Paco Núñez, presidente del PP de Castilla-La Mancha desde 2018, seguirá liderando la formación política los próximos años tras el congreso regional extraordinario que el partido celebrará los próximos días 13 y 14 de noviembre en Puertollano (Ciudad Real). Y lo hará sin la necesidad de tener que enfrentarse a unas primarias ya que ha sido el único candidato que ha dado el paso de optar al puesto de mando, pese a que los movimientos internos han sido muy fuertes durante las últimas semanas e, incluso, el diputado nacional Juan Antonio Callejas amagó con plantarle cara, un órdago que finalmente no ejecutó en aras de la unidad. 

El plazo de presentación de candidaturas se ha cerrado a las dos de la tarde de este sábado 23 de octubre y ningún otro afiliado se lanzará a la aventura. Y menos después de que Paco Núñez, que tendrá camino libre para reeditar su liderazgo, haya sabido jugar sus cartas tanto en Castilla-La Mancha como en Génova -fue desde allí desde donde se decidió adelantar un año la celebración del congreso- y desactivar al sector que ponía en duda su idoneidad para el puesto, compuesto en buena medida por una generación de políticos anterior a la suya. Ponderar la fuerza de los críticos, que han optado por no salir a la palestra, no será posible sin primarias, y a partir de ahora habrá que comprobar si la conformidad exhibida en distintos actos públicos celebrados los últimos días es real o impostada. 

Lo que es público y tangible es que Paco Núñez se ha presentado este sábado en la sede de los 'populares' castellano-manchegos cargado con más de 8.000 avales de los afiliados, muchos de ellos cargos nacionales, regionales y municipales, lo que ha calificado como un "apoyo masivo" que dice tenerle "abrumado". Y ha puesto en valor que la ingente cantidad de firmas de respaldo a su candidatura -90 veces más del mínimo exigido- ha llegado "desde todos los puntos de la región", posiblemente para reforzar la idea de que provincias en la que los presidentes del partido no forman parte de su núcleo duro, tales como Toledo o Cuenca, también están con él

Alternativa a Page

A un año y medio de las próximas elecciones autonómicas, previstas para mayo de 2023, Núñez podrá exhibirse, gracias al generoso apoyo recabado por sus compañeros de partido, como el líder de un PP castellano-manchego "fuerte, unido y comprometido con su tierra". El proyecto de los 'populares', ha asegurado, se está construyendo "entre todos" y "es, sin lugar a dudas, la alternativa a Page en nuestra región". Núñez, como líder renovado, saldrá del congreso regional mucho más reforzado para ser el próximo candidato conservador a la Presidencia de la Junta, algo que decidirá directamente la cúpula nacional del partido meses antes de ir a votar, tal y como rezan los estatutos del partido.

"Castilla-La Mancha merece ilusión, liderazgo, compromiso y merece que los castellanomanchegos sean los protagonistas de la vida diaria de nuestra región", ha señalado Paco Núñez, que cuando restan 20 meses para los comicios ha dejado claro que seguirá siendo el presidente del PP de Castilla-La Mancha porque así lo han querido los afiliados, lo que ha calificado como un "honor y una honra". Quiere una segunda oportunidad para tratar de derrocar al socialista Emiliano García-Page del Palacio de Fuensalida, algo que no consiguó en 2019 solo siete meses después de debutar como líder regional de la oposición, y ha sabido despejarse el camino para ello.