Digital Castilla

Digital Castilla

Sociedad GABRIEL GONZÁLEZ, JUANJO ALCALDE Y JOAQUÍN ROMERA

La promoción de Maristas que ha dado tres concejales a Toledo celebra su 25 aniversario a lo grande

12 junio, 2017 10:48

El Colegio Maristas de Toledo ha celebrado por segundo año consecutivo el 25 aniversario de su promoción de COU. Esta vez, han contado con la estrecha colaboración de uno de los integrantes de ese grupo, el exconcejal Juanjo Alcalde, actualmente asesor en el Grupo Municipal del PP de Toledo, quien junto a su compañera de estudios, la farmacéutica Paloma García, se pusieron manos a la obra hace unos meses para reunir a 57 estudiantes de aquella promoción. Se han unido profesores y otros empleados del colegio, hasta juntar a 70 personas que lo pasaron a lo grande este sábado.

 De aquella promoción de Maristas salieron tres exconcejales que coincidieron, curiosamente, en el Ayuntamiento de Toledo durante la legislatura 2007-2011: el socialista Gabriel González, hoy gerente de Impulsa,  y dos compañeros del PP, el propio Juanjo Alcalde y Joaquín Romera, quien presta servicios en el Grupo Popular de la Diputación de Toledo. 

A la cita en Toledo para rememorar aquella maravillosa adolescencia, acudieron antiguos estudiantes que hoy viven en Madrid y otras ciudades españolas, e incluso en Londres. De hecho, se ha llegado a formar un grupo de whatsapp de más de un centenar de integrantes, dado el empeño de esta promoción de incluir también a aquellos antiguos alumnos con los que coincidieron en Primaria o incluso en Párvulos.

Abogados, arquitectos, empresarios, profesionales autónomos, funcionarios… coincidieron en una jornada inolvidable,  que se inició con una misa, oficiada, junto al capellán del centro, por un antiguo alumno de esa promoción, actualmente sacerdote en Talavera, Miguel Garrigós. No faltaron los vídeos y las emotivas imágenes de los años de estudios en los Maristas.

Después, hubo catering en el jardín del centro, para posteriormente disfrutar de unos bailes, con música de los ochenta, en la terraza de Monterrey. Allí estuvieron hasta altas horas de la madrugada. 

Una placa bajo la figura de San Marcelino, en el colegio Maristas, recordará a este grupo de estudiantes que piensa repetir su encuentro, a no mucho tardar en la próxima primavera, degustando un suculento cocido.