Imagen de una de las concentraciones de los trabajadores de transporte sanitario.
El transporte sanitario de Castilla-La Mancha no descarta la convocatoria de una huelga indefinida
UGT y CCOO piden a Digamar, empresa mayoritaria en el sector, que se siente a negociar o escalarán en sus medidas de presión.
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Los sindicatos UGT y CCOO han exigido a Digamar, empresa mayoritaria del transporte sanitario de Castilla-La Mancha, que rectifique su postura y se siente a negociar de forma inmediata para intentar solucionar el conflicto que sufre el sector o se verán obligados a convocar una huelga indefinida.
Ambas organizaciones han asegurado que tras la mediación celebrada el 27 de junio y la buena disposición de las empresas concesionarias de Toledo y Cuenca, "la actitud de desidia y falta de compromiso de Digamar ha hecho imposible dicha convocatoria para iniciar las conversaciones".
“La empresa ha optado por el inmovilismo, obstaculizando cualquier posibilidad de alcanzar un acuerdo justo y necesario para un sector esencial como es el del transporte sanitario. Esta actitud solo representa una falta de respeto hacia sus trabajadores y trabajadoras”, han agregado.
Ante esta situación de bloqueo, UGT y CCOO han confirmado que continuarán interponiendo las correspondientes denuncias en el Juzgado de lo Social y la Inspección de Trabajo por "los incumplimientos de las empresas y la vulneración de los derechos" recogidos tanto en el IV Convenio Colectivo como en la Ley de Prevención de Riesgos Laborales.
"Seguiremos defendiendo con firmeza los derechos de los trabajadores y trabajadoras del transporte sanitario y no descartamos convocar la huelga indefinida si esta situación se mantiene”, han zanjado.
Demandas
El sector del transporte sanitario en Castilla-La Mancha ha celebrado en los últimos meses varios paros parciales por una falta de mejoras en sus condiciones laborales que, según aseguran, se remonta a 13 años atrás.
Entre las demandas que plantean en la negociación de un "convenio digno" se encuentra la subida de un 3 % en los salarios, "congelados desde 2012" y la reducción de su jornada anual, que en la mayoría de los casos supera las 2.100 horas.