Una nueva promoción de 316 viviendas en régimen de alquiler asequible comenzará a levantarse en próximas fechas en el barrio del Polígono de Santa María de Benquerencia, en Toledo capital. Las obras deberán estar finalizadas antes del 30 de junio de 2026, según el convenio firmado el pasado miércoles entre el Ministerio de Vivienda y Agenda Urbana y la Consejería de Fomento del Gobierno de Castilla-La Mancha.

Según ha podido saber este periódico, estas viviendas se ubicarán en una parcela de algo más de 7.300 metros cuadrados ubicada en el número 55 de la calle Río Fresnedoso esquina con Río Bullaque, frente a la iglesia Santísimo Corpus Christi.

El suelo, de titularidad pública, es propiedad de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha, que lo cederá de forma gratuita a la empresa pública Gestión de Infraestructuras de Castilla-La Mancha (Gicaman) para que promueva las obras en régimen de colaboración público-privada.

700 euros mensuales

La Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha ha informado de que las viviendas tendrán una superficie útil media de 71 metros cuadrados y el precio final de alquiler será de 700 euros mensuales, suponiendo un ahorro de 1.800 euros al año con respecto a los precios del mercado de una ciudad como Toledo que, según el consejero, está "tensionada" en materia inmobiliaria.

El precio medio para alquilar una vivienda en el distrito toledano de Azucaica-Santa María de Benquerencia es de 7,6 euros por metro cuadrado, según datos del portal especializado Idealista, por lo que la cuota mensual media de un piso de 71 metros cuadrados es de 539 euros. Sin embargo, la zona del Polígono donde se van a levantar estos nuevos pisos es céntrica y cercana a todos los servicios como hospital, centro de salud, colegios, parques, comercios, etc., y los alquileres tipo están entre 750 y 850 euros mensuales. Además, la oferta tampoco es muy amplia, con únicamente una veintena de viviendas disponibles hoy por hoy.

Contra la especulación

Para la construcción de esta promoción se invertirán 42,5 millones de euros, de los cuales 15,7 serán aportados como ayuda por el Ministerio de Vivienda a través de los fondos europeos 'Next Generation'.

Estas 316 viviendas formarán parte del parque público durante un período mínimo de 50 años, ampliable hasta 75.

"Creo que esto es un contraste con lo que ocurrió con otras políticas, donde se hizo una gran inversión pública en los primeros años, pero después esas viviendas dejaban de tener una rentabilidad social y estaban al servicio del mercado, en algunos casos incluso promovido por administraciones públicas al servicio de la especulación. Eso se acabó", dijo la ministra del ramo, la castellano-manchega Isabel Rodríguez, durante la firma del convenio.