El Gobierno de Castilla-La Mancha ha criticado este miércoles el nuevo trasvase automático de 24 hectómetros cúbicos, correspondiente al mes de febrero, y ha pedido la "modificación urgente" de las reglas de explotación.

Así se ha expresado la consejera portavoz del Gobierno autonómico, Esther Padilla, durante su comparecencia en la rueda de prensa que ha ofrecido para informar sobre los acuerdos adoptados por el Consejo de Gobierno.

Padilla, a preguntas de los medios, se ha posicionado a favor de los municipios ribereños, que denunciaban este martes este nuevo trasvase y lamentaban que, un año después de la aprobación del nuevo plan de cuenca del Tajo, no se hayan modificado aún las nuevas reglas de explotación.

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"Estamos totalmente de acuerdo con ellos. Es la misma postura que compartimos todo el mundo, el Gobierno regional, los municipios ribereños, los expertos, la Unión Europea, las leyes que se van aprobando y la emergencia climática", ha señalado la consejera. 

Padilla ha recordado que "se ha avanzado mucho" en todo lo relacionado con el trasvase, pero ha indicado que "todavía queda mucho por hacer y de manera urgente". En este sentido, ha vuelto ha exigir la modificación de las reglas de explotación "para que no se produzcan este tipo de situaciones mes a mes, injustas con el desarrollo económico de Castilla-La Mancha".

"Cada vez que hay un trasvase vemos como se producen perjuicios a lo que es el río natural, a su caudal natural, a la biodiversidad y a las oportunidades de desarrollo de la región", ha incidido, para finalizar criticando una vez más la acción. "No nos parece bien ninguno de los trasvases que se hacen".