La casa renovada por un equipo de la Universidad de Hong Kong en Nanlong (China).

La casa renovada por un equipo de la Universidad de Hong Kong en Nanlong (China). John Lin y Lidia Ratoi

Historias

Desmantelan una casa de madera pieza por pieza y la amplían con impresión 3D: ¿la arquitectura del futuro?

Para revitalizar el pueblo de Nanlong, al suroeste de China, un equipo de la Universidad de Hong Kong consiguió unir tradición y tecnología punta.

10 septiembre, 2023 14:33

Las zonas rurales no son precisamente lugares donde podamos encontrar la tecnología más puntera. Sin embargo, en la aldea de Nanlong (provincia de Guizhou), en el suroeste de China, los profesores de la Universidad de Hong Kong, John Lin y Lidia Ratoi han renovado una casa tradicional de madera con una estructura impresa en 3D con el objetivo de revitalizar esta zona rural. 

Al combinar la construcción impresa en 3D y las estructuras de madera, este innovador y único proyecto ha integrado perfectamente la tradicional artesanía de madera con la última tecnología de impresión robótica in situ. Es lo que los propios creadores, Lin y Ratoi, han llamado las “casas tradicionales del futuro”. 

Este proyecto, que fue promovido por el gobierno de la aldea, comenzó con el escaneo de una casa local típica del pueblo de Nanlong: construida con madera local y sin ningún tipo de sujeción de acero. 

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Entre noviembre de 2020 y enero de 2023, el equipo de la Universidad de Hong Kong elaboró un plan para desmantelar pieza por pieza toda la casa y reconstruirla en el mismo sitio, pero añadiendo nuevos espacios: un patio de entrada, balcón, cocina y baños. Todos impresos en 3D para integrarlo perfectamente con la estructura ya existente.

“Escaneamos toda la casa: todas las columnas torcidas, todas las imperfecciones que provienen de trabajar con material natural que se altera con el tiempo se incorporan al lenguaje de impresión 3D”, explicó Lin a South China Morning Post.

Así, el equipo de la Universidad de Hong Kong creó un modelo para que los carpinteros locales pudieran seguirlo. Y el profesor Xu Weiguo, jefe del departamento de arquitectura de la Universidad de Tsinghua (en Beijing), proporcionó los brazos robóticos que permiten realizar la impresión 3D. 

Para la comunidad de vecinos del pueblo, principalmente de las minorías étnicas Miao y Dong, esta renovación supuso un reto y, sobre todo, una oportunidad para trabajar en equipo, algo que unió aún más a la comunidad. “El proyecto cuestiona cómo la tecnología puede actuar como un potenciador social y convertirse en un medio para fortalecer las prácticas de construcción local y cultural”, señalaron los profesores a Deezen

Sostenibilidad en su esencia 

Este proyecto, explican los profesores, no sólo es una nueva forma de expresión arquitectónica, sino que supone un diálogo entre el pasado y el futuro. La lógica inclusiva del proyecto empodera a la comunidad contribuyendo a aumentar sus conocimientos y habilidades. Todo ello mientras conservan su herencia cultural. 

"Considerando el tejido construido existente como una 'nueva naturaleza', que no se puede alterar y, por lo tanto, requiere adaptación, el proceso toca áreas clave de sostenibilidad: social, tecnológica y cultural", explicó Ratoi a Deezen.

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Más allá de la preservación cultural, la creación de nuevos espacios también podría suponer un atractivo para que las nuevas generaciones regresen a zonas rurales. En las últimas décadas, el rápido crecimiento económico de China generó un éxodo masivo del campo a las ciudades a pesar de los esfuerzos infructuosos del gobierno —como el establecimiento del hukou— para evitarlo. 

“Muchas personas jóvenes están regresando, abriendo pequeños hoteles y tiendas, o administrando negocios en línea”, señaló Lin a SCMP. “Los aldeanos que aún se dedican a la agricultura también pueden obtener ingresos adicionales del comercio por internet”.

Por el momento, una familia se ha mudado ya a esta casa y los profesores revisarán los resultados el próximo año. Ahora, esperan poder atraer nuevos inversores interesados en financiar restauraciones similares en otras zonas rurales de China. El gobierno chino, por ejemplo, ya se ha interesado en este proyecto piloto para restaurar edificios antiguos en zonas rurales y destinarlos al turismo.