Agentes de la Policía Nacional accediendo a una de las viviendas registradas.
Duro golpe a la marihuana en pueblos de Toledo como Illescas o Ugena: miles de plantas, armas, seis detenidos...
La Policía Nacional ha llevado a cabo dos operaciones de gran envergadura y logrado desmantelar el negocio de un clan familiar que contaba con armas.
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La Policía Nacional ha logrado desmantelar una importante red de cultivos indoor de marihuana en la provincia de Toledo. Como resultado de dos operaciones paralelas, realizadas en el marco del Plan Nacional de Actuación contra la criminalidad organizada asociada a la producción y tráfico de esta sustancia estupefaciente, los agentes han intervenido un total de 5.881 plantas y 3.640 esquejes.
La primera de las investigaciones ha permitido detener a seis personas pertenecientes a un mismo clan familiar que contaba con varias armas en su poder y actuaba como una organización criminal que cultivaba la marihuana en inmuebles de distintas localidades de la provincia como Illescas, El Viso de San Juan, Yeles y Lucillos.
Este grupo, según ha informado la Policía Nacional en una nota de prensa, había establecido una red de cultivos perfectamente estructurada, con instalaciones dedicadas a las diferentes fases de crecimiento de la planta: desde salas de germinación hasta espacios de secado y almacenamiento del producto final.
La Policía Nacional detiene a los miembros de un clan dedicado al cultivo de marihuana en Toledo
El punto de partida de la investigación fue el aviso de una empresa suministradora de electricidad, que detectó un número inusual de incidencias en el consumo en varios inmuebles de la provincia. Las pesquisas confirmaron que se trataba de cultivos de marihuana que, además, defraudaban fluido eléctrico a gran escala.
Tras identificar a los responsables y determinar su estructura de trabajo, a principios de febrero se llevaron a cabo cuatro registros simultáneos en distintos municipios, interviniéndose 3.640 esquejes listos para ser trasplantados, 317 plantas en fase de secado, 13.640 euros en efectivo y varias armas de fuego, entre ellas una pistola semiautomática que portaba una de las detenidas en el momento del operativo.
A las afueras de Illescas
En una de las viviendas, situada en una urbanización a las afueras de Illescas, se localizó una sala de germinación instalada en el garaje, desde donde se distribuían esquejes al resto de los inmuebles para su cultivo y posterior recolección.
Durante la intervención, los agentes también encontraron un gran número de gallos de pelea, perros y un caballo poni, cuya situación fue puesta en conocimiento de asociaciones protectoras y veterinarios especializados.
La investigación reveló que la organización criminal tenía un alto grado de especialización, con una estructura bien definida en la que cada integrante desempeñaba funciones específicas en el proceso de cultivo, producción y distribución.
La diversificación de tareas y la coordinación entre los distintos puntos de producción permitían al clan generar cosechas de manera continua, lo que les proporcionaba importantes beneficios económicos y les permitía abastecer a otras organizaciones dedicadas a la distribución dentro y fuera de España.
Segunda operación
En una operación paralela, la Policía Nacional logró desmantelar otros dos cultivos indoor de marihuana en las localidades de Illescas y Ugena gracias a la colaboración ciudadana.
La investigación se inició tras recibir información a través de los canales habilitados por la Policía Nacional para la lucha contra el narcotráfico, lo que permitió corroborar la existencia de instalaciones sospechosas con un alto consumo de electricidad.
El primer registro tuvo lugar a principios de febrero en Illescas, donde los agentes hallaron un sistema de cultivo altamente sofisticado que se encontraba en fase de reinicio. En este lugar se intervinieron 520 plantas listas para ser trasplantadas.
Tres días después, en Ugena se localizó otra plantación indoor instalada en un garaje, donde se decomisaron 245 plantas en avanzado estado de crecimiento, listas para su cosecha. En total, estas dos operaciones sumaron más de 5.100 plantas de cannabis intervenidas.
Los responsables de estas dos plantaciones no se encontraban en el interior de los inmuebles en el momento de los registros, por lo que la Policía Nacional continúa con las diligencias para su localización y detención.
