La venta de cigarrillos repuntó por primera vez desde que se declarara el estado de alerta por la pandemia a España y subió un 1,1 % en junio, con Castilla-La Mancha como la comunidad autónoma en la que más crecieron las ventas, hasta un 13 %.

Esta subida en las ventas de tabaco, que se ha producido coincidiendo con la desescalada, las elevó en junio hasta los 186,6 millones de cajetillas, en contraste con las caídas de los tres meses anteriores.

Así se desprende de las estadísticas publicadas este miércoles por el Comisionado del Mercado de Tabacos, que reflejaban en mayo y abril un desplome del 26 % y un retroceso del 1,8 % en marzo, que desde el sector relacionan con el confinamiento social, que llevó a cerrar la hostelería (también el ocio nocturno) y redujo drásticamente el número de turistas, entre otros factores.

De acurdo a la misma fuente, en el primer semestre del ejercicio la venta de cajetillas (con 20 cigarrillos cada una) acumula una bajada del 8,5 %, hasta los 986,7 millones de paquetes.

En valor, la subida en junio fue del 0,7 %, hasta los 845,5 millones de euros, mientras que en el acumulado de los seis primeros meses de 2020 la cifra cae casi un 9 %, hasta los 4.471,3 millones de euros.

Este descenso también ha afectado a la recaudación por todo tipo de tabaco: el Estado ha ingresado vía impuestos especiales 3.152,7 millones de euros en la primera mitad del ejercicio y otros 897,5 millones a través del IVA, con una bajada por encima del 7 % en ambos casos.

Por comunidades, las subidas más altas por número de cajetillas comercializadas se registraron en Castilla-La Mancha (+13 %), Madrid (+7,8 %) y Andalucía (+7,6 %); en el extremo contrario aparece Baleares, donde la venta de cigarrillos sigue en caída libre (-54 %), y forma más leve en Cataluña y Comunidad Valenciana.

En el resto de labores del tabaco, destaca el fuerte incremento de las ventas que sigue produciéndose en el de pipa, sobre todo por la moda de las cachimbas, con una subida en el primer semestre de 2020 del 43,5 %, hasta los 843.000 kilos.

También crece -aunque de forma más comedida- el tabaco para liar, que apunta un aumento del 3,59 % entre enero y junio, hasta sobrepasar los 3 millones de kilos, en contraste con el descenso de los cigarros (puros), cuyas ventas se recortaron un 6,7 %, hasta los 917 millones de unidades.