Los alcaldes de los municipios de Uceda y Valdepeñas de la Sierra (Guadalajara), Francisco Javier Alonso y José Luis Palmero, han recomendado a sus vecinos que "extremen precauciones" y que no se acerquen a los cauces y arroyos ante el desembalse por parte del Canal de Isabel II de la presa del Atazar (Madrid) y la crecida del río a su paso por estas localidades.

De momento, la crecida apenas ha afectado a una propiedad municipal del Ayuntamiento de Uceda que se utiliza como granja escuela en verano pero que ahora esta cerrada. Sin embargo, su alcalde, ante el temor de que la crecida pueda ir a más, ha emitido un bando en el que ha pedido a sus vecinos que no se acerquen a las zonas que puedan resultar inundables, ha señalado a Europa Press.

"Nos lleva afectando ya diez días pero aquí solo ha afectado a una finca municipal", ha señalado, con cierto miedo por si el agua pudiera llegar a la depuradora de Caraquiz, que esta pegada al río y podría "mojar" las bombas.

Hace años sí sufrieron inundaciones y se vieron obligados a sacar a algunos vecinos de la zona afectada, de ahí que Alonso solo espera que la situación no se repita.

De su lado, desde el Ayuntamiento de Valdepeñas de la Sierra, su alcalde también ha sido avisado de la situación y, al igual que el regidor de Uceda, va a emitir un bando en las próximas horas para que los pocos vecinos de su pueblo no se acerquen al río, aunque reconoce que en su caso, les queda algo más lejos que en el caso de Uceda.

De momento, en su pueblo solo afecta a lo que se conoce como el Pontón de la Oliva, que es una antigua presa del sistema del canal que queda lejos del pueblo pese a estar situada "al borde" de su término municipal.