CrockBank ha estado trasladando a sus cocodrilos a áreas protegidas y zoológicos en toda la India. Sin embargo, es la primera vez que se desplaza un número tan alto de ejemplares. 

[El misterio del cocodrilo del Nilo de 250 kilos que anda suelto en el Pisuerga: ¿cómo ha llegado ahí?]

El zoológico de tres años de vida de Jamnagar apuntó en su último informe anual que los cocodrilos "recibirán el espacio, la comida y la atención adecuada". 

Según los trabajadores del centro de cría, los cocodrilos viajarán en cajas de madera en un vehículo con la temperatura controlada. "Dado que los cocodrilos cautivos necesitan ser alimentados solo una vez a la semana, serán alimentados antes del viaje", apuntó Whitaker. 

El origen del problema

El centro de cría de Chennai abrió sus puertas en 1976 con el objetivo de ayudar a conservar tres especies nativas de cocodrilos: asaltantes, de agua salada y gaviales. Aunque hoy, es el hogar de 17 especies, tres de las cuales están catalogadas por la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN) como "en peligro crítico" y otras tres como "amenazadas". 

En sus inicios tan solo tenía 40 cocodrilos y el fin era protegerlos para que pudieran multiplicarse y sus poblaciones se liberaran posteriormente en la naturaleza para que repoblasen sus hábitats naturales. Según la página oficial del centro, este se diseñó para ser un "depósito genético vivo de cocodrilos, para su custodia, protección y multiplicación". 

Sin embargo, según informó Whitaker a la BBC, una orden del gobierno federal en 1994 puso fin a la liberación de cocodrilos criados en cautiverio en la naturaleza. Desde entonces, el centro de cría tuvo que conformarse con reubicar algunos ejemplares de vez en cuando en zoológicos y santuarios de vida silvestre. 

De acuerdo con la página oficial del centro, "inicialmente la acción tuvo un gran éxito, pero hoy en día la liberación en la naturaleza se ha detenido debido a la reducción de las áreas silvestres y la falta de un hábitat adecuado". 

Sin método de esterilización

Con la reducción es áreas de vida silvestre y como los zoológicos solo pueden admitir una cantidad limitada de cocodrilos, se han estado quedando sin lugares en los que reubicar a los cocodrilos, explica el curador a la BBC

Por este motivo, los conservacionistas han planteado dudas sobre la reubicación como solución al hacinamiento en el centro de cría. El biólogo de vida silvestre P. Kannan dijo que, dado que los reptiles también se mantendrán en un espacio cerrado en su nuevo hogar, el problema persistirá. 

"Todavía no existe un método de esterilización y los cocodrilos machos y hembras no se pueden mantener en recintos separados mucho tiempo porque esto genera peleas", dijo Kannan. 

S. Jayachandran, secretario honorario de la Asociación de Vida Silvestre y Medioambiente de Nilgiri, comentó que en lugar de reubicar animales, India debería aumentar sus áreas protegidas para la vida silvestre: "Si hubiera suficiente espacio para los cocodrilos en la naturaleza, no tendrían que ser reubicados en un zoológico".