La Audiencia Provincial de Ciudad Real, en una imagen de archivo.

La Audiencia Provincial de Ciudad Real, en una imagen de archivo.

Ciudad Real

A la cárcel un hombre de Tomelloso (Ciudad Real) por abusar de dos mujeres continuamente

Alquilaba habitaciones de su vivienda a mujeres en situación irregular y las sometía a tocamientos bajo amenazas. 

23 septiembre, 2022 17:30

La Audiencia Provincial de Ciudad Real ha condenado a ocho años de cárcel a un hombre que alquilaba habitaciones de su vivienda en Tomelloso (Ciudad Real) a mujeres en situación irregular en España, a las que sometía a tocamientos.

La sentencia, a la que ha tenido acceso Efe, le considera autor de un delito continuado de agresión sexual con la atenuante de responsabilidad penal de embriaguez, por lo que le condena a la pena de 8 años de prisión y a la medida de libertad vigilada por un periodo de otros cuatro años, así como prohibición de aproximarse a menos de doscientos metros de las víctimas, así como comunicarse con las mismas por cualquier medio por un periodo también de cuatro años.

Deberá indemnizar a las dos víctimas con la cantidad de 10.000 y 15.000 euros respectivamente por los daños morales padecidos.

Alquilaba habitaciones desde 2018

De la prueba practicada, señala la sala en su sentencia, se considera culpable a este hombre que desde, al menos, 2018 alquilaba de manera permanente distintas dependencias de la vivienda a mujeres indocumentadas en España, a quienes cobraba un precio por el alquiler aproximadamente de 100 euros.

En concreto en el año 2018 alquiló dos dependencias a F.L. y F.E.B., a quienes el acusado aprovechándose de que se hallaban de forma irregular en España, por lo que podrían ser expulsadas a su país de origen, las sometió a tocamiento libidinosos bajo la intimidación de que las denunciaría.

Así, en relación a F.E.B., el acusado la buscaba insistentemente, y de manera habitual durante los más de 3 años que habitó con él en la vivienda.

Asimismo el acusado se sentía "especialmente atraído" por F.L., a la que buscaba también continuamente y cuando estaba sola aprovechaba dichos momentos para realizarle tocamientos.

La sentencia mantiene que el acusado ejecutó los hechos tras haber ingerido alcohol, que le afectaba "levemente sus capacidades volitivas e intelectivas".