Imagen de archivo de los trabajadores de una empresa durante una reunión.

Imagen de archivo de los trabajadores de una empresa durante una reunión. iStock

Historias

Las empresas se preparan para el tsunami regulatorio de la UE que obligará a informar sobre sostenibilidad

España ya prepara la incorporación de las últimas directivas de la Unión Europea sobre información no financiera en la legislación nacional. 

11 marzo, 2024 02:47

Hoy en día podemos ver la importancia que tiene la sostenibilidad tanto en la sociedad como en el mundo empresarial, teniendo todos el mismo objetivo de combatir el cambio climático y contribuir hacia la descarbonización. Las empresas tienen la posibilidad de aplicar medidas en sus diferentes actividades que impulsen la sostenibilidad en el ámbito medioambiental, social y de gobierno corporativo.

Actualmente, no todas las empresas tienen la obligación de publicar un informe de sostenibilidad. Tras la publicación de la Directiva 2022/2464, de 14 de diciembre de 2022, referente a la presentación de información sobre sostenibilidad, quedaron obligadas las empresas de interés público, como son las empresas cotizadas, y las grandes compañías. 

Sin embargo, el resto de empresas, aun no estando obligadas, en muchas ocasiones se han visto impulsadas a implantar medidas sostenibles en sus actividades. El origen procede de las empresas obligadas a reportar información sobre sostenibilidad, que implantan políticas y protocolos que no solo deben cumplir las personas que forman parte de la compañía, sino terceros interesados —como los clientes y proveedores—.

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Las pymes se preparan

Por ello, son muchas las empresas que están incorporando paulatinamente la sostenibilidad en sus correspondientes planes estratégicos con la finalidad de ser proactivas y anticiparse a los acontecimientos. Según el estudio Oportunidad en el cambio, realizado por Acquis con 1.200 pymes entrevistadas, el 60% de las pymes españolas tienen previsto aplicar políticas de ESG (Environmental, Social and Governance, por sus siglas en inglés) y el 64% ha adoptado su producto o servicio para mejorar la sostenibilidad de la empresa.

Del mismo modo, con la finalidad de acelerar el proceso de descarbonización y la reducción de los gases de efecto invernadero, múltiples empresas han decidido incorporar al cálculo de la Huella de Carbono el Alcance 3, correspondiente a las emisiones indirectas que tienen lugar en la cadena de valor de la compañía, lo que también compromete a los proveedores y supone la implantación de ciertas medidas sostenibles en sus actividades.

En cuanto a los procesos de financiación, son cada vez más los participantes de un proceso de inversión los que tienen en cuenta los criterios ESG a la hora de realizar una operación, aumentando considerablemente el interés de invertir en empresas sostenibles.

Inversiones de impacto sostenible

Hace unos años posiblemente los inversores solo tendrían en cuenta la rentabilidad de una empresa a la hora de realizar una inversión. Sin embargo, actualmente le dan la misma importancia a la rentabilidad y los beneficios de la inversión que a los criterios ESG que aplica la compañía, en concreto, analizan las medidas sostenibles que se aplican en el ámbito medioambiental, social y de buen gobierno.

Todo ello lleva aparejado el tsunami de regulación de la Unión Europea en materia de reporte sobre sostenibilidad, como es la Directiva 2022/2464, de 14 de diciembre de 2022, sobre información en materia de Sostenibilidad Corporativa (CSRD) y la Directiva sobre Diligencia Debida de las Empresas en materia de sostenibilidad (CSDDD), la cual fue aprobada el 14 de diciembre de 2023 por el Consejo y el Parlamento Europeos con la finalidad de proteger al medioambiente y los derechos humanos, estando a la espera de su publicación.

La reciente regulación tiene un principal objetivo y es el cumplimiento del Pacto Verde Europeo, es decir, reducir el 55% de los gases de efecto invernadero y obtener en el año 2050 la neutralidad climática, lo que de forma directa o indirecta lleva a las empresas a incorporar la sostenibilidad de forma gradual en las compañías.

***Rosa Sanz García es responsable de ESG y Compliance en Grupo Arrate y Socia Young en Women in a Legal World.